y loe seduce* eren fn^tiooe religion*, pero eren gui* deg* dirigiendo e de-*°¿Estem* confundid* por Iraprácti-eee ten discutid* de nuestros tiemp*? ¿Cuántos ee atreven e exponer lo que creen en cuento a la bebida en lee reunion* en eodedad, el baile, el juego de naipee, la lotería, etc.?
Necesitamos oír la v* de trueno de Eli* por loe slgtoe diciendo: ¿Hasta cuándo claudicaréis voeotros entre dos pensamientos?" La indecisión corroe el alma del hombre y destruye su influencia. Lee buenas intenciones han guiado a muchas personas al infierno. Hoy ee tiempo de probar con fuego les cosas que nos han hecho cobardes pera practicar y defender la verdad.
Oración: Padre celestial, dénos sabiduría para distinguir la verdad del error, y roncéden* grada para actuar de acuerdo con nuestras convicción*. Amén.
j. at de mayo: Dios contesta por medio del fuego, 1 Rey* It:»-*.
D primer versículo de este pasaje de la Escritura describe la desolación de aquélk* que claman a los falo* dios* en tiemp* de aflicción: “Y como pasó el medio día, y eltoe profetiraran hasta el tiempo del sacrificio del presente, y no había v*. ni quien respondió* ni much*..." Estaban sotos en un universo inanimado- La única respuesta a sus rue-g* desesperad* era el eco de su lastimero gemido. Hoy día algún* suelen buscar en la ciencia respuesta a la pregunta que obsesiona la mente del hombre: "¿Son favorabl* toe condición* del universo?” y la respuesta * tan sin esperan* como el silencio que r*pondió a 1* ruegos de 1* 460 profetas en el monte Carmelo.
Eltoe mostró la única forma en que el hombre puede encontrar mtisfacción en relación con toe profundos deseos del alma. Di* enseñó a Abraham, a Isaac y a Jacob cómo comunicar* con él. Ellas construyó un altar a Jehová, el Di* de su pueblo, y luego pronunció una sencilla oración de fe. Su oración fue contestada con fuego del délo que no sólo consumió la leña y el sacrificio, sino tos piedras del altar, y d polvo, y aun el agua que estaba en la reguera.
Oración: Padre nuestro, enséñen* a hacer oración* Benditos de fe. Amén.
V. » de mayo: Eltoe ternero*, 1 Rey* 19:1-6.
El paraje de hoy n* muestra cuán hu-
mano era el gran profeta EU*. Este hombre que * enfrentó *n gran valoral
El temor * una emoción que * presenta sin advertencia. Hay much* ejem-ntoe en la historia de trop* que han mostrado un heroico valor en much* batallas, y de repente huyen preeas de pánico. Sin duda cada uno de nosotros hemos experimentado moment* de temor dominante que n* ha hecho cobardes. ¿No hem* aprendido por medio de experiencias amargas que no podemos rater segur* de ser valient* en la hora de crisis? Cuando vemos que * aproxima el tiempo de prueba necesitamos orar para poder enfrentara* con el peligro desconocido, con el valor que * espera de un cristiano.
Un ángel ministró a Ellas de una manera muy práctica. Después de dormir más profundamente debajo de un enebro lo despertó d* veros y le dio de comer. Con el descanso y el alimento dempare-cleron sus temor*.
Oración: Padre celestial, dán* valor para enfrentara* a nuestras horas de prueba. Amén.
6. 10 de mayo: No estaba solo, 1 Rey* 19:9-16.
Eli* pensaba que estaba soto y dijo a DI*: "1* hlj* de Israel han muerto a cuchillo tus profetas: y yo solo he que-
dado."
Eli* estaba tan absorto pensando en su propia rectitud que ni siquiera le impresionó la tempestad tan violente que rompió 1* pefl* de 1* montes, ni el terremoto, ni el fuego, ni el silbo apacible de DI*: nada lo hi* cambiar sus pensamientos egoist*, siguió repitiendo lo mismo en forma vanaglorio*.
Nada entorpe* la mente del hombre como la presunción. ¿Cómo * wnthia Eli* cuando Di* le anunció que había 7,000 cuy* rodlll* no * habían doblado ante Baal? No hay much* person* que son verdaderamente hundid*
Oración: Padre nuestro, ayúdenos a ser más humild*. y hasn* mans* delante de nuestros prójlm*. Amén.
D. 31 de mayo: ¿A quién temeré? Salmo 27:1-6.
En 1* di* obscuros de 1943 un soldado * sentía cansado de la guerra en el Africa y estaba ternero* del futuro. En su hora de necesidad * dirigió a la Palabra de DI*, y en el paraje de hoy encontró p* duradera.
