REGENERACION NTRY í An-2 LASS 1904. on >¡d. •i sardo >lic* los ros oro ’O» pla- lemes-o. o. nestre >r Giro á loa nuea- 1 pre-í con 8 por .ctor. I ES OM- esta que itra i rio >ro-do- eon talidad sacerdotal ha recibido el holocausto de la virtud fanática, y al pie de las imágenes, á la presencia de los ídolos, han rodado por el polvo muchos candores y se han enlodado para siempre muchas alburas. Ha habido infamias y crímenes: para llegar á la falta se ha pasado por la infamia; para ocultar la falta, se ha llegado hasta el crimen. Es la historia de siempre, vulgar por lo antigua. Es la historia que . se viene repitiendo en todo el mun-... do desde que las órdenes religiosas existen. Es la historia inevitable, 1 obligaba, fatal, que siempre acompaña á ese género de instituciones, ¡ enya existencia condena la civilización y reprueba la moral. Núes- | tras Leyes prohíben, los Conventos; pero el Gral. Díaz) ha pasado por las leyes; ha protegido al Clero y ha hecho que pofTóda la República se levanten esos mal disfrazados se- - rrallos de la gente de sotana, que son una grave amenaza para la moralidad social y privada, aparte de ser un ultraje á las Leyes de Reforma y un reto descarado á la paciencia del Partido Liberal. En- Matamoros, el Convento del «Verbo Encarnado» se yergue impúdicamente, befando la civilización, ultrajando á la República, amenazando la tranquilidad de los hogares y el honor de las familias. Ya que hay gente fanática que sostiene ese Convento; ya que hay padres imbéciles ó ciegos que mandan á sus hijas á ese lugar de corrupción, debía haber autoridades que, cumpliendo con su deber y acatando las disposiciones de la ley, impidieran la existencia del Convento y lanzaran á la calle á los infractores de las Leyes de Reforma. Pero el Gral. Díaz ha dado consigna á todas las autoridades del país »para que protejan al Clero en vez de perseguirlo, y por eso las autoridades de Matamoros dejan impunesy tranquilos en su guarida á los sátiros de bonete y á las hetairas con hábito monacal. CONSECUENCIAS DE LA TIRANIA Lfl BARBARIE OFICIAL ue- :ios ron ios t co- 1a-ro- ros ri- dean de esa impunidad y llegan á estupendos actos de cinismo. El día 2 de Nomviembre, los curas anduvieron en los panteones con sotanas, contra lo preveriido por las Leyes de Reforma. Eñ elpúlpito llegan al escándalo^ Hace poco que un heredero del Sr. Manuel Fernández, deseando honrar la memoria del finado per cumplirse un año de su muerte, mandó distribuir entre los pobres la suma de $100.00, en vez de gastar* la en misas, como acostumbran hacedlo los católicos. Esta conducta verdaderamente filántropica y digna de encomio, disgustó tanto á los picaros frailes de Matamoros, que uno de estos dijo en el púlpitc que el caritativo heredero de D. Manuel Fernández estaba excomulgado; que lo estarían todos los que lo instaran y que Dios no perdonaría á los que no dieran dinero para la Estamos en posesión de datos que i nos permiten asegurar que en laCam-I paña del Vaquí, nuestro Gobierno ha I visto con desprecio lo que pudiera dar lustre á la nación haciendo todo aquello que redunde en perjuicio del I buen nombre de México, Conocidos son los motivos justifica-I dos que tuvieron los indios yaquis para levantarse en armas. Vivian tranquilos y dedicados al trabajo en loe 1 fértiles terrenos regados por los ríos I Yaqui y Mayo. Nunca desobedeció* i ron las órdenes del Gobierno, y como I buenos ciudadanos, cooperaban alen-I grandeetmiento nacional con su labo-ríos idad y sus hábitos de orden. Pero sucedió qne algunos extranjeros ambiciosos apoyados por autoridades desprovistas de patriotismo, codiciaron Jos terrenos de los indios de Sonora y se los arrebataron, como ha sucedido en diversas reglones de la República. Los indios yaquis, conscientes de sus derechos y bastante enérgicos para defenderlos, se rebelaron contra los usurpadores y han permanecido en rebelión