Lección IV. HERALDOS DEL REY Julio 24 de 1927. no sabemos si algunos días o meses, tocando el arpa para que Saúl^se distrajera y se y" BOSQUEJO DE LA LECCION David no subió al trono sino doce años después de que fue ungido por Samuel. Durante este tiempo estuvo en el palacio del Rey Saul, ' días o meses, tocando el arpa para que Saul se curara de su enfermedad nerviosa que tenía. Mucho tiempo vivió David en el campo. Una vez su padre lo mandó a ver a sus hetmanes que estaban en el ejército de Saúl, entonces en guerra con los filisteos, a llevarles algunas provisiones. Fué allí donde oyó al gigante Goliat desafiando al ejército de Israel y burlándose porque nadie iba a luchar con él. David preguntó:—¿Qué dará el Rey al que venciere a este gigante? —¡Ah! —le contestaron,— el Rey le dará riquezas, su familia tendrá honra y él se casará con la hija del Rey.—Pues yo pelearé con este gigante orgulloso —dijo David que era muy valiente. Su hermano mayor le oyó y lo reprendió, diciéndole que él estaría mejor cuidando sus ganados. De todas maneras David quería pelear con el gigante y así se lo dijo a Saúl el Rey, quien convino en que fuera. Vistió a David con su armadura, pero era muy grande y pesada y David no quiso usarla. El prefirió presentarse con la ropa que usaba y las armas que bien conocía: su honda y cinco piedras lisas del arroyo. David fué al encuentro del gigante en el nombre del Señor. Goliat era muy alto, medía 10 pies de estatura y venía armado y bien protegido. Estaba seguro de que mataría a David ¿no era un muchacho muy joven y pequeño, comparado con él, tan alto y fornido? Se burló diciendo:—¿Qué acaso soy perro para que vengas a pelear conmigo con palos? Y David contestó:—Tú vienes a mí con muy buenas armas, mas yo vengo en el nombre de Jehová. Y corriendo se apresuró a arrojarle una piedra con su honda, con tan buen acierto que se la hundió en la frente, con lo que Goliat cayó al suelo y David le cortó la cabeza con su misma espada. ¿Verdad que es maravilloso que un joven como David venciera a un gigante? Fué porque Dios estaba con él y porque era muy valiente. También porque se había ejercitado en tirar con la honda y en luchar con las fieras en el campo. ¿Quién crees tú que puede hacer más: Un niño valiente o uno , cobarde? A mí me gustan los niños valientes que no tienen miedo de entrar a un cuarto oscuro, o de ir a un mandado, si es algo lejos. Y Dios también quiere mucho a los niños que son valientes para servirle y no se avergüenzan de ser cristianos, aunque se burlen de ellos las gentes que no saben nada.