El cinismo oficial Antes de que se iniciara la saludable reacción de civismo que vemos con gusto todos los que amamos á la Patria, porque tenemos la convicción de que el civismo será lo único que salve nuestras instituciones y nuestra nacionalidad; antes de que se iniciara esa reacción,los periódicos del Gobierno sostenían que nuestro pueblo era un conjunto de idividuos sin voluntad, V. incapacitados por esa circunstancia para la vida activa del ciudadano. 8e decía que el pueblo tenía horror á la cosa pública y que dejaba todo su poder, toda bu fuerza, sus derechos y < prerrogativas á merced de los hombres que ocupaban los puestos públi-. eos. Todo eso era afirmado por los periódicos del Gobierno, para justificar la imposición que el Dictador hacía de funcionarios que /deberían ser nombrados por el voto popular. Los hechos, sin embargo, siempre han demostrado que si el pueblo se abstenía de hacer uso de sus derechos. eso se debía á la oposición del Gobieroo á la actividad democrática de los ciudadanos, en la que veía un peligro para la consolidación de la tiranía, pu s á nadie se le encapa que un pueblo que ejercita la democracia . no puede soportar tiranías. Por la fuerza, por el terror que infunde el Gobierno cuando en lugar de la ley aplica el látigo, el pueblo se había abstenido de ejercitar sus derechos ; pero ha llegado el momento de la reflexión; el pueblo ha comprendido que el estado de pasividad que guardaba «ra antipatriótico, porque permitía el robustecimiento de la tira nía que acarrea la abyección del ciudadano, el enriquecimiento de los go bernantes A costa de la miseria del • pueblo,y la venta de la nación, que no á otra cosa conducen los empréstitos que el Gobierno de Porfirio Díaz con trata con las casas extranjeras. El pueblo ha comprendido al fin que necesita hacer un esfuerzo para salvan la nacionalidad, y por esa razón lo hemos visto despertar en* Coahuila y en Oaxaca, sereno, viril, con la cotí ciencia de su soberanía, dispuesto á ejercitar sus derechos. Tanto en Coahuila, como en la Capital de Oaxaca, el pueblo tomó narte activa en la» elecciones municipales. La cordura, la corrección, el patriotismo, han estado de parte del pueblo. De parte de las autoridades solo han estado el fraude, la chicana, la coacción, el terror. Ya hemos dado cuenta de la» elecciones municipales en el E«tado de Coahuila. En Oaxaca, el pueblo acudió á las casi lia» electorales y votó por la candidatura del Dr. Gild ardo Gómez, quedando derrotada la candi- datura r fiel al en la que figuraba para Presidente Municipal el conspicuo cretino Tereso Villosante La autoridad tuvo que recurrir al fraude al ver que el pueblo votaba á favor del Dr. Gildardo Gómez. Los gendarmes vestidos de paisanos y los soldados del 10V Regimiento igualmente disfrazados, fueron los únicos que votaron á favor de Villosante. La autoridad, como de costumbre, hizo fraude, ejerció presión enviando á sus ayudantes á las casillas para obligar á lo» ciudadanos á votar por la candidatura oficial El Tesorero General del Estado, José Núñez, y un tal Alcántara, esbirro de Pimentel, recorrían las casillas intimidando á los ciudadanos, falsificando boletas, poniendo nombres supuestos en los respaldos y pretendiendo que lo» votantes entregaran sus boletas en blanco. A pesar de la chicana y de la presión, la candidatura popular recibió innumerables votos. La noche del dia 11 del mes que hoy termina, los ciudadanos asistieron á la sesión del Ayuntamiento en que se iba á dar cuenta de las elecciones municipales. El pueblo esperaba el triunfo, pero se desengañó cuando el Secretario declaró que había triunfado la candidatura oficial. Tan escandaloso cinismo provocó la indignación de la concurrencia, que protestó contra la burda chicana de las autoridades. Un obrero, justamente indignado, se levantó de su asiento para protestar en nombre del pueblo contra el crimen de lesa democracia perpetrado por la autoridad.y terminó diciendo, que «en la conciencia de todos estaba que los ciudadanos que honradamente y sin coacción