de ólnco lustros á esta parte. Bastaría la energía y la constancia con que loe yaquis han sostenido la campaña para suponer que alguna buena causa es la que defienden, que algunos derechos hollados son los que motivan su obra, si no de reivin-dicación porque carecen de fuerza necesaria para imponerse, sí de represalias, sí de protesta contra la fuerza que les ha arrebatado sus propiedades, contra la usurpación que expulsándolos de sus lugares ¡os empujó A la miseria, al hambre y á la rebellón. Culpar á los yaquis por su actitud enérgica es culpar injustamente. Los sufrimientos, las torturas que ha sufrido esa indomable raza por parte del Gobierno y de los ambiciosos que se enriquecieron cun sus propiedades, jusiifloau^w actitud Es cierto que ios yaquis se han entregado á excesos de todo género ¿pe ro quién ha tenido la culpa de que el yaqui robe ó asesine si no es el Gobierno, que con su protección ó los usurpadores de l*s propiedades de los yaquis, ha obligado A esa raza á emplear los mismos medios de violencia de que ha sido víctima primeramente y de un modo gratuito? Sin embargo, si pesamos las infamias cometidas por los yaquis, con las infamias cometidas por el Gobierno y sus agentes, y si además tenemos en cuenta que la cordura debió estar siempre de parte del Gobierno, obligado como está á respetar los derechos de los ciudadanos, veremos de un modo natural que el Gobierno es Para robustecer ese prestigio, él en persona ha salido á aprehender indios pacíficos, conquistando de ese modo, sin peligro de la vida, una reputación de valiente que indigne por lo que tiene de bufa, de cómica, de hlstrio-nesca. . Izáha) ha dado en salir á recorrer las haciendas; forma á todos los peones ^de ellas y les dirije miradas amenazadoras, como que va armado y tiene á sus espaldas buena cantidad de esbirros que lo cuiden. Los indios que, ya sea porque sienten molesta la insolente mirada del valiente, ó por cualquier otro motivo, rehúsan verlo, son sacados de entre sus compañeros y fusi ados sin formación de causa, sin qut medie una pregunta, í veces sin que se sepan loe n^mbrée de Jos desventurados. ** Antiguamente la patente de valor era conquistada combates singulares, en luchas de hombre á hombre. Se arriesgaba la vida y se buscaba a) enemigo más fuerte, más audaz y más enérgico para vencerlo ó morir con gloria. IzAbal da hoy la muestra de cómo se conquista en nuestros días una fama de valor y de fiereza. Izábal ne se ha conformado con que las ejecuciones se verifiquen en los campos. Ha querido gozar cómodamente de u¿ espectáculo que para él, según se ye, tiene atractivos excepcionales. Eq el corral mismo de su casa habitación se ejecuta álos indios pacíficos, no sin haberlos atormentado previamente, pues como los felinos, Izábal experimenta voluptuosidades enfermizas ante las contorciones que ; provoca el dolor, ante el martirio, ' ante la agonía, encontrando músicas delicadas en el estertor pavoroso de | los moribundos. Izábal solo puede «er comparado con Bernardo Reyes. Bernaido Reyes, ante la sangre, ante la muerte se extasía como ante una representación le opereta, y las convulsiones de los moribundos tienen para él la misma gracia, que las contorsiones de un payaso ó el descoco de una suripanta. Todos estos excesos de furor se reproducen día á día eáC^Gral. Díaz está al Corriente de tanto ultraje á la civilización; pero del mismo modo que sostiene á Bernardo Reyes en Nuevo León, sostiene á Izábal en Sonora. En una de sus correrías en busca de peones pacíficos, Izábal trope* con un desventurado hacendado que tenía á su servicie» algunos yaquis que trabajaban en su hacienda. Creyó el Gobernador que el hacendado protegía á los yaquis, y para hacerla confesar, le dió tormento en presencia de la esposa y de las hijas. Suplicaron las damas, se arrodillaron, lloraron, clama- ¡ ■» -- , --—.veilvulu«uu,1ivr6roo,ciamf e culpable de las de