RBOKNÍD RACION LOS GRANDES VAMPIROS. ¿Quertroot perder nuejtri fkciomlidid? Castigar A la víctima en benefi-1 io del malhechor, be ahí lo co-l CIO mún bajo 1a odiosa Dictadura de Porfirio Díaz. El ciudadano no ?es un hombre con derechos inalienables, sino un animal doméstico que puede ser sacrificado cuando los? amos lo dispongan.. Nadie puede ser dueño de un pedazo de tierra, de una casa, de algunos animales útiles, sin estar constantemente amagado por el cacique 6 por el déspota. Y el que se oponga á dar lo suyo al cacique ó al déspota, puede prepararse para sufrir el calabozo, la ley fuga ó el confinamiento en un cuarte1. Antes de que Porfirio Díaz u-surpase el Poder, había diseminadas en el territorio nacional muchas comunidades de indígenas que producían un notable bienestar á esa simpática, heroica y sufrida parte de nuestra población. El indígena tenía derecho en su comunidad á sembrar una porción de tierra suficiente para sus necesidades, á aprovechar el agua del río ó del manantial cercano y á aprovechar los productos de las regiones boscosas vecinas. En tales circunstancias, la condición de nuestra población indígena era un tanto desahogada. Pero tocó á la Patria el infortunio de que un mal hijo suyo se aprovechase de las circunstancias especiales en que se encontraba el pueblo impo niéndose por medio de la fuerza, y desde entonces, un enjambre de aventureros cayó sobre las comunidades de indígenas despojándolos de toda propiedad y reduciendo á la esclavitud á los que habían sido hombres libres. Los hombres ya no trabajaron sus propias tierras: dolientes y melancólicos regaron con su sudor los mismos surcos por donde sus padres habían pasado altivos y libres. ¿Quienes fueron los enriquecidos con la riqueza del pueblo? Fueron Terrazas, Izábal, Creel, Corral, Díaz, el clero, toda la hampa que del 76 á la fecha ha devorado el vigor nacional. Tenemos á la vista un nuevo caso de despojo. Toda la República sabe que sobre el Estado de Morelos se halla un vampiro que medra á costa del bienestar común. Manuel Alarcón se llama ese vampiro. Los indígenas del pueblo de Santa Maria, cercano á Cuerna-vaca, eran propietarios de un monte del que sacaban grandes ventajas. Dicho monte es muy rico y ha tentado siempre la codicia de los aventureros. Uno de ellos, Manuel Alarcón, Gobernador del Estado, logró arrebatárselo á los ind ígenas. Hace unos meses que Manuel Alarcón comenzó á tratar la venta del monte con el propietario de la Hacienda de Temisco en cerca de cien mil pesos. Alarcón manifestó á los indígenas que la venta se iba á hacer en diez mil pesos. Los indígenas se opusieron, dieron poder á dos Abogados de la capital de la República y lograron llevar el asunto hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Tan pacífica medida tomada por los indígenas, irritó á Manuel A-larcón, quien comprendió que se le iban á escapar de las manos los miles de pesos que ya soñaba poseer. Todos los días hostilizaba á los honrados vecinos de Santa María enviándoles soldados con jefes que exhortaban al pueblo á que se desistiera del juicio que había entablado en defensa de la propiedad del monte. Uno de tantos días se presentó á la cabeza de la fuerza oue diariamente enviaba Manuel Alarcón, un ban dido que responde al nombre de Julio Alarcón y es hermano, del Gobernador. Julio Alarcón hizo reunir á los indígenas y les habló de un modo que revela hasta qué punto las autoridades se consideran dueñas de vidas y haciendas en nuestra infortunada Patria. Dijo Julio Alarcón: «Por última vez vengo á decirles que les conviene la venta del monte, y que, si no consienten, Uds. lo saben; y si insisten en hacer valer sus derechos, no les extrañe que el día menos pensado haga yo un escarmiento con alguno de Uds., pues ya ven que el Gobierno es fuerte y no hay que oponérsele.