___ __________ UNIVERSITY OF CALirv-* BERKELEY. CALIFORNIA 94--O EL MENSAJERO BAUTISTA. ________________ _________________ Año I. | El Paso, Texas, Junio 1°. de 1917 | Núm. 3. _____________________ _____________________ ____________________ Biiiiiiinir.___________________ r LA BIBLIA Y LA IGLESIA L------------------—--------------------------------J jllllHIIH.0 1 La Biblia es el libro dado por Dios. Contiene su voluntad revelada a los hombres. Los profetas y apóstoles escribieron como fueron guiados por el Espíritu Santo. Jesús es el hijo de Dios. El Padre nos dice: "Oíd a él." Cristo es la cabeza del cuerpo, la iglesia. Dice Pablo: "Él e« la cabeza del cuerpo que es la iglesia," (Col. 1:18). También dice que Dios "diólo por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo," (Efe. 1:22, 23). Cristo es por lo tanto el Legislador para la Iglesia, y no hay Iglesia, ni concilio, ni sínodo que tenga la autoridad para promulgar leyes para las iglesias del Señor. Ha promulgado ya las leyes necesarias para el gobierno de su pueblo, y se encuentran en el Nuevo Testamento, el cual es nuestro guía única e infalible, y la norma suprema por la que todas las iglesias y doctrinas y ritos han de ser probados. "A la ley y al testimonio," dijo el profeta. "Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido," (Isa. 8:20). La cabeza dirige todo el cuerpo. De Cristo proceden todas las leyes e ins-=. trucciones, los mandamientos y ordenanzas para su cuerpo místico, g Hablando correctamente, aquellas iglesias que corresponden con el modelo novotestamentario.son las verdaderamente ciistianas. He aquí la grande distinción entre los católicos romanos y las iglesias bautistas. Nosotros abogamos por la Biblia y sus enseñanzas puras y la Iglesia Romana ha abrogado la Biblia y apela a las tradiciones. La Iglesia Papista reclama la autoridad para cambiar las ordenanzas; los bautistas dicen: “La Biblia, solamente la Biblia, y nada más que la Biblia." Las denominaciones protestantes prácticamente aprueban la contensión de la Iglesia Romana, porque ellas también cambian las ordenanzas, Escuchad al famoso protestante y paido-bauti^ta, el Deán Stanley, dice: “Durante los primeros trece siglos la práctica casi universal del bautismo érala que leemos en el Nuevo Testamento y que es el verdadero significado de la palabra “Bautizar"—que los que se bautizaban eran zambullidos, sumergidos, inmergidos en el agua.. . .Con raras excepciones todas las iglesias occidentales han substituido por el baño antiguo la ceremonia de rociar unas cuantas gotas de agua en la cara." ¿Es Cristo supremo, o lo son las iglesias? ¿El cuerpo es mayor ^que la cabeza? ¿Quién ha dado a las iglesias la autoridad para substituir alguna otra cosa por lo que el Señor ha ordenado? ¿Cuándo? Apeguémonos a la Santa Biblia, a sus mandamientos, a sus instrucciones, a sus ordenanzas. No agreguemos cosa cualquiera a lo i que se nos enseña allí. Basta hacer lo que él ha mandado. ’Oíd a él" = J. E. D. _________________________ B'uimm--- --------------------— 1 ■ 1 ■ ------------------- ------™n:wi.!fr_________________________