Segundo Mago: Si, hijito. Esa estrella es más grande y más brillante que todas las otras estrellas. y siempre camina entre nosotros, indicándonos la dirección que debemos tomar. Nephtali: Nunca he oido tal cosa. Tercer Mago: Yo siento que estamos ya muy cerca, y por eso preguntamos a toda la gente, pero parece que nadie sabe nada. Ahora estamos en camino al palacio de Herodes, seguramente él sabrá dónde está el nuevo Rey. Aseneth: Yo sé que los judios esperan un Mesías, y que El llegará en gloria y potestad para sentarse sobre el trono de David. Mi tío siempre está leyendo las profecías. Pero yo creo que ese rey de vosotros no puede ser nuestro Mesías. Primer Mago: Sabemos solamente esto: que hemos visto la estrella de un nuevo rey, y que hemos venido para adorarle ofreciéndole los más ricos dones que poseemos. Yo le ofreceré este oro. Segundo Mago: Yo le traigo incienso muy raro y precioso. Tercer Mago: Y yo le daré mirra, pues es la cosa más costosa que tengo. Primer Mago: Bueno, no debemos gastar más tiempo. Muchísimas gracias, señoritas. Julia: Que la gracia de Dios vaya con vosotros, oh magos del oriente. Nephtali: i Cogiendo la mano del primer mago): ¡Llevadme con vosotros! Yo también quiero buscar a ese rey. Primer Mago: Que Dios te bendiga, hijito. Tal vez un dia tú también podrás adorar al nuevo Rey. Pero ahora tu lugar está con tu padre. < Los magos se van mientras los muchachos y las señoritas los miran en silencio, i Nephtali: (Como si estuviera pensando en alta voz': Y una estrella los guió. TELON. Escena II El Hogar de Amos ben Natanael (Toda la familia, menos Nephtali, están cenando, sentados en el piso según la costumbre antigua). Amos: ¿Dónde está Nephtali? Benjamin: Estaba jugando con los muchachos de Isaac ben Esdras ahora en la tarde. Ana: ¡Cuán curioso es ese muchacho! Enoc: Si, él siempre está soñando. Sara: Tiene tantos sueños que no tiene tiempo para ayudarme. (Entra Nephtali.i Amds: Ya es muy tarde para estar afuera hijo ... Nephtali: (Sin poner atención a su padree Dispénseme, madre, pero acaba de pasar una cosa muy rara. Simeón: i Riéndose i: ¡Nephtali y sus sueños otra vez! Nephtali: No fue un sueño, Simeón. Puedes preguntarle a Aseneth, o a Julia, como también a los muchachos de Isaac ben Esdras. Estábamos jugando cerca del pozo de agua cuando 4 llegaron unos hombres del Oriente. Vestían elegantemente y traian oro e incienso y mirra, y pidieron agua a Aseneth y a Julia, y nos dijeron que estaban buscando un nuevo rey en estas partes. Ellos habían visto una nueva estrella, muy grande y muy brillante, allá en el Oriente, y esa estrella los había guiado hasta Jerusalem. Están ahorita en camino al palacio de Herodes. Enoc: Yo no he oido hablar de un nuevo rey. Todos: Ni yo. tampoco. (Natanael levanta la mano pidiendo silencio, y se queda pensando muy seriamente.) Amos: ¿Qué tienes, padre? Natanael: Una estrella... reyes del oriente... un nuevo rey ... Me parece que hay algo muy familiar en todo eso ... Nephtali: Dinos, abuelito. ¿Qué quiere decir todo eso? Natanael: Si, somos judios. Pero, que Dios nos perdone, no hemos sido fieles en la religión de nuestros padres. Yo recuerdo que no le gustaban a mi padre todas las leyes de nuestra religión, las cuales ni aún podríamos aprender porque son muchas. El decía que deberia haber una mejor manera para adorar a Jehová. Pero mi abuelo nunca olvidaba esa promesa de un Mesías que iba a venir para sacar al pueblo escogido de la esclavitud. Oye, Sara ... Yo creo que ese antiguo rollo de mi abuelo todavia está aqui, ¿verdad? Sara: Quién sabe dónde. Mañana Elisabet puede buscarlo, si tú quieres. Elisabet: Rubén, el padre de Aseneth, tiene varios rollos; tal vez mañana él nos los prestará y podemos estudiarlos. Si de veras ha venido el Mesías, yo quisiera saberlo. Amos: Si, podemos buscar todo lo posible acerca del asunto. Nephtali: Me dijo uno de los Magos: Tal vez algún dia tú también podrás buscar al nuevo rey para adorarlo. Mas yo no tengo una estrella que me guie. TELON. Escena III Hogar de Amos ben Natanael (A la luz de dos o tres velas, los hombres de la familia están estudiando tres rollos, y las mujeres están tejiendo. Nephtali no está presente. Hay silencio por unos momentos, y entonces entra Nephtali con otro rollo). Nephtali: Aqui está otro. Me lo prestó el escriba, Jonás ben Aser. Ese es del profeta Miqueas. Ojalá que yo también supiera leer. Natanael: Dáselo a Simeón. El puede leerlo. Sara: ¿No has hallado nada todavia, Amos? Amos: Todavia no... pero, espérate... oye... aqui parece que hay algo ... Si... sí escuchen, todos. Esta es la profecía de Isaías, y aqui dice asi: Lector: (Escondido i "Porque un niño nos es EL PROMOTOR DE nacido, hijo nos es dado; y el principado sobre su hombro: y llamaráse su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Principe de paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán término, sobre el trono de David, y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto." Natanael: "Admirable ... Consejero ... Dios fuerte ... Padre eterno ... Principe de Paz," ... Si, eso es. Yo recuerdo ahora que mi abuelo leia las mismas palabras. Elisabet: Pues, según eso, parece que el Mesías ha de nacer como cualquier otro niño. Yo pensaría que él llegaría ... pues,... tal vez como un ángel del cielo, ya grande y fuerte. Otros: Si, yo también. Nephtali: No, si los magos acababan de ver la nueva estrella, quiere decir que el nuevo rey acaba de nacer, ¿verdad, abuelito? Enoc: (Interrumpiendo) Aqui está algo. Yo tengo aqui uno de los rollos más antiguos. Es de los Números. Tal vez no tiene relación con esc asunto. Pero dice así: Lector: "Verélo, mas no ahora: lo miraré, mas no de cerca: saldrá estrella de Jacob, y levan-taráse cetro de Israel, y herirá los cantones de Moab, y destruirá a todos los hijos de Seth." Nephtali: ¿Qué les dije? Alli tenemos la estrella de los magos. Ana: Qué interesante es ese estudio. Parece que estas palabras quieren decir que la estrella anunciará la venida de un rey. Amos: Es exactamente lo que dijeron los magos del Oriente, según Nephtali. Nephtali: Oh, padre, yo sabia bien que ellos tenían razón. De veras hay un nuevo rey. Pero, ¿cómo podemos hallarlo? ¿Dónde está? Amos: ¿Qué has hallado, Simeón? Simeón: Léelo tú, padre. Yo no lo leo muy bien. Pero yo creo que he hallado algo muy importante. Hay un pueblo no muy lejos que se llama Bethlehem, ¿verdad? Natanael: Si, se llama la ciudad de David. Amos: Ah, ese es el rollo del profeta Miqueas, y esta parte dice así: Lector: "Mas tú, Bethlehem Ephrata, pequeña para ser en los millares de Judá, de ti me saldrá el que será Señor de Israel, y sus salidas son desde el principio, desde los días del siglo." Nephtali: Entonces, ¿el nuevo rey ha de estar en Bethlehem? Natanael: Parece que si. Nephtali: Pues, ¿qué esperamos? ¡Vamos a buscarlo! Amos: Espérate, hijo. Si, yo creo que debemos ir. No está muy lejos. Pero ya es muy noche, y mañana es sábado. Mejor esperar el siguiente dia. Nephtali: Los magos seguían una estrella, pero ese rollo será nuestra estrella, y nos dice exactamente a dónde debemos ir. Oh, ya quisiera que fuera de dia. Natanael: Yo siento el deseo de hacer una oración a Jehová, pero no recuerdo ninguna de las EDUCACION CRISTIANA oraciones que hacia mi abuelo. Oh, Jehová de los ejércitos, enséñame otra vez a orar. TELON. Escena IV El campo cerca de Bethlehem (Un viejo pastor está sentado descansando. Entra la familia de Amos ben Natanael.) Amos: Buenos dias, amigo. Josué: La paz de Dios sea con vosotros. Amos: Tal vez tú puedes ayudarnos. Estamos de camino a Bethlehem buscando un nuevo rey de los judios. Josué: Ah, qué buena suerte que pasasteis vosotros por aqui. Seguro que si, yo puedo ayudaros, porque con mis propios ojos he visto al Mesías. Nephtali: ¿Tú lo has visto? Sara: ¿Y de veras ese nuevo rey es el Mesías? Josué: Escúchenme todos. Cada dia yo doy gracias a Dios porque a mi, tan humilde pastor por tantos años, descendió la gloria del Altísimo. Hace unos tres meses, más o menos, yo con mis tres hijos y dos nietos estaba guardando los rebaños a media noche no muy lejos de aqui. Estábamos medio dormidos todos cuando de repente una luz brillante y fuerte descendió del cielo. Tuve yo gran temor, pero entonces comenzó a hablar una voz hermosa diciendo: Lector: "No temáis; porque he aqui os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: Que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor. Y esto os será por señal: hallaréis al niño envuelto en pañales, echado en un pesebre." Josué: Cuando mis ojos se acostumbraron a la luz tan brillante miré yo y vi un ángel glorioso y esplendoroso. Abrí mi boca para hablar, pero no pude. Y repentinamente fue con el ángel una multitud de los ejércitos celestiales, que alababan a Dios, y decían: Lector: "Gloria en las alturas a Dios, y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres." Josué: Y aconteció que como los ángeles se fueron de nosotros al cielo, dijimos unos a otros: Pasemos pues hasta Bethlehem, y veamos esto que ha sucedido, que el Señor nos ha manifestado. Y fuimos apriesa, y hallamos a María, y a José, y al niño Jesús acostado en el pesebre, como dijo el ángel. Natanael: ¡El Mesías prometido en un pesebre! Nephtali: ¡Qué hermosa es esa historia! Amos: ¿Dónde está ese pesebre? Josué: Está en los establos del mesón de Elias ben Judas. Seguramente la familia ya no está en el establo, pero Elias sabrá dónde hallarla. Amos: Muchísimas gracias, señor, por tu ayuda y por esa historia tan preciosa. Josué: Que Dios vaya con vosotros, amigos. (La familia se va). (Pasa a la página 15) 5