* Manuel Alarcón iba á perder el juicio, cuando ocurrió á un personaje de la familia del odioso Dictador, que consiguió de éste la consigna de que se fallara el negocio á favor de Alarcón, fuera eso justo ó no Así sucedió, y entonces comenzaron las represalias. Los ciudadanos Jesús Hidalgo, Isidro Guerrero, Cruz A-yala, Anacleto Yáñez, Ascencio Pedroza,-Apolinar Rayón, Lino Flores y Apolinar Ríos fueron ci tados á la Presidencia Municipal Eara la práctica de una diligencia. Hchos ciudadanos sin sospechar el lazo infame que se les tendía, ocurrieron el día 11 de Mayo del corriente año á la cita. Inmediatamente, sin decirles el porque del procedimiento, fueron encarcelados y después consignados al servicio de las armas. Lino Flores y Apolonio Ríos tuvieron la fortuna de escapar al servicio de las armas, pero sufrieron en cambio algún tiempo de prisión. En vista de esos atentados y temiendo correr la misma suerte que los primeros ó de ser asesinados por medio de la ley fuga, abandonaron sus hogares y sus familias os ciudadanos Francisco García, Marcos Jiménez, Domingo Herrera, Lucio Flores, Andrés Rayón, Eligió Herrera, Pedro Ruiz, Victoriano Martínez, Epifanio Gutiérrez, Severo Herrera y o-tros. ¿Qué conclusiones podemos sacar de lo anteriormente dicho, que no sea la triste, la dolorosa conclusión de que en nuestra Patria no alumbra un rayo de justicia? De eso estamos convencidos los mexicanos; pero parece que ya estamos acostumbrados al ultraje continuo, á la vejación incesante, pues nos conformamos con suspirar por la libertad, con volver los ojos hacia nuestro cielo manchado por la ignominia, sin voluntad para abatir la soberbia de la tiranía, sin resolución para romper las cadenas que nos envilecen. Tenemos á la vista bosques hermosos, valles riquísimos, montañas preñadas de riquezas; pero nos falta alma para conservar lo que la naturaleza puso en nuestras ineptas manos, nos faltan puños para someter á los que nos despojan. Apenas si una raza viril, la de los yaquis, ha sabido protestar contra el robo y la barbarie. ¿Hemos llegado al último grado de envilecimiento? No queremos creerlo; pero sí estamos en sus lindes y necesitamos reaccionar virilmente si no queremos perder nuestro nombre y nhestra raza. su vida de pillaje y asesinato que le valió huir de Nuevo León, Poco tiempo después, abrió Mucio una cantina y un billar que le dieron muy bueno* resultados, pues en ellos se ponía en comunicación con todos los bandidos de aquel rumbo del Estado de Puebla, y cuando Porfirio Díaz se levantó en armas contra el Gobierno del Sr. Lerdo, el propio Coronel Cristóbal Palacios lo animó á que se uniera á los pronunciados si no quería morir ahorcado por las fuerzas del Sr. Lerdo que lo pedían vivo ó muerto, pues aquel gobernante no consentía bandidos ni menos les daba los puestos públicos. Por eso tuvo el ^r, Lerdo tan encarnizados enemigos. Así fué militar Mucio Martínez. No es nuestro ánimo seguir paso á paso al bandolero en su inacabable serie de atentados de todo género, atentados que le han valido el elevado puesto que con escándalo de la honradez y de la civilización ocupa. En los números siguientes continuaremos hablando de este colaborador de Porfirio Díaz. En un solo número es imposible relatar toda la historia del bandolero. Como nota que revela la impunidad de que gozan los malhechores, daremos la siguiente. Mucio Martínez es doblemente casado. Su en en Atención Las personas que durante el presente mes de Julio no manden cubrir sus subscripciones, quedarán borradas de nuestras listas. Tienen la obligación de enviar el importe de sus subscripciones todas