predije! ones de ron, se arrastraron en su desespera- lé ni ÍS i- n a Estos desenfrenos de la clerigalla exasperaron á los liberales, y la va-lerosa Directora de «El Eco del Bravo,» Sra. Teresa Osuna de Sayas, atacó enérgicamente en su periódico á los frailes escandalosos, que regentean el Convento del «Verbo Encarnado» y que á diario cometen excesos como los que dejamos referidos. Las consecuencias no se hicieron esperar. Los ensotanados se pusieron rabiosos al verse exhibi dos eu su repugnante desnudez, y patrocinados por un rábula clerical, que es Secretario del Gobierno de Tamaulipas, denunciaron á«El Eco del Bravo» y se propusieron vengarse de la Sra. Osuna de Sayas, digna y honrada Directora de esa publicación. El Juez, como acontece en todas las denuncias de este género y cumpliendo con la consigna de Don Porfirio, de perseguir á la prensa, dió entrada á la acusación imbécil de los curas y dictó orden de aprehensión contra la Sra los yaquis, cometidas bajo el Influjo de la desesperación, del hambre y del deseo de vengar ultrajes y vejaciones que nunca merecieron. Loa yaquis sufren todo el desootls-tno del Gobierno, despotismo que no solo llega, sino que traspase loe lí mites de la barbarie. En la Penitenciaría de Hermosillo hay centenares de indias de todas eda | des y niños de pocos meses de nacidos Constantemente ingresa á la Penitenciaría un número considerable de estas Infelices personas aprehendidas sin motivo, y no pudlendo ser atendida» por el Gobierno de Izábal, pues las rentas del Estado no bastan para saciar el apetito de lo» parásito», son repartida», como animales doméstico», entre persona» del Centro de la República y de lugares más lejanos como Yucatán, Campeche y las tierras cálidas de Oaxaca, Tabasco y Veracruz. Los tiernos n’fios son arrancados brutalmente de los brazo» de su» infortunadas madre», á golpe», á empellones, á culatazos por-orden del Gobernador Izábal, que á menudo presencia esta» eaoena» sin conmoverse, sin experimentar dolor, con el corazón encallecido, oon lo» sentimientos embotado», oomo un carcelero, como un verdugo. ¿Pueden compararse esus infamias cometidas en frío, por personas al pj recer civilizada», con la» depredaciones de los y equis, hombres rudo», exasperado» por las injusticias y que defienden el sagrado derecho de propiedad violado por el Gobierno? ¿Cómo podrá justificar Izábal esos atentados cometido» en su presencia contra déolles mujeres y niños inocente»? ¡Precisaba no ser nacido de madre para contemplar impasible, oomo Izábal, el dolor de esa» desvento i* ciable dama supo 6 tiempo que ere perseguida,, y salió violentamente de Matamoros, para esquivar la ao ción de la injusticia. . Hechos tan vergonzosos comp les que relatamos pasan diariamente en nuestra Patria, y seguirán pasando, mientras el pueblo mexicano no se resuelva á ejercitar sus derechos para librarse de la Dictadura Clerical de Porfirio Díaz. jo» nacido» de sus entrañas! Sólo l¿e idiota» ó loe malvados pueden ordenar ó ejecutar esa clase d^ actos que hasta loe salvajes se negarían á cometer. Lo más repugnante es que, los In dios que sufren la barbarle de las au toridadea, son los pacífieu», loe sirvientes de las bacleodas, los peone» de las minas. Otón á los piés del tirano. Izábal, in-fiexlbl* como un azote enviado por divinidades infernales, hosco, brutal, ordenó que continuase el tormento en presencia de la desolación femenina capaz por su vehemencia de conmover á las piedras, á las bestias feroces ¡menos á Izábal! En vano protestó el hacendado no haber protegido á yaqui alguno; el tormento continuó hasta que con los huesos quebrado», con las earnes magulladas exhaló el último suspiro ese infeliz, que no tuvo más culpa, que la de haber vivido en una época en que puestra pobre Patria había de soportar el yugo más odioso, latiraníamá» desenfrenada. Loa perjuicios que la agricultura ha sufrido por etfte