— E L S E M aceptamos gustosos la proposición presentada por la misma Srita. Octavia Buentello, de nombrar dentro de los Sembradores, un Patronato que coadyuve con la Directora del Asilo a la realización y extensión de su benemérita labor. Tuvimos también la satisfacción de ofrendar un rendido homenaje a una distinguida dama que, enamorada de su arte, ha dedicado varios lustros a la enseñanza del Bello Canto, habiendo logrado formar una verdadera escuela de arte que mucho honra a Monterrey: la Sra. Doña Cesárea Mendoza de González. Por último y para estimular las virtudes cívicas, que es otro de los fines de nuestra Institución, organizamos una comida en honor de los jóvenes conscriptos de Monterrey, que en el cumplimiento de un deber cívico abandonaban su hogar para ir a recibir la instrucción militar preparatoria. Fué tal la resonancia que tuvo este homenaje a los jóvenes conscriptos, que mereció nuestro Club una felicitación especial del Sr. Presidente de la República. Creemos que los jóvenes conscriptos guardarán el recuerdo de esa fecha memorable como un estímulo en el cumplimiento de su deber y como una orientación en su actitud frente a la Patria. Todavía está fresco cu nuestra memoria el recuerdo de aquella mañana transparente en que bajo los rayos ardientes del Valle de México, el Secretario de Educación descubría en la Rotonda de los Hombres Ilustres, el monumento que la ciudad de Monterrey ofrendaba a todo el país, para conservar y enaltecer la memo- B R A I) 0 R — ria del autor de la letra del Himno Nacional. Fué nuestro Club el que lanzó la idea y el que invitó a otras Instituciones cívicas de la ciudad, para patrocinar conjuntamente con él, la realización de ese proyecto. Muchas otras actividades se han desarrollado durante el ejercicio social que hoy termina, tendientes también a la consecución de los fines que perseguimos los Sembradores de Amistad, pero a la vez que sería prolijo y cansado enumerarlas todas ellas, muchas se nos escapan a la memoria y no podríamos apreciar el alcance que han tenido. Bástenos tan sólo el decir que todas las actividades desarrolladas por nuestra institución llevaron el sello del interés por el bien de la Colectividad y fueron emprendidas con el espírtu más amplio y generoso y el fin siempre presente, de servir y engrandecer nuestra ciudad. NUEVOS CLUBES: Nuestra labor no podría quedarse circunscrita a nuestra ciudad. Nuestra Institución. con sus seis años de vida había adquirido una experiencia y una madurez suficientes para intentar propagarse a otras ciudades de nuestro país. Habíamos apreciado los resultados benéficos de nuestra labor y quisimos que esos beneficios se extendieran también a otras ciudades, y nos lanzamos a la tarea de iniciar nuevos Clubes, no como instituciones filiales que dependieran del nuestro, sino como asociaciones hermanas que, inspiradas por los mismos ideales, desarrollaran cu su región la misma labor que nosotros había mos desarrollado en la nuestra. Y así es cómo logramos que el 24 de octubre del año pasado se inaugurara el Club de Sembradores