LOS TAPICES DE BOSNIA ‘ Su Eminencia el Reis-Ulema tendrá mucho gusto en recibir a usted a las once y media." ¿Qué hacer hasta las once y media? Pasearme todavía un rato por las calles de Sarayevo o regatear con los comerciantes turcos sentados sobre tapices en las tien-duchas de! Gran Bazar sobre el precio de una nargilea o de una pipa, tomar en el ‘ Café Central” con oficiales y empleados una taza de café a la europea o la pequeña tacita a la oriental en los divanes del ‘‘Kasana de Bosnia/’ Cómo aprovechar las {locas horas de que puedo dispjoner para estudiar un poco más la extraña vida de esta ciudad en que los Balcanes y el. Occidente de Europa se mezclan tan intimamente y en donde brotó la primera chispa del gran incendio que hoy consume a casi toda Europa. No sabia si ir al puente en donde se perpetró el 28 de Junio de 1914 el asesinato del Archiduque Fernando y de su esposa y presenciar la colocación de una placa conmemorativa que he oído decir van a colocar hoy. O bien.... Al fin me decidí pot visitar la célebre fábrica de tapices de Bosnia. Es una hermosa fábrica. “Muestras católicas con cruz y mosaicos, me decía el empleado que me la mostraba, señalándome los hermosos tapices. Estas otras son muestras de la Meca, tal como las traían antes los Hadschihs de sus peregrinaciones. Ahora está prohibido por motivos higiénicos, pero nosotros hacemos iguales tapices copiando exactamente las más antiguas y más hermosas muestras. Mire usted este tapiz rojo, los adornos son puramente servios, es ún-* mués tra que se fabrica en la ciudad servia de Pirot, aquel otro es la célebre muestra de Transilvania, naturalmente son muestras eslavas creadas por los eslavos modificando las orientales, traídas del Oriente desde hace siglos y es interesantísimo seguir la historia de cada muestra y uno de los fines realizados por nuestra fábrica es la conservación de estas muestras que de otro modo ya se habrían perdido. En Servia han tratado de imitar nuestra fábrica y antes "de la guerra ban hecho todo lo posibl- por llevarme allá" Y el pequeño bosnio, asistente de John Bischoff, el director dé la fábrica, me cuenta encolerizado que los servios han acabado con su arte nacional de tapices. " Mezclan, me dice indignado, motivos católicos con motivos musulmanes sin ningpn reparo y no tienen la menor idea de la acertada combinación de colores y dibujos; en cambio aquí en Sérayevo esta fábrica nacional cuida con veneración de conservar el arte en su pureza primitiva. En todo el país se recogen las más hermosas muestras y se buscan las más hábiles tejedoras para traerlas- a los talleres de la fábrica. Aquí se perfeccionan en su arte las mujeres de Croacia, las de Servia y las de Turquía en cuyos talleres no puede entrar ningún hombre. La fábrica vende los tapices bastante baratos y cuando las tejedoras regresan a sus aldeas les ayuda para que sigan tejiendo en casa y puedan enseñar el oficio a otras aldeanas. Me cuenta entusiasmado la obra de su vida. Hace veinte años que está empleado en la fábrica y no ha pasado de asistente, pero a pesar de esto no ha querido abandonar el puesto y no ha aceptado las halagadoras propues tas que le . han hecho de Alemania, pues considera que aquí desempeña una misión patriótica conservando a esta hermosa tierra de Bosnia su antiguo arte, siendo la fábrica, por decirlo así, el templo en que el trabajo primitivo se ha organizado a la europea. “Mire usted, me decía orgulloso, las hermosas cosas que pueden hacer éstas ig-. norantes campesinas de Bosnia,” mostrándome magnifico* tapices, y señalándome la sala en la que estaban sentada* tra* lo* grande* telares do* muchacha* de Servia vestidas de vistosos corpiños y extraños adornos de cabeza que se ocupaban de formar la trama de- hilos de diferentes colores. Al mismo tiempo dos campesinas bosnias extienden otros en el suelo de todos tamaños, grandes, pequeños, largos, cuadrados. Junto a los ligeros tapices /le Bosnia los pesados de Persia que brillan como piedras preciosas y cambian de colores según el lado por donde se les .tnira. Preciosos tapices de seda en los que se trabaja durante años y ordinarios, muy baratos, para los cam pesinos. Muestras de Schiras y de Esmirna reproducidas admirablemente y luego de nuevo los ligeros tapices de Bosnia que predominan y cuyos dibujos son un tanto rectilíneos y de colores menos suaves y armoniosos que los de Oriente.En estos tapices está reproducido el Oriente por un pueblo de rubios y fuertes campesinos europeos y Bosnia es en realidad el Oriente sin el sol de Asia. Pero pronto serán las once y media. Me apresuro a asistir a la cita y en la puerta lateral de la mezquita imperial me recibe el sirviente que ostenta orgulloso su turbante. Limpia meticulosamente el polvo de mis zapatos y me conduce por una estrecha escalera de madera a una antesala adornada a la oriental. Esta antesala es, una verdadera orgia de colores. Los tapices abundan en todas partes, en el suelo, en los muros y sobre los anchos divanes, me parece encontrarme en una gruta de piedras preciosas tal como las describen los cuentos orientales. “Su Eminencia, el Reis-Ulema, le espera.!' Paso a la alcoba contigua y me encuentro en un gabinete de trabajo, escritorio, teléfono y caja de caudales, lo único oriental es él hermoso tapiz que cubre el suelo. El Jefe Supremo de los mohametanos de Bosnia y de. Herzegovina Hadschi Mehmed Dschelaluddin Effendi, Causevic, Reis-Ulema de Bosnia y la Herzegovina, Mullah de Stambul, me sale al encuentro con cariñosa sonrisa, es un hermoso anciano de barba blanca cortada a la turca. Lleva el turbante blanco, distintivo de los sacerdotes musulmanes, al rededor del fez rojo pero está vestido a la europea del cuello para abajo. También se encuentra allí un joven mahometano, el doctor Mehmed Spaho que debe servir de intérprete, pues el Reis-Ulema sólo habla servio y los idiomas del Orienté. Silenciosamente trae un sirviente el indispensable café y los cigarrillos, pero su Eminencia abre sonriendo una de las gavetas del escritorio y me ofrece un puro diciéndome que es de lo bueno lo mejor, que lo ha traído del gran banquete que el día anterior se dió en el Konak en honor del ministro de Hacienda del Imperio señor von Koerber. Fumamos y conversamos y noto en seguida que el Reis-Ulema comprende lo que le digo en alemán, y de cosas de Alemania es de lo que hablamos. Hace poco habia llegado un telegrama anunciando que las tropas alemanas y austríacas se habían unido a las búlgaras y noto al comentar la noticia que este musulmán es gran amigo de Alemania. Me despedí del Reis-Ulema y en la calle pensaba en el porvenir de Bosnia en donde viven servios y croatas, musulmanes y otras nacionalidades que han llegado de las diversas partes - de la monarquía e involuntariamente pensaba en los variados colores de los diferentes hilos que tejidos por mano hábil forman los preciosos tapices de Bosnia que son genuinamente orientales pero trabajados con método europeo y pensaba que Bosnia, con su variada población, necesita también de una mano hábil que amalgame las diferentes nacionalidades para que Bosnia sea en la Monarquía austríaca lo que un tapiz de Oriente en una alcoba europea, joya que contribuye a realzar el mérito del conjunto. Arnold HOLI,RIEGEL.