es ro- y TO- a-que A-lia. so! on-pa-mo b¡B. ? la nta-ito, inte i si- sión un de-lera [un->mi- ides pos, >ercv no’’" ula- ílez, iz y íica-co- 'ris-ulos sus i el ible >ba-rito, mo» o a ora- en uee-nas, to-|O- HISTORIA DEL METODISMO EN AMERICA 1739-1939 Por A. M. Gómez El gran avivamíentoto religioso llevado a cabo por los hermanos Wesley en Inglaterra en el año 1 739, hizo su aparición en América en I 766; Felipe Embury predicador local de Irlanda, empezó la predicación del evangelio formando la primera sociedad metodista en la ciudad de Nueva York, lugar que hasta la fecha perdura como la Iglesia de la calle de San Juan; Tomás Webb Capitán de la marir^ Inglesa, y predicador local, se unió con inusitado celo al movimiento incipiente de Embury; coincidiendo con estas actividades, otro irlandés llamado Roberto Strawbrige organizaba sociedades metodistas en el condado de Frederick, Maryland. En 1769 el señor Wesley, envió un escogido contingente de predicadores que fueron: Ricardo Boardman, José Pilmoore, Francisco Asbury y Ricardo Wrigth, que vinieron a prestar sus valiosos servicios en el despertamiento religioso metodista, que a semejanza de un fuego abrazador, amenazaba incendiar las trece históricas colonias del continente americano; sus actividades fueron coronadas con opimos frutos, con tal suerte, que al terminar la revolución de independencia, había en el país 80 ministros itinerantes, con 1 5,000 sociedades organizadas. A raíz de la separación de las colonias americanas del Imperio Británico, quedó la Iglesia Metodista americana indecisa con respecto al derrotero a donde debería orientar j-us actividades, pues hasta la fecha dependía su jurisdicción de la Iglesia Madre, en Inglaterra, más el señor Wesley, con la clarividencia que le caracterizó definió su actitud ante el problema con las siguiente^ palabras: “Están ahora en plena libertad para seguir lo ordenado en las sagradas Escrituras, y nosotros juzgamos que será mejor .para us- EL HERALDO CRISTIANO tedes seguir en la libertad en que Dios los ha llamado”? Uno de los primeros problemas que se manifestó en la Iglesia americana, fue la falta de ministros ordenados, para la administración de ios sacramentos, teniend ) ocasiones en que un mmístro tenía que viajar ' hasta 400 millas para el cumplimiento de sus deberes, que en a-quellos tiempos escasos de caminos y medios de transportación resultaba difícil su acatamiento. Para sanjar el problema el señor Wesley que siempre estuvo atento a las necesidades de la Iglesia Americana, ordenó como presbíteros a Ricardo Whatcout y Tomás Vasey enviándoles a la América y en compañía del Dr. Tomás Coke presbítero de la Iglesia de Inglaterra a quién comisionó para que “dirigiera el rebaño de Cristo en América”, el señor Wesley escribió un ritual para que la nueva Iglesia celebrara sus servicios dominicales, incluyendo una abreviación de los artículos de religión de la Iglesia Anglicana, recomendándoles como forma de gobierno el Episcopado. En 1784 se celebró la primera Conferencia, en la ciudad de Baltimore, Maryland, el 24 de diciembre en la cual se dió forma oficial a la Iglesia la cual quedó formada por 60 ministros; se aceptó por unanimidad todas las sugestiones del señor Wesley y fueron elegidos al episcopado los reverendos: Francis Asbury y el Dr. Coke. La Iglesia Metodista en América asumía todas sus responsabilidades y se constituía en iglesia autónoma. En 1828 ocurrió la primera división de la Iglesia, separándose un crecido grupo, alegando para sancionar su determinación, que la I-glesia Madre no daba la debida representación al elemnto laico, este grupo creció y tomó por nombre Iglesia Metodista Protestante. En 1844 por cuestiones de poderes episcopales y por el problema de la esclavitud,T ocurrió, otra subdivisión la que encausó sus actividades en los Estados del sur, y PAGINA 17 este grupo adogtó como nombre oficial Iglesia Metodista Episcopal del Sur. Dichas ramas desprendidas de la iglesia madre crecieron y hicieron árboles, pero siempre se sentía la nostalgia del hogar paterno y empezó la magna obra de la unificación la cual necesitó años para cristalizarse; dicha obra empezó a germinar en la Iglesia Metodista Episcopal del Sur, en el año 1845, pero siempre al presentarse el asunto ante la Conferencia General de nuestra Iglesia, era derrotado, hasta que se levantó otra generación La cual no conocía a José”, y que ignoró y perdonó los yerros de sus padres, y esta magna obra tuvo su epilogo en nuestra Conferencia General, de abril del año pasado, en la ciudad de Birmingham. El día 26 del mes de abril, se reunieron en Kansas City, Mo., 900 delegados los que discutieron y funsionarán los cuerpos que se separaron en una sola Iglesia que se llamará Iglesia Metodista, compuesta de 8,000,000 de miembros que con la ayuda de Dios, y la cooperación de todo buen metodista llevaremos adelante la gran comisión: “Id y Predicad el Evangelio a toda criatura”. a INFLUENCIA DE LA MADRE A dos señoritas quienes eran hermanas, se les preguntó: ¿Cómo llegaron ustedes a ser cristianas? y contestaron: Resistimos cuanto nos £ue posible y por mucho tiempo, pero el amable y precioso espíritu de nuestra madre, sus incesantes < cánticos, faz radiante y su inquebrantable paciencia, en n^edio de las pruebas y decepciones, nos conmovió y creimos necesario tener u-na religión como la de nuestra madre y aceptamos al Cristo del cal-vasio como nuestro único y suficiente Salvador personal. Los buenos sólo ven la muerte, los malos la experimentan. ° 16X TH,S DWW,W6 18 SUeSTANOARO FOR PRINTOUT FROM MICROFILM »