aquellas personas que habiendo recibido un ejemplar no se hayan dignado devolverlo y hayan seguido recibiendo nuevos números. Algo sobre Mu-do fUrtioez Ahora que ha corrido con insistencia el rumor de que Mucio Martínez va ¡i enviar á esta ciudad algunos rufianes con el exclusivo objeto de hacernos desaparecer, nos apresuramos á seguir dando á conocer al bandolero que ha hecho de Puebla el campo de sus rapacidades y asesinatos. Después de haber sido dicha la verdad, puede Mucio Martínez llevar á cabo su criminal intento, pues siquiera nos habremos lie-1 | vado de esta vida la satisfacción de que hemos exhibido á uno de tantos tiranos que pesan sobre nuestra Patria, y la creencia de que el pueblo, una vez conocida la verdad de su situación, se apresurará á ejercitar sus derechos para no seguir sufriendo la vergüenza de ser gobernado por personajes que merecen el patíbulo. Mucio Martínez es natural de Galeana, Estado de Nuevo León. A la edad de veinte años se casó con su prima Agustina Martínez, una de las jóvenes más hermosas y honradas de Galeana. Mucio Martínez era agricultor, pero el honrado oficio del campo requiere abnegación y constancia en el trabajo para proporcionar el sustento. Portal motivo, Mucio Martínez prefirió ser ladrón y salteador de caminos. Por tan vergonzoso oficio, se le instruyeron tres procesos, y tuvo que huir de Nuevo León el malhechor para escapar á la horca. Huyendo llegó a Tepexi de las Sedas, Estado de Puebla, donde el Coronel Cristóbal Palacios le proporcionó algunos medios para que se ganara la vida. Mucio Martínez continuó texto, como cualquier otro, para embolsarse el dinero de lo* desgraciado*. —En Escalón, Chih., se conmemoró con una brillante Velada, el 18 de Julio. El orador oficial, Sr. Salvador Alvarez G., pronunció un hermoso y viril discurso, que terminaba con esta** palabras: “Si todos comprendiéramos la obra redentora del indio ;de Guelatao, no seríamos por más tiempo esclavos miserables del tirano que nos gobierna; no-soportaríamos por más tiempo un Gobierno indigno, seríamos libres!.,.... Nosotros le hemos elevado al Benemérito un monumento más grande que aquel que le edifican los tartufos gobernantes * Corremos traslado de estas palabras al tartufo Creel, que para desviar la atención pública de sus robos, erige monumentos á Juárez. La magnífica pieza oratoria del Sr. Alvarez G., fué premiada por el pueblo con vítores y aclamaciones, escuchándose algunos ¡mueras! al mal Gobierno de Chihuahua, á la tiranía en general y al Clero. ¡Bien, por los liberales de Escalón! —El Club «Franco Juan Antonio de la Fnente,* de Buda, Tex., organizó en honor de Juárez, una Velada que se llevó á cabo el 18 de Julio, con el mayor lucimiento. Hubo una concurrencia de cerca de cuatrocientas personas, entre las que se contaban las más distinguidas familias déla población. Los oradores, Sres. Kulalio Tre-viño, Antonio Valdés, Matías Reyes y Jesús Ma Jiménez, rayaron á gran altura, conquistándose entusiastas aplausos tanto por sus ardientes loores á la Patria y al insigne Juárez, como por sus soberbios latigazos al Dictador Porrio Díaz. Unimos nuestros aplausos á los muchos que ha recibido el Club de Buda por el éxito obtenido en la primera de sus fiestas patrióticas. — La primera Sucursal del Club «Benito Juárez* y «Sebastián Lerdo de Tejada.