alabado. ¡Cuánto más debemos noeotros gracias por las riqimas de tu traéis. Ayú-alabar a Dios por sus bendiciones! O. W. daños a alabarte con nuestros corasonss, Orecián: Padre nuestro, de la profun- con nuestros labios, y con nuestras vidas. didad de nuestros corazones te damos Amén. Dirección Paternal Según "Proverbios" Por W. W. AHiso* Cuando leo y me doy cuenta de lo extendido que está la criminalidad entre la juventud de hoy, recuerdo que el escritor del libro de los Proverbios debe haber entendido algo o mucho acerca de la dirección espiritual que debía darse a los jóvenes en esos tiempos y que debe darse a los de los tiempos presentes. El proverbista dejó clara la idea de que él no creía en nada que se comparara con la libertad que en los tiempos presentes tienen los niños y muchos jóvenes para guiarse a sí mismos según lo enseñan muchas gentes en estos días. A esto se le ha llamado "dirección propia" o "dirección de sí mismo." Las gentes liberales en cuanto a la conducta o disciplina que favorecen esta “dirección propia" en los grupos, en los tiempos presentes, tienen varios importantes principios. Entre éstos encontramos los siguientes: “no produzca inhibiciones en el niño”, “deje que el niño se exprese por sí mismo", y también que los padres nunca deben castigar corporalmente a sus hijos. Si yo no creyera en la naturaleza adámica, yo podría obedecer estas declaraciones que acaban de ser hechas; pero como yo sé que la expresión natural del niño está de acuerdo con la religión de su padre Adam, yo sé que el niño debe ser guiado y algunas veces reprimido y castigado. Enseñar al niño que la cosa más natural es la expresión de si mismo, sin la inhibición, o sea, sin prohibirle o evitarle que haga lo malo, es promover las malas tendencias en el niño. A continuación citamos del escritor de los Proverbios algunas de sus opiniones referentes a este asunto: "El que detiene el castigo, a su hijo aborrece: mas el que lo ama, madruga a castigarlo." (Prov. 13:34). "Castiga a tu hijo en tanto que hay esperanza; mas no se excite tu alma para destruirlo." (Prov. 19:18). • La necedad está ligada en el corazón del muchacho; mas la vara de la corro:-ción la hará alejar de él." (Prov. 22:15). “No rehúses la corrección del muchacho: porque si lo hirieres con vara, no morirá. Tú lo herirás con vara, y librarás su alma del infierno." (Prov. 23:13, 14). "La vara y la corrección dan sabiduría: mas el muchacho consentido avergonzará a su madre." (Prov. 29:15). “Corrige a tu hijo, y te dará descanso, y dará deleite a tu alma." (Prov. 29:17). “Instruye al niño en su carrera: aun cuando fuere viejo no se apartará de ella." (Prov. 22:6).—The Word and Way, en Adelante. Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa. Para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra. Y vosotros, padres, no provoquéis a 1ra a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor." El Hijo sabio toma el consejo del padre, mas el burlador no escucha las reprensiones.” Prov. 13:1. ¡Ay del que no tiene un recuerdo de desinterés conque calentarse en el Invierno, la dichosa memoria de una hora pura de servido humano, de amistad o de libertad, de cariño o de justicia, de compasión o de limosna! i ay del que no tiene un poco de luz en su sima!—José Marti. IL MOGA» CRISTIANO 47