sistema de exterminio son incalculables. Los indios pacíficos que no son fusilados, son depor-na-dos en grandes cantidades y vendí dos á ricos finqueros de las tierras cá lides. Eq cambio algunos individuo» se han enriquecido. Entre loa individuos que han obtenido ventajas con la Campafia del Yaqui, figura Ramón Corral. En nombre de la Civilización ofendida, protestamos contra esa Camparla sin laureles, sin hooor y sin gloria que se lleva á cabo en Souora. El dinero de la nación ha sido gastado por nUllones en veinte año» ed provecho de unos cuantos individuos y en perjuicio de una rasa altiva, enérgica, viril, que lucha en defensa de sus de rechas hollado» por los hombre» de poder y de influencia La prensa gobiernista pinta á éos yaquis como bandolero» y asesinos. Es necesario juzgar tambiéa á los que los persiguen, y con» criterio sano y honrado, fallar de parte de quién es-•á la culpa, y quién por sus actos atentatorios merece más los oaliflca-tivoa que la prensa venal aplica á los desventurados yaquis. Sensible t defunción mat* ó se lee venda á hacendado» ricos de las tierras cálL as . Beta guerra faros, brutal, khuma-n*i ha jervldo á Izábal para crearse prestigio de enérgico, de buen gober-l nante. El dia 20 del actual falleció en Laredo, Texas, el Sr. non Nemesio García, que fué un buen liberal. El Sr cania amó siempre á su patria, y vió con odio la Dictadura que la oprime. Enviamos á la afligida familia y especialmente al Sr. Nemesio car-tía Naranjo, hijo del finado, la expresión de nuestra condolencia. Díaz u el pueblo do Oaxaca. La justicia en bancarrota. Cuando el Gral. Díaz fué silbado I y lapidado por el viril pueblo oaxa I queño, en premio de su mal comportamiento como Gobernador del' abuso y la 'arbitrariedad pa“ra"qu"e ¡ Estado de Oaxaca, cuentan sus ín- haya opresión, timos que con las lágrimas en los ! ojos prometió poner de Gobernador i á su lacayo para degradar á ese al-: tivo pueblo. En efecto; intrigó, corrompió, i hizo presiém hasta lograr que Mar- I tin González, á quien el pueblo de Oaxaca conocía con el nombre Martín Huarachito. se sentase en la silla que en épocas más nobles ocupó el Benemérito de América. Con todo, el pueblo no se envi-1 leció, de lo que nos congratulamos los oaxaquefíos que deseamos que el pueblo de Oaxaca sea un pueblo digno del Benemérito. A pesar de los esfuerzos hechos por Emilio Pimentel para impedir r 1 Cli ^ucvu León el 0350 06 ^jueces, contra i que el elemento independiente lancee una candidatura municipal, los I pocos miembros dignos de la ta» en festejar el afianzamiento déla tiranía, son loa que han dado mayor*» muestras de desprecio por la» tiesta» del 19 de Diciembre. E* que lo^ extranjeros comprenden que, si hoy están asegurados sus in teresee por la preferencia inmoral que les dispensa la tiranía sobre ios m-x can »e, no lo estarán cuando muera el Autócrata; y c mo se acerca e momeok) de esa muerte, dada la senilidad del Dictador, y hay además la circunstancia de que U carencia de partidos políticos organizados traerá serio» trastornos interiors después de esa muerte, losextrar j-ro» comien zan A su vtz & sentir odio contra una administración que no garantísa segu ridad alguna, más que por el ya demasiado w rto tiempo de vida que le queda *iVre*ideete Díaz. Un bomb e oomo de ochenta eflos de edad, no pue-úe »*cífurar que vivirá muchos años De eso depende que los^extrafTIero» se muestren fríos, ante laa, fiestas a* loe serví es. A toda* l»s colonias ex iranj-ra* pasó á iuvitar una comisión de »*rvile< par» que construye-en ca Tos alegórico- y una que otra nolo nía ha ecept do por mer »oom promise v ca«i por lástima, construir carro* Las demás se han negado rotundamen- . te á figurar en una farsa que solo pue- i de significar abyección, envllecámien- Es imposible que pueda haber jus ticia bajo la tiranía, desde el momento en que son indispensables el Si pudiera