05 TROFICO SEXU1L: EEILIMD EN AUMENTO Portada, DiarioSiuiDiego. le llaman "esclavismo moderno" y se ha convertido en importante negocio para pandillas en el Condado de San Diego Alexandra Mendoza Diario San Diego an Diego.- La ciudad de San Diego es considerada como un puente do entrada para el tráfico sexual de menores de edad, inclusive ocupa el lugar número ocho a nivel nacional en dicha actividad. Las pandillas o grupos de crimen organizado han encontrado en esta práctica ilícita una importante fuente de ingresos, en ocasiones por encima del tráfico de drogas y armas. En los últimos cuatro años, agencias policiacas han identificado a 351 víctimas de explotación y tráfico sexual en el Condado de San Diego, de las cuales el 31% eran menores de edad. Asimismo, las autoridades han arrestado a 105 sospechosos, 42% de ellos miembros de pandillas. La edad promedio de las víctimas de tráfico sexual es entre 12 y 14 años. De acuerdo a investigaciones de la Piscaba del Condado de San Diego, estos criminales buscan a sus víctimas a través de Internet o hasta en centros comerciales, las “enamoran” y luego las obligan a tener relaciones sexuales por dinero. Por lo general, los “padrotes” las ofertan a través de sitios en la red y en promedio las pandillas adquieren entre $500 y mil dólares por cada encuentro que obligan a tener a estas mujeres. “Conseguir a una de estas chicas en Internet es tan fácil como ordenar una pizza”, alertó Jason King, del Departamento del Sheriff en San Diego. Dijo que su oficina reaUza labores de investigación encubierta, monitoreando distintas páginas de Internet que podrían fomentar esta práctica. “Estos tipos se creen intocables, envuelven a sus víctimas de tal forma que les hacen creer que ellas son las criminales no ellos”, agregó. El problema al que se enfrentan las autoridades en estos casos, es que las víc- Alexandra Mcndoza/Diario San Diego organizados. Autoridades formaron el Concejo Contra Explotación de Menores. timas realmente llegan a enamorarse de sus padrotes, lo que dificulta que éstas los denuncien o testifiquen en su contra. “Estos tipos las tienen muy bien amenazadas, obtener información de ellas para la investigación siempre es un reto”, informó King. Mencionó que en la mayoría de los casos estas pandillas buscan a adolescentes con problemas en casa o indigentes. Inclusive, en un reciente estudio, se determinó que una de cada tres mujeres con dichas características ha sido explotada sexualmente y una de cada cinco ha sido involucrada en actos de prostitución en el Condado de San Diego. Ante esta alarmante situación, recientemente se formó el Consejo contra Explotación Sexual de Menores (CSEC), que busca incorporar el modelo de las 3 P: prevención, protección y persecución, adoptado por el Departamento de Justicia de los Estados Unidos. “Este sistema nos permite atacar el problema desde la raíz, proteger a nuestra ni ñez y atrapar a los delincuentes detrás de estos crímenes", consideró Mack Jenkins, Director de la oficina de libertad condicional del Condado. CASTIGOS MÁS SEVEROS La Junta de Supervisores del Condado está considerando incrementar las sanciones para los crímenes de tráfico y explotación sexual. La máxima sanción actual para estos delitos son 8 años en prisión, castigo que de acuerdo a la Supervisors Dianne Jacob, no es suficiente. “Estamos trabajando de la mano con agencias de seguridad para establecer una penalidad justa para estos delincuentes”, dijo la autoridad en una reunión informativa. Enfatizó que las víctimas de explotación no son consideradas criminales, sino personas que necesitan ayuda. “Muchas veces estos jóvenes no hablan con las autoridades porque creen que ellos son los responsables del delito”. Alexandra Mendoza/Diaho San Diego SUPERVISORES. Dianne Jacob. Últimos 4 años 351 víctimas 31% menores de edad Se arrestaron 105 sospechosos 42 eran parte de una pandilla PROTEGER A VÍCTIMAS El grupo “Generar Esperanza" (Generate Hope) encabeza un programa de recuperación para mujeres que han sido traficadas, prostituidas o explotadas sexualmente en San Diego. De acuerdo a Susan Munsey, directora de dicha asociación, la mayoría de las personas que reciben iniciaron en esto a los 12 ó 13 años. "Son prácticamente niñas, victimas con hambre de vivir una experiencia en familia y que encuentran en nosotros un lugar donde refugiarse", señaló. Mencionó que los daños psicológicos que sufren pueden ser muy fuertes y que el mayor reto es convencerlas de retornar a sus actividades cotidianas. “Es muy triste escuchar sus historias, del cómo eran sometidas a veces 72 horas seguidas".