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La América Latina Nos Desafía
Al iniciar sus dias el año de mil novecientos cincuenta y ocho, es menester que hagamos un análisis retrospectivo del año que se pierde en el olvido, y contemplemos nuestro anónimo horizonte extendiéndonos "a lo que ejtá delante", y afrontando nuestro desconocido futuro.
Y al limitar nuestro »ema. según el titulo, a la América Latina, reconocemos la gran responsabilidad que pesa sobre los hombres de los jóvenes de nuestras iglesias cristianas. El pensador José de la Luz y Caballero dijo: "Los viejos cuentan la historia, los niños la escuchan y los jóvenes la hacen".
La obra de Dios en los países hispanos clama por jóvenes que se dispongan a dar todo por la causa del Maestro. LA AMERICA LATINA NOS DESAFIA. Pero aparejados a esta notable necesidad de responder al reto que se nos hace, miramos tristemente cómo las normas de conducta de nuestros pueblos, y especialmente de la juventud, se están rebajando a pasos agigantados. Tal parece que volvemos al desenfreno de la clásica Grecia o la antigua Roma, para extraer de ellas el "virus" del desprestigio moral. Nos estamos contagiando con "el modernismo" para estar a tono con la actualidad. ¡Cuántas Sodomas y Gomorras existen en estos países! Mas Dios, en su infinita misericordia. por su amor a los justos, "a los pocos escogidos", persevera y perdona. ¿Qué haremos entonces, nosotros, los jóvenes de Cristo? Somos la sal de la tierra, la luz del mundo. ¿Estamos cumpliendo la voluntad del Señor? Indudablemente, con pocas excepciones, tal pregunta ob-tedria una respuesta negativa. Nuestros templos están abarrotados de personas poseedoras de ese "divino tesoro", que según Darío, se va "para nunca más volver"; pero son jóvenes de almas paraliticas, anémicos espirituales que necesitan la sublime sacudida do la responsabilidad cristiana. Tal parece que esperan que se les diga: ¡levántate y anda! y "procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad".
¡Cuán honda es nuestra pena cuando contemplamos a que en el templo
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Adib Edén, Habana, Cuba
demuestran que son cristianos; pero que en el cotidiano vivir, no hay nada que los diferencie de la juventud del mundo! Son hijos mudos de Dios, como dijese D. L. Moody. Saben hablar de politica. de ciencia, de arte. Hablan con autoridad acerca de las modas de la época; pero no tienen
nada qué decir acerca del Hijo de Dios. Ellos son los que se adaptan a "las conveniencias", como aquellos hombres de la frontera que durante la terrible guerra civil de los Estados Unidos, querían quedar bien con ambos bandos y tenían dos banderas; y de acuerdo con la situación del momento, izaban una u otra, y daban vivas a uno u otro ejército. Pero tuvieron su pago, fueron despreciados por ambos ejércitos y sus casas fueron arrasadas. Asimismo tenemos jóvenes que andan en dos aguas, sin prestigio, con la dignidad de un cadáver, como los huesos secos que Eze-quiel vio en su visión, los cuales no tienen poder, ni vida, ni posibilidades.
Nosotros, los del camino angosto, debemos hacer algo por éstos que se pierden en el camino ancho. Son jóvenes que tienen "poco aceite en sus lámparas", y debemos instarlos a que se consagren más al Salvador. Nada atrae más a un joven, escribió A. V. Washburn, ya sea flaco en la fe o inconverso, como el sincero testimonio de otro joven. El puede encogerse de hombros a la amonestación de un adulto, porque probablemente pensará que, sea como fuere, los mayores viven en un mundo diferente. Pero cuando otro joven, más o menos de su misma edad le dice lo que Cristo ha hecho por él. no puede menos que reconocer el problema que se le presenta. Y al reconocer esta gran verdad, debemos permitir que Dios nos utilice como instrumentos en sus manos para hacer su obra entre los demás jóvenes. No debemos contentarnos con poseer la vida eterna. También es necesario atender a la Gran Comisión de nuestro Señor.
Hemos de ser testigos "hasta lo último de la tierra". ¿Podéis decir dónde está el lugar más lejos de la presencia de Dios? —preguntó Hallen-beck— ¿será la China, el Japón, la India, el Africa u otras tierras del viejo mundo? No, estos países están tan cerca de Dios como la América Latina. El punto que está más lejos de Dios es el corazón no regenerado, y en cualquier lugar donde haya una criatura que tenga un alma que salvar, allí está el lugar de trabajo del joven hijo de Dios.
"Que se consagren y esfuercen los (Pasa a la página 13»
EL PROMOTOR DE
'emana Je ¿Jn^aóid Je la
SOCIEDAD AUXILIAR DE SEÑORITAS
9 a 15 Je ^eLrero Je 1958
Violet Rogers de Orr, Cali, Colombia
En todas las iglesias bautistas de hoy dia se promueven muchas actividades de valor. Celebramos campañas evangelistlcas con el fin de ganar almas para Cristo; planeamos y realizamos cursos de estudios sobre diversos asuntos con el fin de prepararnos mejor para el servicio de Cristo; asistimos a muchas reuniones especiales: y ahora, se ve la necesidad de hacer énfasis en el desarrollo de los jóvenes, y de desempeñar actividades útiles para interesarlos y conservarlos para la iglesia. Pensando en todo esto, vemos la necesidad de instituir lo que se llaman las Semanas de Enfasis de los distintos departamentos de la Iglesia, especialmente Semanas de Enfasis de la Sociedad Auxiliar de Señoritas.