* solemnizó en Rit-che, Tex., el XXXIII aniversario de la muerte del Benemérito de América. El Sr. Victoriano López pronunció un discursoen que campeaba el más elevado liberalismo, y en la solemnidad reinógran entusiasmo patriótico. —El Club Patriótico Liberal «Mariano Escobedo,* de Douglas, Ariz., convocó el 18 de Julio á una gran reunión, que tendría por r(ez y dar á conocer á todos los mexicanos la Constitución y Reglamento de dicho Club, invitándolos á ingresar en él Conocido el liberalismo de nuestros compatriotas radicados en Douglas, era de esperarse el éxito de la reunión * * —Hace poco que en San Lyis Potosí un tal M. Carrión y Rubio, invitó á todos los masones de ese Oriente, á una reunión en la que se tratarían asuntos de interés para la Institución. Este Carrión y Rubio es Teniente Coronel del Ejército y está en la 5a Zona Militar de Presidente Suplente del Consejo de Guerra Permanente. Fué masón en México, del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, y en 3 de Enero de 1892 fué expulsado para siempre de la orden. Hoy es del Rito Nacional Mexicano. La junta que organizó Carrión estuvo muy desairada, pues se sospechaba que este individuo fuera un Agente de Bernardo Reyes para establecer en San Luis Logias Reyistas. —Las valerosas damas Ernestina R. Mandujano, Clara Berea Saldivar y Elena W. de Cuenca, publicaron en México una hoja suelta en la que glorifican á Juárez y flagelan al Clero Católico por su asquerosa corrupción. La hoja referida llegó hasta Pachuca, Hgo., y allí el mocho Gobernador Pedro L. Rodríguez se apresuró 2 prohibir la circulación del inte-lesante impreso. ¡Que contraste •fntre la cultura y valor de las damas liberales y la cobardía y es tupidez intransigente de ese Gobernador clerical! —El Cabo de la Gendarmería Municipal de Monterrey, Luis Olvera, encargado de vigilar los prostíbulos y también de cuidar la sala de Banderas del Ayuntamiento, se lleva las banderas á su casa y las utiliza en usos domésticos particulares. No ha faltado __________________________á quien le haga notar lo impropio prisión el Sr/josé Torres, dele-, de su proceder, pero él ha con-(banderas nacionales, es porque está autorizado por el Alcalde Pedro Martínez. Para las actuales autoridades nada significan la Pa-tjria ni sus enseñas. —El Sr Juan A. Carrillo, de I reanillo Zac., publicó el pasado 18 de Julio, una hoja suelta en honor de Juárez. Habla délos méritos insignes del Patricio, y termina diciendo que los verdaderos liberales no deben ser solamente platónicos admiradores de la obra d* Juárez; que deben guardarla, cooperar á engrandecerla por medios efectivos, como la difusión da la instrucción laica y la prác- tica de loe derechos político*. Siempre hemos sostenido lo mismo y confiamos en que en día no lejano el pueblo mexicano sabrá hacerse digno de Juárez, recuperando la libertad que se ha dejado hoy arrebatar por un tirano. co Excelente oportunidad. Remita vd. en giro de Ban-sobre, esta . plaza, ó New York, ó en billetes de Banco á la orden dt R. Bustamante, la cantidad de Si 10.00 moneda americana, y se le enviará por Express, libre de gastos, una máquina de escribir «OLIVER,* 6 una SMITH PREMIF3R último modelo. Agencia Comercial • P, O. Box., 584. St. Louis, Mo. El Cacicazgo imperante primera esposa se encuentra Galeana, N. L., abandonada y la más triste miseria. ¡DJD! Suplicamos á los Sres. Francisco Cabrera Uribb, de Orizaba, Ver., Angel Vega, de México, D. F., y Marcos Rodríguez, de Orizaba, Ver , nos envíen á la mayor brevedad la cantidad que adeudan por ejemplares que como Agentes recibieron para su venta. A nuestros Agentes en general, suplicamos se pongan al corriente en sus cuentas durante el presente Julio, para no vernos en el penoso caso de cobrarles por medio del periódico. Notas interesantes. El día 16 del corriente, quedó instalado en Saltillo el Club anti-reeleccionista “Miguel Hidalgo/’ ue is- Íen confesional ios y sacristías. SANTA BARBARA.—Albino Padilla á quien nonibió Terrazas Jefe Municipal de Santa Bárbara para lograr que le pague cierta can-. . , . ,1 tidad que le adeuda de^de hace C?r^a