comprobarse que en México hay justicia, ingrata sería । la labor que tendiera á atacar a ! Gobierno del oral. Díaz. En Nuevo León la Justicia está en manos de individuos por quienes la horca siente nostalgia infinitas. Los jueces de Nuevo León, jm-provisados abogados para desempeñar puestos que los abogados rehúsan. son fieles á Bernardo Reyes para qui^n tienen la misma obediencia que la jauría dispensa al cazador, ó el agradecimiento abyecto que siente el esclavo por las bondades de su señor. Por eso es frecuente en Nuevo los dictados de la honradez, sólo atiendan las indicaciones del déspota sobre cualquiera otra consideración legal ó moral. Hay que notar también que la obscura justicia de Nuevo León, । siempre está á favor de los amigos ■ de Bernardo Reyes. El joven comerciante Don Ensebio Rodríguez Romo debía alguna cantidad de dinero á un tal Pedro Treviño (á) El Cuerero1 comerciante de Monterrey y gran amigo de Bernardo Reyes. Don Eusebio tenía varias tiendas en el Estado de Coahuila, pero por diversas circunstancias, los negocios dejaron, de producir, y entonces Don Eusebio se propuso hacer cesión de bienes como se lo indicaba la honradez, y su probidad comercial. Antes de presentarse en quiebra, Don Eusebio fue á Monterrey y dió cuenta de su hornada resolución al Cuerera. Este, entonces, Sugirió á Don Ensebio una indignidad, que consistía en que se le diese eu traspaso una tienda. Don Eusebio no quiso robar á sus acreedores y rechazó indignado la proposición del Cuerera. Furioso Pedro ;Treviño (á) E( Cu*rerot buscó un abogado reyista, Rafael Dávila, y con el apoyo de Bernardo Reyes acusó de estafa á Don Eusebio. Cerca de un año estuvo preso el pobre comerciante, siendo constantemente amagado por El Cuerera, por Rafael Dávila, por los carceleros; pero no consintió en engañar á sus acreedores en beneficio de Treviño, de Dávila y de tal vez Bernardo Reyes. -Pidió amparo, y el amparo fué negado por el servil Juez de Distrito en Monterrey. Pasó el amparo en revisión á la Suprema Corte de Justicia, y Rodolfo Reyes, hijo de Bernardo Reyes, se encargó en México de corromper á los Magistrados. Lo logró en parte por medio de dinero, deteniendo el negocio, peroera tan justa la causa del joven Eusebio Rodriguez Romo, que la Corte al fin tuvo que ampararlo. Nos complace publicar datos concretos de esta naturaleza, porque ellos sirven para que no se nos tache de declamadores, y porque robustecen, además, la tesis que sostenemos sobre que no puede haber justicia bajo las tiranías, y que la administración del oral. Díaz se desmorona por su propia corrupción. En un país donde la justicia ha hecho bancarrota, puede decirse justamente que pesa una tiranía. Lo fluí dice la' Prensa Honrada. de la prensa, que á su simple grito, se levantan legiones que le siguen prestas á la lu?ha; llenas de fé, con el triunfo en la causa que heraldean; confiados porque la luz debe triun- • a,8 tlnleblas: porque la equi-. d*d debe triunfar sobre el crimen. Y regocijados por haber saludado a nuestro antiguo soldado, al viejo guerrero de la prensa i nd? pendiente mandamos las máe gratas felicitaciones a nuestros estimados amigos Sres. b lores Magon y Sr. Juan Sarabia.: <1810> Laredo, Texas.* REGENERXí b >X Jía llegado á nuestra Mesa de redact- : ción el primer número de* su segunda • época, del valiente periódico que lleva por título el que sirve de epígrafe á estas lineas, que ve la luz pública en San Antonio de Texas. *' Gracias colega pof la visita y ya ordenaremos el cambio. El Eco del Trnbaio.—Saltillo, Coah. REGENERACION Ha llegado á nuestra mesa de redacción el valiente y bien escrito periódico, cuyo nombre sirve de rubro á este suelto, y cuyo material es enérgico y viril, revelando que sus redactores, iosi Sres. Sarabia y Flores Magón familiarizados con las persecuciones y el infortunio, han templado su pluma en la forja de Melchor Ocampo. REGENERACION reaparece ea San Antonio, I exas, y con gusto corres- . pendemos su visita, deseándole no sólo larga vida, sino el más brillante éxito en su progama. El Porvenir.