Cilíiviidi EL ESTDIIO BE LA BIBLIA ei el Hegir For el Dr. JAMES L SULLIVAN Muchas veces las nuevos cristianos han transformado sus propios hogares, a medida que cultivan su compañerismo con Cristo. Teniendo un profundo deseo de seguirlo, han influido sobre toda ¿ . familia para ser más semejantes a Cristo. Por medio de sugestiones y de su influencia han llevado a sus padres y parientes a cooperar para hacer su hogar cristiano en carácter e influencia. Como levadura en *a masa. la influencia de estas nuevas vidas cristianas ha suavizado los corazones de todas las demás miembras de la familia y ha cambiado por completo la vida de éstos por medio de sus propios espíritus cristianos. La influencia de un cristiano consagrado es maiavillasa en cualquier hogar. Cuando todos los miembros de una familia son semejantes a Cristo, este hogar está cerca del cielo. Muchas cosas deben comprenderse en la vida familiar de éxito. Consideremos algunas de ellas; 1. Devociones particulares. El alimento para el cuerpo es necesario, y el sustento saludable para el alma es igualmente esencial. La tranquilidad del hogar es el mejor lugar para la devoción íntima y los momentos de meditación en Dios, pa ra lo cual se ofrece el curso de lecturas bíblicas de la Unión de Preparación. Esta.1 experiencias nutren y sastienen el alma en las horas de más profunda necesidad en la vida. Cada miembro de la familia debe individualmente leer la Palabra de Dios. Por medio de la Biblia y el Espíritu Santo, Dios se comunica coa nosotras. Los miembras de la familia necesitan orar individualmente; la lectura de la Biblia y la práctica de la oración diaria los fortalecerán. Esto es maravilloso cuando se incluye en el programa diario de cada miembro de la familia. El nuevo cristiane debe procurar que los demás miembros de la familia se unan a él en esta práctica importante. Un hogar cristiano conduce a este espíritu de culto privado. 2. El culto familiar. Las cosas sencillas y pequeñas influyen poderosamente • en la vida del hogar. El dar gracias a la hora de las comidas es una de ellas. Cuando uno es esposo o esposa, quizás pueda establecer la costumbre de dar gracias antes de cada comida como parte regular del programa y práctica del día. Si es un hijo de familia, puede dar gracias a Dios en silencio aun cuando los demás miembros de la familia no sean cristianos, y puede estimular a éstos a unirse a él en su diaria expresión de gratitud a Dios antes de las comidas. Es posible que pueda influir en ellos para que adquieran esta deseable y valiosa costumbre. Si la familia se niega a unirse abiertamente en esta acción de gracias antes de las comidas, se puede hacer privadamente. Puede también resolver en su corazón que cuando años más tarde establezca su propio hogar, hará de la oración de acción de gracias una parte vital de sus costumbres diarias. Es mucho más fácil establecer el hábito de orar en el hogar, cuando éste acaba de fundarse. Justamente antes de las comidas es ocasión maravillosa para que los miembros de la familia recuerden las bendiciones de Dios y le den gracias por el alimento diario, pues Dios es el dador de "toda buena dádiva y todo don perfecto" (Santiago l:17i, y los cristianos deben reconocer estas bendiciones con su diaria gratitud. Los corazones humanos se enfrian si los cristianos no recuerdan la fuente de las bendiciones de su vida y regularmente las agradecen al Dador de ellas. Pocas casas son más tiágicas que el que una persona reciba abundantes favores de Dios y nunca sienta o exprese su gratitud a él por ellas. Es una cosa gloriosa paia las familias unir sus corazones y sus voces en reconocimiento y gratitud a Dios por todo lo bueno de la vida. Uno de los más hermasas actos de culto en el hogar es cuando los miembros de la familia se unen en adoración dirigidos por el padre o la madre, y todos los miembros de la familia participan con simpatía. Estos momentos de adoración no necesitan ser largos para ser significativos EL HOGAR CRISTIANO