-i chas cosas que se contradice.i. Asi venera la vida de San Juan de Dios, todo caridad y amor y--------considera a Nietzche el poseedor de una n-i-rál más fuerte’y más humana que todas. Es radical—— y eT'ifert'ama miento de sangre humana lo llena de indignación, hace flamear en sus labios los péfíodós más candentes contra los hóVnbres que matan: 'De revolucionario téó’Hfcb y de conspirador de cuidad, paso, al lado de su. amigo Don Antonio T. "Villarreal, a la campaña militar. Y al ladd'de Maclovio Herrera estuvo en'‘combates en que las fuerzas de su1 amigo fueron despedazadas. Entonces vió cómo los hombres se morían en el campo de batalla, cómo caían i los heridos por balas y los apuñaleados a la hora de los saqueos; entonces tembló ante el hofrom de los fusilamientos! Y no hizo uso del enorme-pistolón que llevaba ceñido a la :cin- Don Juan, yo la amaba, sí Mas con lo que habéis osado Imposible la hais dejado Para vos y para mí. ,, de “Multicolor' i ' 11 ■ ■ -U: ."9" tura.. A .. Aquella visión de la guerra por primera vez sentida en la realidad, por primera vez alcanzada, lo llenó de espanto, y reaccionó. Reaécionó contra aquella matanza de hermanos contra hermanos; quiso que cesara yá. Y fundó un periódico en los Estados Unidos, “Claridades ” que sólo tenía el arte del Multiculor, pero no la fuerza política. En este periódico habló entonces de la inconsecuencia de los luchadores. “¿Por qué peleamos?”,—decía en un articulo. "No hay motivo, no hay idea para- continuar combatiendo”. Pero seguía elogiando y amando a la revolución a' Iá revolución----de ideas. Como del gran pantano del periodismo metropolitano, de la Vega había pasandó limpio por-: aquella ola de barro y de sangre que formaban las pasiones de los hombrqs ramados. No tráía una mancha en su alma ni una gota de sangre en las manos. ■ —'Es t n romántico de la revolu-ció—me dijo José Elguero después de tratarlo y conocerlo. < Un hombre qte ama las ideas, sólo las ideas y sobre todo las ideas en las que él cree está uñ:esfuerzo de la humanidad hacia el mejoramiento universal, es de la Vega. En la Casa del Obrero Mundial, en México y en Monterrey, es adorado por los obreros a los que enalta con sus teorías de “redención de ja clase” de “organización sindicalista” etc. ¿Cómo cree posible que se hagan revoluciones sin que corra la sangre? Habla de la necesidad y del derecho de' revolucionar y del horor de matar a un ser humano. . No sería uno de aquellos hombres que , llevaban a la guillotana a los aristócratas creyendo que salvaban al proletariado y a su Patria: se desmayaría al ver