— Brownsville, Texas. NUEVrOS COLEGAS Han llegado á nuestra mesa de redacción La lana semanario humorístico de caricatura» que se publica en la ( apital de la República. Otra publicación que nos visitó esta semana es REGENERACION pe- * riódicoque ya en otras ocaciones hemos tenido la honra de recibir. Sus redactores son los valiente» campeones de la prensa Ricardo v Enrique Flores Magón y Juan Sarabia. í6 Ia luz Pdbl,ca en Antonio, Fexas (E. u. A.) donde han ido á refugiarse los prestigiados periodistas por las cuestiones psicológicas que \n^?8 ahora 86 l®8 presentaron con el tioblerno Mexicano. Hien venidos seals, queridos cole-y teogais muchos años de vida lellz. Y establecemos el cange de costumbre. ♦ Pierrot — Celey», Gto. x *i REGENERACION!. Lo e.perábamoe hace tiempo. Loa hoja suelta que con anterioridad recibimoe. noe anunciaba la nue-V* W,rlclón de e»te bixarro y liberal periódico que ha llegado á nuestra mesa de labores, El valiente colega vuelve hoy á la arena del combate con su fé agigantada su espíritu templado por la ad- ’ ver»idad y caldeado por el entusias» mo., Que el porvenir le sonría y una buena estrella proteja á sus valientes redactores. Robeepitcrt.—Celaya, Gto. • «REGENERACION.» Hemos recibido el N9. 1 del valiente periódico REGENERACION, que han principiado á publicar en la populosa ciudad del Alamo, los conocido» escritores independientes, ©¿patriados de México, Sres. Magón y J. Sarabia. Le deseamos al nuevo paladín muchos año* de próspera existencia • La l nv'xk —Brownsville, Texas. REGENERACION. Mas allá de las márgenes del Bravo, están los infatigables defensores . h ley y del derecho; pisando suelo extranjero, pero pensando solo en su patria En REGENERACION, viene su alma: saludémosla mexicano». Viene oon toda la gallardía de la juventud, sin que el destierro voluntario haya marchitado su» esperanzas. Larga vida valient-* cofrade Agradecemos á tan dignos colegas su visita y la correspondemos con gusto. El Vigía.—Jungapeo, Mich. REGENERACION. rx ¡ente colega de este nombre que se publicaba en México y debido á su enerva por denunciar lo» malos actos de ios gobernante», se encarceló A sus R. R. ha vuelto á ver la luz en Man Antonio, Texas, con la misma virilidad que antes. Reciban nuestro» amigos los Sres. Enrique y Ricardo Flores Msgón y Juan Sarabia, nuestras calurosas felicitaciones y que la rezón y Ja justicia explendan ante sus noble» sacrificio». La Idea.—C. Victoria, Tam, REGENERACION. Hemos recibido el primer número del semanario que con este título han co-mentado * publicar en San Antonio, 1 ex. E. n A lo* ieteligAotes y briosos escritores mexicanos Sres. Ricardo \ Enrique Flores Magón y Juan Sa-r4a7» cí>° objeto de trata? con impar- , cialidad loa asuntos politic os de México» que sean de más trascendencia./ Ya correspondemos á la visita dé REGENERACION. Por fin ha llegado < nuestra, manoa el ««per.do colega REGENERACION al que hemoa devorado V>da su lectu ___ _________ „ ,e <>u,*0,eiPer» hallar en ella nuestro colega i quien descamo, lar-una gran noticia, una grao nueva que °ra- ve-tra patria bajo la dictadura Infame #ui la oprime v en donde ag nizamiwerablemen te el pu«b¿o de Juárez; el pueblo dichoso aue llegó A sentir el calor bendito del Sol de la Libertad. REGENERACION ea nuestro hermano y es nuestro jefe; es el Napoleón Un‘KrAnDUev*que Vtd* y 3 '!?• factores que no sse a reacciónamno» iinnm-nzv*.™ I máe vuelvan á ser víctimas de la psicología. El Manana — Jalapa, Ver. REGENERACION ▼éliente semanario oon cuyo E u valient* 8eman*riu con cuyo nombre encabezamos estas líneas, ba vuelto á reaparecer eu la arena perio-dística en San Antonio, Texas, bajo la dirección del enérgico periodista 6. Ricardo Flores Msgón. Sostiene como