20 L A VO? prestigiada, prostituida ,y relajada por sus mismos ministros, no han procedido ni como cristianos, ni éomo filósofos, ni como caballeros. ¿Dónde están lás pruebas de tan avanzada aserción? Asimismo es muy grave falta' el. comparar á la Religion católica á Salla y Solibe, prostitutas simbólicas de la idolatría de Jerusalen y Samaria. Semejantes aserciones son el legítimo producto del mal , uso que hacen de las sagradas letras gentes qué no comprenden el sentido de ellas, sentido incomprensible para quien no las estudia con la sencillez del buén cristiano. Hemos contestado cuanto cabe en nuestras fuerzas, las razones emitidas en el articuló del Arco-Iris, , nos resta solo recomendar á los señores editores mas moderación en las palabras, que el público no gusta ya de las polémicas donde •Sé falta á los miramientos que mutuamente se deben los ciudadanos de una nación civilizada. Protestamos á los señores editores del Arco-Iris nuestro respeto. Puebla, Diciembre 16 de 1848.—Severo Mesa.—José Gómez. (Impreso suelto.) .■'..siWAMeHBaiLaro! Para la dominica segunda después de la Epifanía. 11 En aquel tiempo se hicieron unas bodas en Caná de Galilea, y se hallaba la Madre de “ Jesus allí: á mas fué llamado Jesus y sus discípulos á las bodas. Y faltando el vino, ” dice la Madre de Jesus á él (su Hijo): Vino no tienen. Y la dijo Jesus: ¡Q.ué impor-“ ta eso á mi, y á tí, 6 muger! Aun no ha venido mi hora. Dijo su Madre á los mi-u nistros: Haced cualquier cosa que os dijere. Había, pues, allí seis tenajas de piedra “ puestas, según la purificación de los judíos, cada una de las cualesHhacia dos ó tres “ medidas grandes. Díjoles Jesus: Llenad las tenajas de agua. Y las llenaron hasta “ el borde. Y les dijo Jesus: Sacad ahora y llevad al architriclino'6 gefe del convite. “ Y sé lo llevaron. Y como el gefe del convite probó el agua convertida en vino, y no “ sabia de dónde era éste, los ministros que habian sacado el agua lo sabían, llamó al “ esposo, y le dice: Todo hombre pone primero el buen vino, y cuando ya van embria-“ gados entonces (saca) el que es inferior. Pero tií has guardado el vino bueno hasta “ ahora. Jesus hizo esto, el principio de sus milagros en Caná de Galilea, y manifes-tó su gloria. Y sus discípulos creyeron en él. ” . (S. Juan, c. H.) Sobre la gloria de Jesucristo. No es primero lo que es espiritual sino lo animal, según dice San Pablo, en todas las obras de Dios, pues como bien ordenadas que están, lo terreno precede en ellas á lo" celeste, lo bajo á lo alto, la preparación y silencio á la manifestación y al predicar, la hunildad á la gloria. Este carácter está en ellas tan marcado, y es tan propio y peculiar suyo, que en la misma obra de Dios