tytea Arnera DfioLuixiflJJ» -«...«*• tto*e e*Nroe, M M moetrerw amigo.'* (Prov. ld:M). ■* versículo * significativo de lee Marte Gamble de Darte, cotundadora de Practicó sinceramente la enseñan* de lo que noeotroe hacenwe por otro*. Bus man* y su coraaón estaban tan unidos, que sue hechos eran obra* buenas de gran valor. ■ espíritu de la señora Darte fue tipleo de aquel proverbio dan* que dice: “Al hogar de un amigo, el camino nunca ee largo.** Ya eea que visitara a un enfermo, consolara a una persona en aflicción, discutiera cobre un libro nuevo de estudio misionero, o simplemente ayudara en formas m*e humildes, mée insig- nificantes, siempre lo hacia con dnoeri-dad y humildad de espíritu. Probablemente no existe una carecte-ristfca de más valor para el bienestar de la humanidad como lo ee la habilidad de adaptarse a las circunstancias prevalecientes y ser amistosos con todos. Aquellos centenares de hechoe bondadoeoe y amistes* no oonoddoe contribuyen al dosarrono de un buen carácter. Bln embargo, estes humildee vidas que significan muchísimo para aquellas personas que lee conocen, pero que no eon mencionadas específicamente con frecuencia ni proclamadas por lee ttmumerablee lenguas tipográficas, eon desconocidas para muchos. Be dice que loe relates más interesantes eon loe que no ee han escrito; loe hechoe más heroicos son aquellos que no ee han relatado; lee más grandee realisacionee son las que han sido logradas en eUendo por ooraaonee valerosos. Marta Gamble de Darts, esposa, madre, misionera. Impresora, heroína y amiga, poesía lee cualidad* de loe grandes siervoe de Dice. Durante la revolución en México estuvo separada de su esporo por meeee y, sin saber el él vivía o no, mostró una fe ejemplar ocupándose tranquilamente en las labores de cada día y al mismo tiempo consolando y ayudando a otros. Al fin, cuando recibió noticias de su eepoeo y, al mismo tiempo, algunas provisiones, alabó a Dice por su bondad y compartió lee provision* con sus vednos mexicanos. Cuando fue necesario someterse a una operación de emergencia, su criado y buen amigo cristiano la llevó al hospital cobre las guias (manu-brioe) de eu bicicleta. A menudo ee hallaba con eue man* manchadas con tinta de imprenta porque ayudaba a enviar la página impreca al pueblo de habla española con el mensaje del "Amigo de toda la humanidad*. Amó grandemente al pueblo latinoamericano y a todas las naciones. La última semana de su vida aquí en la tierra expresó eu deseo de contribuir con una ofrenda a una nueva miñón de habla espadóla. Mostró igual inter* y simpatía por un pequeño que lloraba oon un dedito machucado, que por un joven afligido por un problema de amor, o por un adulto perturbado por problemas de mayor importancia. ámaha el trino de un pajarito (Paca a la página 11) si hogar cristiano Nweitw Ne Cm Cristo Resucitado Par litiki Ramiros SMv® Todos nsoscitamoe una fe por la cual vivir. Y la única que puede permanecer ardiente en nuestro coraaón durante toda nuestro vida ee, la fe en Cristo resucitado. Nuestra fe no tendría ningún valor el Cristo no hubiera resucitada Berta como cuando él fue crucificado, que el eol m obscureció y asimismo se llenaron de tinieblas las vidas de sus discípulos, al ver su fe defraudada, sus esperances muertas, su ilusión destrocado. Ya no lee quedaba nada qué hacer ni nada por qué vivir. estaban vencidos, derrotados, entristeceos. Muchos de noeotroe eomoe como aquellos dlscfpul* antee de saber de la resurrección de su Maestra Algunos tomemos, como aquellas mujeres que fueron a buscar un Cristo muerto. Mas tenían rosón de temer porque creían estar solas y sin la ayuda del Befior. Otros, caminamos tristes y preocupados, como los discípulos que iban a la aldea y que no percibieron la presencia del Señor. También noeotroe, muchas veces estamos tan preocupados oon nuestros problemas que no nos damos cuenta de que el dulce Jeeús está a nuestro lado y que su sola presencia puede disipar todos nuestros dolores y todas nuestras penas. También dudamos de su poder omnipotente, como Tomás, el Incrédula Todas estas cosas cabían en loe discípulos * un Cristo que si vivió como ningún otro hombro, sanó, predicó, obró milagree; murió y oon él so llevó toda esperan* y todo consuelo. IL HOGAR CRISTIANO Pero paro noeotroe que hemos creído en un Cristo vivo quo está oon nosotros constantemente y al mismo tiempo a la diestra del Padre, intercediendo por nosotros, pobres pecadores, la duda, el temor, la ansiedad y la triste* eon faitee imperdonables que niegan nueetra fe. Que en la hermo* mañana en que conmemoramoe la resurrección de nuestro amado Salvador, invada nuestros vidas el verdadero significado de la resurrección, y como dledpuloe de cristo vivo, marchemos por el camino, siempre goaoeoe, eon fe, esperan* y seguridad; o^odeoNndo al mismo tiempo el último mandato de Orlete dado aquí * la tierra: "Id y predicad el evangelio a toda criatura*, confiando en su precio* pro-me*: ‘be aquí, yo estoy oon vosotros todos 1* días, hasta el fin del mundo. Amén*. f