I RKQKNRRACrON 3 In plena barbarie. El bandidaje oficial. ■ Lo que pasa en Coahuila bajo la ■¡('tuoia Administración de Miguel •ordenas, no rasaría ni en lae regio-I • más salvajes del Africa. En Coa-tulla reina la barbarle; una barbarle lúe espeluzna, que asombra, que irrl ■H; una barbarie desbordada y loca lúe asóla, como un huracán maldito, Isa tierra desventurada en que el pueblo es tratado-como rebatió, en que jos funcionarlos obran como Sultanes í en que el ejercicio de la autoridad l a llegado * ser más funesto que el Ejercicio del bandidaje. No exageremos. Basta decir que In Coahuila existen las Acordadas l ara significar que en Ooahulla existe [el bandallsmo Oficial, porque las [Acordadas en Coahuila, como en Nue-l o León, como en toda la República. Lio son otra cosa que Instrumentos Liegos y brutales de las Autoridades superiores, que se valen de ellas para sembrar el terror en los pueblos con orí menee horrendos y descarnados. La misión de las acordadas es despejar el camino á las tiranías, sometiendo A los débiles y suprimiendo A loe valerosos, A los honrados, A los bue nos. Las hazañas de una Acordada harían palidecer á los mAs caracterizados bandoleros. De los que en Coahuila ejercen . el bandidaje con título oficial, el mAs notable es un tal Martín Flores, A quien CArdenas proteje con especialidad, pues, según se dice, el Gobernador debe importantes servicios A Martín Florea. Este individuo, rudo y sanguinario, es Jefe de Acordada, y tales atrocidades comete, que es visto con nAnl-oo en Coahuila. Apenas el terrible bandido Bonifacio Martines (A) «El Coyote» que está al servido de Bernardo Reyes, podrá compararse con Martín Flores, que milita A las órdenes de CArdenas. Muchos de los hechos de Martín Floree han quedado para siempre ocultos en el misterio de las encrucijadas y en el silencio Impenetrable de las sierras; pero algunas otras de sus hazañas han tenido un teatro menos lóbrego, han sido vistas por muchos ojos y han podido ser recojldas para figurar en los anales sangrientos de la tiranía. e En Santo Domingo, jurisdicción de Ramos Arlspe, el Juez auxiliar atropelló al Sr. Máximo Valdés, anciano de 65 afio» de edad, respetable y honrado. El Sr. V»ldés, sintiendo lesionados sus intereses, presentó el Jues auxiliar que lo atropellaba, una re-cl am ación justa y razonada; pero el Jues lejos de atender la queja, se exasperó con ella, y mandó llamar A Martín Flores, recomendándole que molestara al Sr. Valdés. Floree no se biso repetir la orden y A la cabeza de los foragldos que forman la Acordada, biso alardes de brutalidad, que todavía son recordados con espanto y con Ira por cuantos los presenciaron. El anciano Msximo Valdés fué* aprehendido y lo fueron también algunos hombres honrados que trabajaban con 61; se les ató, y en plena piase pública, en presencia de las desoladas familias de aquellos desventurados, se lee asotó y golpeó hasta dejarlos casi moribundos. Tan luego como se repusieron un poco, Martín Florea los condujo A Saltillo, atados, A pié, y mártir! sóndelos con voluptuosidad de hiena. En Saltillo estuvieron presos aquellos infelices como cinco meses, y al fin fueron puestos en libertad por un auto sarcAstico del Jues de su causa, que declaraba no haber delito que perseguir. Es inaudito el cinismo con que las autoridades atropellan A los ciudadanos, confesando paladinamente es?s atropellos y no tratando ni siquiera de remediar en io más mínimo loe perjuicios ocasionados. En Ramos Arlspe quebró la casa Comercial de Ismael SAnches García y Hno. Esa casa tenía cuentas por cobrar en todos loe ranchos cercanos, y un alto funcionario le compró esas cuentas en menos de su valor para hacer! as 61 efectivas. El alto funcionario llamó al Jefe de Acordada Martín Flores, le ofreció un tanto por ciento, y le encargó que cobrara lae cuentas. Martín Floree se dedicó A cobrar, y quizá por costumbre adquirida en la profesión, lo hacía de noche. Llegaba por sorpresa A los jacalee de los pobres rancheros, y brutalmente les exigía el pego de una cuenta que lee presentaba. Loe labriegos, al verse rodeados por las carabinas de los bandidos, daban cuanto tenían para que se les dejara en pan; pero había algunos que nada podían dar, y esos eran llevados A la Cárcel, tratados como bestias y obligados A hacer adobes ú otros trabajos para el alto funcionario acreedor, que llene gran amistad con Miguel CArdenas. Este mismo sistema se usa para cobrar A lodos los trabajadores el impuesto personal de $0.75 ó $1 00 al mes. Algún funcionario compra las boletas de este impuesto, y luego por la fuerza obliga A los trabajadores á que le paguen el doble de le que el pagó por esas boletas. En Ramos Arizpe, con cualquier pretexto se persigue al trabajador para que preste gratuitamente sus servicios á las autoridades. Hace poco que un pobre trabajador fué arrestado, dizque por no enviar A la Escuela A su hijo, de sinte afios. El trabajador