UNA INSTITUCION DIVINA Par SAUL O. PAREDES • En nuestro tiempo presente, cuando encontramos tanta maldad y perversidad entre las gentes, podemos darnos cuenta de que algo fundamental nos hace falta. Jamás podremos pensar en mejorar las cocas y el mundo, sin pensar en la Institución más importante, y más fundamental, el hogar. Un hogar virtuoso es el fundamento de la prosperidad nacional, y como dice d proverbio “que una cadena no es más fuerte que su eslabón más débil" asi también con el hogar. Para Adan el paraíso fue su hogar, pero para todos sus descendientes, el hogar es su paraíso. ■stamos sufriendo la cosecha de lo que sembramos durante la guerra y las postguerras. 11 crimen, el pecado, la delincuencia juvenil, son el resultado de la negligencia de nuestros hogares cuando tanto hombres como mujeres, abandonaban el hogar para entrar en el esfuerso de ganar la guerra. Nos olvidamos completara* te dd hogar y permitimos que nuestros hijos crecieran y se desarrollaran como hierba. Ahora nos encontramos perplejos, miramos al cielo, y tenemos que admitir que por medio de la educación impartida en el hogar, evangellsamoe al mundo. Nuestros hogares son loe baluartes de la seguridad personal y nacional. Nuestros hijos podrán recibir la instrucción en la escuela, en el colegio o en la universidad, pero la educación sólo en el hogar, porque solamente en los hogares podemos formar los caracteres. La choca más humilde, si su centro o coraaón es Dios, contiene tanta felicidad y rique* como el palacio más majestuoso. Pensemos en las personas que constituyen el hogar. ¿Cuántos individuos forman el hogar? Una familia consiste de la madre, d padre y los hijos; además encontramos una abuela o un abuelo, o a ambos. • Diácono de le Primera Igleeia Bautista Mexicana de H Paw, Texas, XX. UU. de A. Al preguntarle al niño lo que hace cada uno de los miembros de la familia, nos diría que la madre cuida de la casa, el padre trabaja para mantener a la familia y loe niños van a la escuela, y cuando son más grandes, ayudan en los quehaceres de la casa. En ninguna parte encontramos delineada nuestra relación con Dios más béen explicada que en la Biblia. La Biblia entera, desde la primera página hasta la última, trata dd amor de Dios para d hombre. Dios es nuestro Padre, y nosotros somos hijos de Dios; Cristo es llamado con frecuencia el Esposo y la Irosla la esposa; y los cristianos somos ñamados hermanos en el Señor. Lo grandioso dd sacrificio de Cristo nuestro Señor fue su amor y su obediencia hasta la muerte. La obediencia es una virtud que nace dd amor, y esto lo vemos en su desarrollo deede nuestra Infancia. Una de las primeras cosas que debemos aprender, es honrar y respetar a los ancianos: Lev. 1»:»: •‘DELANTE DE LAS CANAS TE LEVANTARAS, Y HONRARAS EL ROSTRO DEL ANCIANO, Y DE TU DIOS TENDRAS TEMOR." Me acuerdo que cuando yo era pequeño mi madre siempre me decía que al hablar con un anciano o alguna otra persona mayor que yo, siempre descubriera mi cabe* en señal de respeto. Si aprendemos a respetar a loe ancianos, aprendemos a respetar a nuestros abuelos, y de allí a nuestros padres por ser mayores que nosotros. En la cabellera blanca podemos ver a un ser que se acerca o casi está ya en la eternidad, y sobre todo debemos respetarlos porque es mandamiento de Dios. Debemos escuchar la instrucción y d consejo de nuestros padres. Salomón nos dice en Prov. 6:30: “GUARDA, HUO MIO, EL MANDAMIENTO DE TU PADRE, Y NO DEJES LA ENSEÑANZA DE IL HOGAR CRISTIANO TU MADRE." Salomón reconoce la autoridad dd padre como jefe de la familia y por e* aconseja que se le obló**, mientras que por la enseñan* de la madre, Salomón reconoce el deber de la madre de guiar a sus hijos por las ssnd* de rectitud, y de manera especial 1* enseñan!