ejercieron sus derechos elec torales, votaron todo» á favor del Dr. Gildardo Gómez.» La actitud de ese obrero e» digna de aplauso y debe servir de ejemplo á todos lo» ciudadano». Por todo lo anteriormente dicho, se ve que el pueblo cuando cumple con su deber, tropieza con el fraude y la chicana de la» autoridades. No e», pues, exacto que el pueblo se despoje de su» derecho» por no querer ejercitarlo». El pueblo, sencillamente, es objeto de la burla de las autoridades. Pero esa burla, ese ultraje, acarreará feliz mente la ruina de la tiranía que perecerá por »u propio descrédito. El candidato de Emilio Pimentel, el distinguidísimo cretino, Sr. Villosante, ha sido impuesto en beneficio del Gobernador científico. Todo, ha sido cuestión de negocio. Pimentel tiene negocio» con un tal Bustamate, miembro de una compañía de tranvía» que ha ce ganar á Pimentel sumas no despreciables. Ese Bustamante tiene como empleado á Villosante, é intrigó para que su empleado ocupase la Presidencia Municipal en 19u5. De ese modo, Bustamante podrá obstruir impunemente la» calles como lo ha estado haciendo, podrá destruir los pavimentos sin que nadie lo obligue á repararlos y podrá hacer buenos negocios en unión del clerical Pimentel, con evidente perjuicio de los intereses populares. Los oaxaqueflos deben acusar á las autoridades. Es cierto que no se castigará á loa culpables, pero esa impunidad servirá para acrecer el desprestigio de la tiranía, y servirá también para aumentar los capítulos de acusación que la conciencia pública tiene formulados ya, para hacerlos valer el dia de la reivindicación. Felicitamos al pueblo oaxsquefio por su civismo. Esperamos que no se decepcionará por el fraude oficial, sino que, por el contrario, se sentirá poseído de viril indignación. No hay que olvidar el ultraje* Hay que recordarlo^ cada instante para conservar vivo el deseo de vengarlo. Porfirio Díaz tendrá que arrepentirse al fin, de no haber sabido hacerse digno del aprecio de sus conciudadanos. Como se notóenia ei Mélico. En el Estado de Durango, que hoy tiraniza Esteban Fernández, no pasa un solo día sin que se registren escándalos cometidos por la autori. dqd. Hay mucho que decir, pero por ahora solo nos concretamos á señalar algunos de los abusos que se cometen en Tejamen, población de dicho Estado. En Tejamen, como en* todo el país, las autoridades muestran un profundo desprecio por el ciudada* no. Las autoridades de Tejamen, de acuerdo con el Gobernador Este* ban Fernández, han impuesto una contribución odiosa de veinticinco centavos mensuales por cada varón de catorce años en adelante. Esa contribución que por si sola es odiosa y excesiva, porque en Te" jamen el pueblo perece de miseria, se hace más odiosa aún porque el que no paga es encarcelado por es pació de varios dias ó condenado á hacer el servicio de ronda. La Constitución en su artículo 17 prescribe que nadie puede ser preso por deudas, pero ese precepto de nuestra Carta Fundamentales viola* do de continuo, como la Constitu* ción toda, por las autoridades que pesan sobre la nación. Los habitantes de Tejamen emi* gran del pueblo en busca de garantías, y los que quedan tienen que sufrir el despotismo de las autori* dades que se están enriqueciendo con la fatiga del pueblo explotado. Si el Gral. Díaz tuviese alguna vez la humorada de visitar á qste* ban Fernández en sus dominios, exclamaría del mismo modo que lo hizo cuando estrechó en Monterrey la mano sangrienta de Bernardo Reyes: <¡ Así se Gobierna . . . !» \ ANUNCIESE ITd. — -u- EN -------~ «*HREGENERACIONHí- I ♦ —— Circula en la República » Mexicana y en el sur de los ESTADOS UNIDOS. ( ----1 1 - .r UNA DAMA ATROPE- LLADA POR LA POLICIA El ramo administrativo por cuya buena marcha se preocupan hondamente lo» gobiernos honrados, es el de justicia. La justicia es tan necesaria al hombre en sociedad, como el alimento, como la habitación, como el vestido, porque ella garantiza la posesión de lo» bienes, la tranquilidad del individuo, el respeto á sus derechos. Un pueblo sin justicia no puede ser