La caricatura del General Huerta
Santiago R. de la Vega es un dibujante antihuertista, que aún cuando procura ri-<lictlli7T,r «>< pluma ptn-cuente las facciones del soldado de Rellano, no puede con seguir privarlas de fortaleza, ni virilidad. ¡ Un hombre fuerte, tenaz, indomable: eso
Y así lo di-
es el 'General Huerta! aparece hasta cuando bufan su adversarios.
El señor de la Vega admirador de Alvaro gón: y no obstante las rias indulgencias_.de su lápiz generoso, nunca ha podido dibujarlo con facciones de héroe ni con un gesto duro de férrea i.iasculinidad.Siempre aparece el cabecilla so-norense como un buen mozo y nada más. (En cambio, el general Huerta emerge siempre de su lápiz como un hombre, -sí ¡un hombre! el único tal vez que tiene el supremo prestigio de ensombrecer la blancura de la Casa Blanca.
Es que de la Vega, por más que quiera ser político, és fundamentalmente artista, grande» artista. Y la obra de arte,- cuando es- verdadera, no depende de la voluntad. Vamos a poner un ejemplo. En-rique Sienckievickz. escribió una novela popular que se llamó ‘"Quo Vadis.V en la cual quiso pintar la conversion del mundo pagano al cristianismo. Y a pesar de que la novela esU dedicada a loar las excelsitudes de la nueva religión, todos los lectores quedan enamorados de I e-tronio, el gentil y no de Vi-nicio, el cristiano. Lo mismo pasa a de la Vega: sus magníficas caricaturas procuran deiirimir a los reaccionarios y enaltecer a algunos caudillos । de la Revolución; pero a nos-ios lectores de' Sienckievieckz; nos suelen gustar más los retratos de las personas que trata de deprimir.
es un Obre-noto-
I Y entre todos estos retra- | tos, preferimos el del General
Huerta ¡Un hombre completo! A pesar de todos los pesares.



..'.. -1 A través de la Prensa [
La Convención. Zapatista.
“The. New York World/' publica iiiiiiúúúúúúúúTPmwfyp up up puupp •una crónica intervencionista rrwfdy, una crónica interasantisima de una sesión parlamentaria celebrada en la ciudad de México por los miembros de la Convención zapatista. Reproducimos algunos párrafos de las discurso que allí se pronunciaron, no solamente por curiosidad, sino porque demuestran el cambio-..absoluto que se
ha efectuado en el modo de pensar/ de algunos revolucionarios durante el breve término de un año.
Luis Zubiría y Campa, antiguo diputado maderista y Ministró de Hacienda Srt el Gabinete de’ Lagos Chá-zaro, e>ñ>re$ó lo siguiente:
“Wilson y nadie más que Wilson, es el responsable de la presente situación de México, porque Wilson desvergonzadamente apoyó a lavrevo-lución contra Huerta y ahora se
vuelve contra nosotros y nos amenaza, cuando ve que . el personalismo de Carranza es el que se interpone pa- . ra lograr la pacificación de México.”
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Rafael Pérez Taylor, diputado suplente del Congreso madeirsta, refiriéndose al Gobierno del General Huerta dij:
“Cayó no por eL poder de la revolución, sino por el terrible poder de
(Pasa a la última pág.)