* que aprende directamente de Crispo por medio de la Palabra de Dios. Pablo en su exhortación a los cristianos nos dice lo que debe ser una familia cristiana ideal en Efeoos 5:31 al 6:4. La relación de la esposa con el esposo: "Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor. Porque el marido es cabe* de la mujer, ad como Cristo es cabe* de la iglesia." ¿Podríamos imaginamos un nivel más alto que el que Pablo nos pone juntamente con Cristo? Por esto vemos la importancia dd matrimonio y lo sagrado que debe ser para cada uno de nosotros, muy especialmente para nosotros los cristianos porque podemos entender 1* Escrituras por medio del Espíritu Santo. "Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella". Esta es la relación que debe existir entre el marido y la esposa. Por medio de nuestro ejemplo como padres, nuestros hijos pueden sentir el amor que hay para nuestras esposas, jr cuando los niños se encuentran en el ambiente del amor, también aprenderán a amar y ser obedientes. Sin amor no hay hogar. La obligación de los niños hacia los padres la encontramos en estas palabras de Pablo: Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres; porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es d primer mandamiento con promesa, para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra." Nuestros hijos bien pueden ver el tratamiento y el amor que hemos expresado a nuestros padres, sus abuelos. Si nuestro ejemplo ha sido bueno, sin duda que nuestros hijos aprenderán a respetarnos, y nos honrarán mientras vivamos y aún después de haber pasado a vida mejor. Si habremos de ser felices, será el resultado de nuestra obediencia y amor a nuestros padres. Debemos enseñar a nuestros niños que Cristo ama a los niños y que de ellos es el reino de Dios. Jesús dice en Marcos 10:14: "Y viéndolo Jesús...les dijo: Dejad los niños venir, y no se lo estorbéis; porque de los tales es el reino de Dios." Es nuestra obligación como padree enseñar esto a nuestros hijos y animarlos a que se entreguen al Señor tan pronto como ellos puedan comprender que han pecado y que son pecadores. Muchos padres IL HOGAR CRISTIANO dicen: "MI hijo * ten pequeño que todavía no sabe eetee eoeae." Cuando ha- blara* así w pesque hampa descuidado Alguien he dicho que el matrimonio * como una embarcación pequeña, que tiene que sotar bien balanceada. Debemoe sobrellevar nuestras faltas entre marido y esposa y saber que de ninguna manera podem* terminar nuestro contrato o compromiso por cualquier cosa. Jesús n* enseña enfáticamente que el divorcio sólo podrá obtener* por Infracción al mandamiento contra el adulterio. Algún* cambian de esposa como cambiar* de traje. Esto podem* esperarlo de gentes que aún no conocen a Cristo como su Salvador, pero nunca debería ser práctica de Cristian*. Jesús nos di* en Marcos 10:7-13: “Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y * juntará a su mujer. Y 1* que eran dos, serán hech* una carne: así que no son más dos, sino una carne. PUES LO QUE DIOS JUNTO, NO LO APARTE EL HOMBRE... CUALQUIERA QUE REPUDIARE A SU MUJER, Y SE CASARE CON OTRA, COMETE ADULTERIO CONTRA ELLA: Y SI LA MUJER REPUDIARE A SU MARIDO Y SE CASARE CON OTRO, COMETE ADULTERIO." Pablo en uno de sus escritos n* di* que "si alguno no quisiere trabajar, tampoco coma." En Timoteo 5:8 dice: "Y si alguno no tiene cuidado de 1* suyos, y mayormente de 1* de su casa, la fe negó, y * peor que un infiel." Cuando 1* padres rehúsan mantener a sus hij* en su tierna edad cuando todavía dependen de nuestro cuidado y mantención, o si 1* hij* rehúsan ayudar a sus padres en su ancianidad, no tienen sentimientos y son innatural*, y esto no * propio aun de 1* instintos moral* de su naturaleza. Como hij*, aprendamos a honrar y respetar a nuestros padres mientras vivan sobre la tierra y aun después, porque realmente * muy poco el tiempo que podem* gosar de su cuidado y amor aquí sobre la tierra. Podem* cambiar de residencia, Ir a diferentes escuelas, vivir en otras nación*, pero nuestros padres que n* dieron el ser, solamente una v* en nuestra vida 1* teñera*. Que nuestro hogar cristiano sea un ejemplo para 1* que todavía no conocen a nuestro Señor Jesucristo. Spurgeon dijo: "Cuando un hogar * gobernado según la Palabra de Di*, si le pldléram* a 1* ángel* que moraran con nosotros, no * encontrarían fuera de su ambiente."