feliz porque está á merced de todo» los abusos Por eso los pueblos sobre los que pesa la tiranía son desgraciado», porque Ja tiranía es la representación de la injusticia. En nuestra martirizada Patria no hay justici a. La justicia en nuestra Patria está representada por jueces hoscos qne en lugar de buscar en la ley los preceptos que deben aplicar en sus determinaciones, hurgan los bolsi los de los cludadanot en busca de monedas, obteniendo el poseedor de la suma mayor todas las atenciones, todos los favores y todas las complacencias de una justicia de alquiler. Es proverbial la venalidad de nuestros jueces para que nos esforcemos en demostrarla. No es menos proverbial también su negligencia. He aquí un caso. A mediados del afio que hoy termina fué villanamente ultrajada por la policía de Salamanca, Oto., la honorable señora Natalia Garcilita, esposa del Sr. Gonzalez Frías. Unos gendarmes ebrio», mandado» por el Co mandante Baldo mero Gallardo, celebre como rufián en toda la comarca, aprehendieron sin motivo justificado á la Sra Garcilita, cuando dicha dama pasaba por la Plazuela de la Cons tituclón. La dama pidió explicaciones á lo» aprehensore*. pero por toda respuesta recibió el maltrato brutal de los boten to tes policías, que á empellones y tirones la condujeron rumbo al puesto de policía. Afortunadamente varios vecinos respetables de la población se apercibieron del atentado y lograron, después de grandes esfuer zo», que los cafres dejaran en paz á la desolada dama. Avisados el esposo y un hermano de la dama ofendida de lo que ocurría á ésta, fueron á poner su queja ante el Jefe Político, Jesús Espinosa, funcionario negligente, estúpido y arbitrario, que rec'bió con marcado enfado á lo» quejoso» y á quienes por toda contestación dijo a ambos sexos• Cursos de IngUsy Taquigrafía comercial Precios cómodos Colocaciones aseguradas f ara los graduados. Pídanse Catálogos. G. E. MeItLIFE Director. S. Antonio, Tex. Alamo Insurance HuilditiK. Se tifie y se riza el pelo. Herramienta desinfectada. 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Testimonio De gratitud Con sumo placer daré testimonio ai como puedo decir, milagroso poder para sanar, que lazdoctora Alvessa Matthews posee. Fui afligida de enfermedad temanina desde hace tres afios Tomé varias medicinas sin resultado ninguno, pues mi enfermedad se iba haciendo más grave hasta que la vida era intolerable. Entonces me dirigí á esta señora de la cual yo había oido hablar antes. Eli a me curó en 16 días enteramente por medio de «tratamiento ausente.» Nunca me dió medicina alguna ni me tocó. Esto fué hace cuatro meses y de«de entonces no me he sentido mal y ahora puedo trabajar como en los años pasados. Contestaré con gusto cualquiera pregunta acerca de mi enfermedad y cura, porque sé que debo mi vida á la doctora. Florence Douglass, 214 Arsenal Si. San Antonio,^Texas. fl QUIEN INTERESE- Con sumo placer daré testimonio al gran poder para sanar enfermada, des, que posee la Dra. Alvessa Matthews. Ella curó á mi esposa milagrosamente después de que yo había gastado centenares de pesos sin resultado. Había tenido varias operaciones en San Antonio, pero su enfermedad creció hasta que su peso llegó á ser de 115 libras cuando la traje á la Dra. Alvessa Mat* thews. Ahora pesa 170 libras. La gran Doctora nunca la dió alguna medicina. Yo soy un ranchero bien cono* cido y con gusto contestaré cual* * quier pregunta á cualquier tiempo acerca de la enfermedad de mi es* posa. Thbodor Knibysky. ^Nuestros agentes Son agente* de REGENERACION en Estado* Unido*, loe siguiente» persona* que están facultadas para conseguir g cobrar subscripciones: Benigno M. Larrumbide—Cor. Milam St. & Texas Ave.—Houston, Tex. Pedro Zúfiiga. — Reedville, Texas. Ju»n B. Olivares.—Japónica. Kerr Co. Texas. Rómulo 8. Carmona.—301 S. Stanton St. - El Paso, Tex. Marcial Mufioz.—1902 Farragut St. Laredo, Texas Marcelino A. Ibarra— Reedville, Texas. Pedro S. Trujillo—Lockhart, Texas. Ramón Cavazos—Encinal. Texas. 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