140 REVISTA EVANGELICA Marzo En Su ministerio le pusieron obstáculos los judíos: 1. Se burlaron de El. 2. Procuraban apedrearle. 3. Decían que tenía demonio. 4. Que era samaritano. 5. I^e buscaban para terminar con Su vida. Pero El con Su prudencia pudo evadir la muerte en a-quellos instantes hasta que se llegara la hora señalada por el Padre. En medio de esta tempestad llamó a sus discípulos, los intruyó y les envió a predicar el Evangelio Concluimos, pues, que la vida de Cristo en la tierra fué un milagro en sí, y obradora de milagros en beneficio de los demás. II. La Propagación Milagrosa de la Iglesia Primitiva Los discípulos, después de la muerte de Cristo, quedaron temerosos, pero después recibieron el refuerzo del Espíritu Santo en cumplimiento de la promesa hecha por Cristo (Hechos 2:4). Desde ese momento empezaron a predicar el Evangelio sin cuidarse de los peligros que les rodeaban, lo que nos prueba que un poder sobrenatural los había henchido y transformado su carácter tímido, en virtud del cual Pedro predica en el mismo Sanedrín donde Cristo fue juzgado (Hechos 4:6-8). Pedro predica en el día de Pentecostés y tres mil almas se convierten al cristianismo (Hechos 2:41). Aquí se ve el poder de Dios obrando milagrosamente en tres mil almas que aceptan el testimonio de Jesús como Hijo de Dios, y además le aceptan como su Salvador personal, conversión tan notable que aun asombra. La persecución se desata, muchos sucumben vícti mas de sus enemigos, pero la Iglesia se extiende y se expande en distintas partes porque los que iban huyendo no callaban estas cosas. Aun esto es milagroso. Pero sobre todo se destaca el testimonio de Pablo que era un acérrimo enemigo del cristianismo, y yendo en persecución de los cristianos, Cristo se le aparece en el camino a Damasco, y milagrosamente cambia de propósito y se convierte al Cristianismo (Hechos 9:1-9). Y el mismo Pablo llega a ser el gran predicador de los gentiles, llevando una vida tan llena de accidentes, que solo el poder milagroso de Dios le pudo librar de la muerte y ayudarle con la responsabilidad que sobre si tenia. En todo esto hemos visto el extendimien-to milagroso de la Iglesia Primitiva. III. La Existencia y Propagación Milagrosa de la Iglesia Actual. En la Iglesia Primitiva nos encontramos con los errores introducidos por los herejes contra los cuales las columnas de la iglesia cristiana y aun la iglesia misma tendría que combatir, con el fin de conservar puras sus doctrinas par? el bien de la posteridad. Estos errores se han propagado durante todos los siglos, pero vemos que la verdad permanece intacta. Esto prueba el gran cuidado de Dios por Su santa religión, no queriendo que sea pervertida por hombres impíos que no aman sino la corrupción y la vida disoluta. La Iglesia Cristiana en estos tiempos está pasando por una gran crisis espiritual, pero siem-