Yo no diría nada en cuanto a la importancia de tales semanas, si no fuera porque hay un buen PROPOSITO en llevar a cabo tal actividad. Muchas veces en nuestras iglesias la mayoría de los miembros no conocen bien la Sociedad Auxiliar de Señoritas como organización de la Unión Femenil Misionera. Saben que existe tal organización; pero no se les ha enseñado lo que realmente vale, ni están enterados de los proyectos, ideales, propósitos y trabajos de ella. ¿No es verdad que la iglesia debe conocer a fondo a sus “hijas mayores", y respaldarlas en todas sus actividades, si están de acuerdo con ellas? Celebrando una Semana de Enfasis de la Sociedad Auxiliar de Señoritas, la iglesia puede llegar a comprender mejor la Importancia de esta organización. se dará cuenta del valor espiritual de ella en la vida diaria de las señoritas, y estará dispuesta a respaldarla.
SI en una iglesia hay verdadero Inter s en iniciar la celebración de esta semana, hay oue reconocer también lo indispensable que es una buena PREPARACION, o esta actividad no valdrá nada. Siendo la Sociedad Femenil Misionera "la madre" de la Sociedad de Señoritas, tal vez quiera hacerse responsable de proyectar los planes para esta semana.
Con el respaldo de la madre, cual-
EDUCACION CRISTIANA
quier hija tiene más ánimo y estimulo para desarrollarse mejor y cumplir sus deberes. Asi que, para planear esta Semana de Enfasis, la presidenta de la Sociedad Femenil Misionera y la presidente de la Sociedad de Señoritas necesitan ponerse de acuerdo y proponer a la iglesia su idea o plan, y después que la iglesia lo apruebe, las dos se encargarán de promover las actividades de la Semana. Por supuesto, este proyecto requiere mucho trabajo por parte de ambos grupos, y se necesita la cooperación de la "madre" y la "hija". Habrá que tener reuniones especiales de antemano para planear toda actividad de la semana. Sugiero que se hagan planes por lo menos con un mes de anticipación.
Para formular el PROGRAMA de la semana, es indispensable tener una reunión de las comisiones ejecutivas de las dos sociedades. En esta reunión, los oficiales de la Sociedad de Señoritas deben conocer los deberes de los puestos que les corresponderán en la Sociedad de Señoras. Por ejemplo, en una reunión regular de la Sociedad de Señoras, se les puede dar a las señoritas la oportunidad de desempeñar el trabajo de los oficiales de la Sociedad de Señoras, como un buen ensayo para el futuro, cuando ellas sean miembros de la Sociedad de Señoras. Otra sugestión es que se celebre un programa de reconocimiento en un culto regular de la iglesia (mañana o noche, dia domingo» para que toda la iglesia conozca a la consejera, a los oficiales, y a los miembros activos de la sociedad. Se puede pedir a varias señoritas que brevemente den su testimonio personal de lo que la Sociedad significa para ellas, y después el pastor puede presentar a todo el grupo de señoritas que estarán sentadas juntas en el culto. Si se desea se les pueden obsequiar flores o alguna otra cosa. Otra idea es que la Sociedad Femenil Misionera honre al grupo de señoritas con un té, recepción, u otra reunión social durante la semana.
A continuación aparece un programa que fue presentado en Colombia
por un grupo de señoritas. Es la representación del propósito, los ideales e intereses de la Sociedad Auxiliar de Señoritas. Lo publicamos esperando que sea una bendición para toda Sociedad Auxiliar de Señoritas de la América Latina que quiera utilizarlo, para que creza grandemente en número de miembros y servicio para la gloria de Cristo.
PROGRAMA PARA LAS SOCIEDADES DE SEÑORITAS
(Traducido y adaptado por la Srita. Lillian Williams del original de Sra. Dorotea de Grijalva).
(Debe tenerse un narrador y varias señoritas para que representen cada Ideal en cuadros plásticos, además música suave en piano u órgano para proporcionar un ambiente devocio-nal al programa.»
Narradora: En todos los continentes del mundo hay grupos de señoritas bautistas, que como nosotras, tienen un solo propósito, el de prepararse para servir a Cristo. Pero a la vez que nos preparamos, queremos poner en práctica lo aprendido. Asi, nos hemos agregado a la Sociedad Auxiliar de Señoritas para orar, estudiar, ofrendar y utilizar nuestras habilidades y talentos en el servicio a Cristo de todas las maneras que estén a nuestro alcance.
Para que conozcan mejor los propósitos de la Sociedad de Señoritas, los invitamos a presenciar esta representación.
Amo a Cristo porque él me amó primero. Para procurar corresponder a su amor, dedico a su servicio mi cuerpo. mente, y corazón.
En leal devoción a Cristo, pues, yo me dedico a orar y estudiar la Santa Palabra de Dios.
(Cuadro plástico: Señorita arrodillada en actitud de oración. — Música quieta — “Oh, dulce, grata oración")
Narradora: Oro porque quiero hablar con Dios para conocerlo mejor y servirle más fielmente. Pero quiero