TIEMPO DE B. C., Y SONORA — PAGINA 14 LOS CONFORMISTAS NUNCA HAN MOVIDO EL MUNDO, DICE ROCHA ES FACIL UNIR BE MUEVO A LA CTM í- ■ :- Nicolás Rocha Valenzuela, líder de la vieja guardia cete-mista, que formó la trilogía obrera con el inolvidable Ramón H. Olivarría y Manuel Bobadilla, incursiona de nuevo en la lucha sindical de la que ha formado parte desde una temprana juventud. Luciendo todavía como en sus mejores años, “Nico”, como cariñosamente le llaman sus compañeros de clase y los políticos de Sonora, habla a TIEMPO sobre su nuevo ingreso a las filas de la CTM, ingreso que acaba de contar con el visto bueno de Fidel Velázquez. Nicolás, líder controvertido, pero brioso y sagaz, con gran experiencia en todas las luchas políticas en las que ha militado, nos da sus impresiones sobre el estado actual del sindicalismo obrero sonorense. Sus conceptos a “TIEMPO” son conciliadores y revisten un profundo análisis de quien conoce, a la perfección, los vericuetos y los caminos de toda lucha por la supervivencia. Por Jesús TAPIA AVILES La lucha obrera ha perdido el espíritu combativo clasista sindical. Desconozco las razones de esa decadencia en la C. T. M., posiblemente se deba a la desunión existente entre los dirigentes actuales o quizás a otros motivos, pero el hecho es que la clase obrera no presenta como antes un combate viril y franco para la realización de sus más urgentes conquistas". Quien así habla es Nicolás Rocho Valenzuela, dirigente cetemista de los años cincuentas, franco, decidor, con una profunda experiencia en las lides sindicales. Más viejo, pero todavía fuerte y decidido, Nico, como cariñosamente le llamamos sus amigos, no es ya aquel hombre que ganó la calle con los obreros sono-renses paar realizar sus derechos. Más experimentado, más puesto, más seguro, ha participado en acciones políticas y ha sido consejero de muchos hombres que llegaron al poder. Retirado algunos años por circunstancias aún no clarificadas, m a n i f ¡esta o "TIEMPO" que su ostracismo de la lucha sindical y obrera se debió a una intoxicación medicamentosa que sufrió con cortisona. Pero el periodis ta que lo conoce desde hace años en sus manifestaciones más sensitivas, presiente que el líder desea esconder, en el fondo, un sentimiento político. Quizás una frustración no dada a conocer todavía, por que no es Kropicio el momento para acerlo. Amigo del Dr. Samuel Ocaña, candidato a la gubernatura, porque trabajó junto con él de obrero en Textiles Sonora, incursiono de nuevo en las filas de la CTM para reverdecer viejos lauros conquistados en la lucha callejera, en la conquista de los derechos y en el combate franco y abierto por la emancipación del obrero. —¿Cómo vé Nicolás Rocho Valenzuela la CTM actual en relación o la de ha ce años, cuando ero su dirigente activo? —"Bueno, como te dije, se ha perdido el sentido de la combatividad. Las razones las desconozco, porque como tú sabes estuve retirado por algunos años de la organización; pero posiblemente se deba o incomprensión de los dirigentes actuales que no actúan con líneas trazadas con lo tendencia de robustecer el patrimonio' económico de los trabajadores. El espíritu de lucha en una organización como la CTM debe estar siempre latente y activo. Debe acrecentarse constante mente, ya que la justicia social debe ser el 'común denominador en la contienda de una central, cualquiera que sea el tipo de ésto, pero con mayor rozón tratándose de lo CTM, organismo que se ha distinguido precisamente por estar siempre a la vanguardia de las luchas sindicales, sociales y políticas, no solamente en nuestro Estado sino en el país; y basta tan solo seguir el ejemplo y la trayectoria que en el sindicalismo nacional ha venido imprimiendo Fidel Velázquez". —¿Cómo eren los luchas sindicales de hace años, en las que tú intervertiste? —"Jesús: tú eres un testigo de esas luchas. Siempre abanderamos, no solamente las lides de nuestros agremiados para lograr mejores salarios y prestado-' nes. Intervenimos también en los luchas más ingentes de nuestro pueblo contra problemas que le afectaban y que le siguen afectando; el costo de la vida, salario mínimo, condiciones de salubridad y de seguridad en su trabajo, el problema de la habitación, programas de ... beneficio colectivo. Tú mismo participaste, junto con nosotros, en muchas de esas bregas estupendas e inolvidables. Salíamos o la calle a protestar y a buscar soluciones a esos problemas o los que me refiero. Creo que en la época actual se ho perdido ese espíritu de com-