Muy al ronden* del Salmo 27, David hace la declaración valerosa: "Jehové *
la feríale* do *1 vida: ¿de quién he de atemortoerme? David, ei guerrero, levante en alto su estandarte de confian* en Di*. Aquí expre* una fe que no puede men* que traer victoria. Sfgtoe mée ter-de el Apóetol Juan declaró la mioma verdad: "Esta * la victoria que ven* al mundo, nuestra te.”
L* grand* descubrimientos dontífl-ros, especialmente aquell* de guerra que pueden mater a millón* de person* en much* tierras, han causado que much* teman el futuro. El poder de DI* no * men* ahora que 1* pro** de una edad que busca el poder. Necesitara* acercar-n* más que nunca a él, y preguntar como David: "¿A quién temeré?"
Oración: Di* de Fas, ayúden* a pensar en tu cuidado en tal forma que nu*-tra fe en cristo aumente. Amén.
Leeslén de te Eeewte P—ialnsl pera el 7 de Juto.
THeto: Un Profeta Deewnete te Cerrepeióu. Paraje: 1 Bey* 21:1-22:46.
L.	lo. de junio: Achab codicto una viña, Rey* 21:1-7.
Jaime era un niño de cuatro afl* que quería cerner dulc* antes de la comida, pero ee lo prohibieron, y * fue al rincón de to plesa, volvió su carite a la pared, la cubrió con sus d* manecltes, y comento a gimotear suavemente.
Su madre trató de corregirlo y m*-trarle cuán malo era disgustar* simplemente porque no podía hacer lo que deseaba.
A 1* poros minutos Jaime * allegó a su mamadta y le dijo: "Yo sé lo que me paraba, mamadta, era el diablo."
Achab era culpable del pecado de la codicia al deee* lo que no era suyo. Much* Cristian* son culpables de rate pecado. L* Di* Mandamientos lo prohíben, pero much* desobedecen esta ley y tienen que sufrir el castigo.
El pecado de disgustar* porque no * obtiene lo que * deeea * una característica muy común entre 1* nifl*. Cuando 1* padrw ven esto en sus nifl* deben hacer un esfuerso especial para corregir-tos. 81 no w disciplinan, sino que * 1* permite a 1* nifl* desarrollar este pecado, resultará en infelicidad futura para 1* padres, tanto como para 1* nifl*.
Oración: Padre celestial, ayúden* a enseñar a nuestros hlj* el modo más fells de vivir. Amén.
M.	2 de junio: La intriga de Jesabel, 1 Rey* 21:6-16.
Algún* Cristian* ceden a la tentación
de obtener 1* ooe* que desean por me» dio de intrigas, pero Di* toma nota de ello.
"Porque al que ama castiga, como 61 padre al hijo a quien quiere", y porque eom* de él, procura que volvara* a toe camin* de Cristo y a tener compañerismo con él.
No importa cuán duro s* el castigo, lo que Di* desea * que n* arrepintam*. Di* deseaba que Achab * arrepintió* de su pecado. El pecado quebrante nuestro compañerismo diario con el padre celestial.
¿H* sentido alguna v* que Dtoe está muy lejos, y que ¡a oración * inefectiva? Podem* hall* to respuesta en el versículo de la Biblia que dtoe:"...Nuestras iniquidad* han hecho división entre voeotros y vuestro Di*" (leal* 16:3).
Si 1* oración* de familia no son contestadas, pida a Dtoe sabiduría para descubrir si algún miembro de 611a no está haciendo la voluntad de Dtoe, o si tienen un pecado escondido que no permite que llegue una reepueete.
Oración: E*lrltu del Trino Dios, ven sobro mL
Espíritu del Trino Dios, ven sobre mL
Quebránteme, Consúmeme, Transfórmame y Lléname.
Espíritu del Trino Di*, ven sobre mí. Amén.
M. 3 de junio: Eli* denuncia a Achab, 1 Rey* 21:17-20, 27-29.
Según 1* Escrituras no deben casar* 1* Cristian* con 1* mundan*.
Achab pecó cuando * casó ron Jesabel, una poderosa y cruel mujer pagana. Como much* hombr* de hoy día, * arruinó porque * casó con una persona mala. L* matrimonl* mixtos no son guiad* por DI* Generalmente no tienen éxito, y algún* veo* tienen trágicas ronsecuenctoe en el bogar y su armonía.
No podem* dej* fuera del círculo familiar a Di* y esperar tener goto y p* dentro de éL Se necesita que entre el esporo y la esposa haya un espíritu cristiano, de am* y de comprensión, para pon* ejemplo ante toe hlj*.
La advertencia de Pablo: "No * juntéis en yugo oon 1* Infleles" (2 Corinti* 6:14), * aplica a cada faro de la vida.
81 en el matrimonio, o en el negocio, hay desilusión* y dificultades, debem* hacera* este pregunte: ¿Estera* unid* en yugo oon toe Infiel*? Posiblemente allí esté el secreto de nuestro fracaso.
Oración: Bettor, enséñen* a depend* de ti para guiara* en la elección de núes-
IL HOGAR CRISTIANO
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