fué sentenciada A hacer dos mil adobes y A pagar una multa de $18.00 y no quedó libre hasta que se cumplió tan ilegal é inicua sentencia. En los Ranchos cercanos A Ramos Arizpe todo» los hombres se van á dormir A la sierra, cuando Martín Floree anda cerca de esos lugares, pues temen la visita del bandido ' Semejantes excesos, que ampara el Gobierno de Miguel CArdenas, no necesitan comentario. La simple relación de ellos basta para horrorizar y para Indignar á cualquier alma medianamente honrada.; . ■ • - ieeee REPRODUCCIONES. Muy agradecidos estamos A los diversos colegas que han tenido la amabilidad de dar cabida en sus columnas 6 nuestras humildes producciones. La amable acogida que obtienen nuestros trabajos nos sirven de estímulo, porque vemos que no somos los únicos que exhiben las llagas de la actual administración, ni los únicos que comprenden el inmenso daño que la tiranía ha procurado A la Patria. La Fumada. semanario político que publica en Puebla el enérgi* co correligionario, Sr. Alfredo Ques-nel, se ha servido insertar en su simpático periódico algunos de nuestroe artículos relativos A la política mexicana La Fumada se distingue por su energía al tratar los asuntos políticos de nuestra Patria. Igualmente damos las gracias á Los Sucesos. de la Ciudad de México. por haber reproducido nuestro enbe/iUt titulado "En camino de ser feliz.» El Dictador deba BDULBtBTBB. En nuestro número anterior hicimos un llamamiento A la conveniencia del Gral. Díaz, ya que no á su patriotismo porque no lo tie\ ne, invitándolo A que modere su opresión si no quiere exasperar al pueblo. Pero el Gral.. Díaz no ha hecho aprecio de esa patriótica indicación por más que pocos dias antes había ofrecido en público, con el aparato de que gusta rodearse, que las indicaciones de la Prensa serían debidamente atendidas. Nunca, por lo demás, hemos tomado en serio las frases del Dictador, y si ahora hacemos alusión A una de ellas, es pa--* ra que los miopes se convenzan de que el Presidente representa en toda ocasión una comedia torpe y vulgar. Dijimos que á la Autocracia conviene dejar en libertad al pueblo para que ejercite sus derechos. Hemos hecho notar que el pueblo de Coahuila estA dispuesto A no permitir más la imposición de CArdenas ni de ningún otro individuo, y que ese pueblo sufrido, valiente y generoso, quiere nombrarse un Gobernador que no sea impuesto por la Dictadura, sino que sea el hombre elegido por sus hermanos para que salve al Estado de la ruina y de la vergüenza en que lo ha sumido su gobernante actual. La Dictadura lejos de atender tan sanas indicaciones, pretende violentar A los ciudadanos. Por medio de sus agentes trata de impedir A loe ciudadanos de San Pedro de las Colonias que ejerciten sus derechos, ya poniendo trabas A las labores del Club Democrático «Benito Juárez.» ya procurando la desunión de los oposicionistas, 6 bien, enviando soldados y rurales á dicha población con el premeditado fin de provocar conflictos para después tener el pretexto de intervenir, de exterminar y de imponerse. Las persecuciones y las amenazas han comenzado. El Sr. Dr. Candelario Durán ha sido encarcelado en San Pedro, únicamente por que dicho señor es parte integrante del Club DemocrAtico «Benito Juárez.» ¿Qué pretende conseguir la Dictadura con esos excesos de tiranía? Bien sabe el Autócrata que los coa-huilenses han manifestado ser irrevocable su decisión de sacudirse U tiranía cardenista. Igualmente sabe el Autócrata que los hombres de San Pedro no se resignarán A quedar atropellados, vejados y burlados; y sin embargo, la tiranía, desmoralizada al ver que pierde prestigio y autoridad, no mide el peligro A que se expone al poner en jue* go su acostumbrado sistema de abusos y"de violencias. El Gral. Díaz ha visto que el mo- vimNnto que ae Inltia en Coahuila, es formal. El conoce bien al personal directivo del Club Democrático «Benito Juárez.» Sabe que cae personal no se ha de dobteqar ante él. no se le ha de humillar, no ha de transijircon las exigencias de la tiranía, y de ahí su odio y su encono. El Grab Díaz, está acostumbrado á que todos los hombres de dinero se le humillen y eso no lo ha podido conseguir de los directores del Club de San Pedro. Ve, pues, el Gral. Díaz que lo más probable es que . sus exigencias se estrellen esta vez, y esa probabilidad aumenta, sise tiene en cuenta que los Sres. Orales. Trevi-ño y Naranjo son amigos y simpa* tizadores de la causa del pueblo coahuilense, y amigos—y aun pariente el Gralx Trevifio—de algunas de las personas que dirijen el moví» miento electoral en San Pedro. , Lo prudente, lo sensato, lo que baria un estadista sabio y patriota, sería dejar al pueblo de Coahuila en absoluta libertad para que elija sus funcionarios. Pero si el Dictador en lugar de oir la voz de la tazón pretende continuar su sistema de violencia, no conseguirá imponerse, y feí provocará con sus actos tiránicos* que se efectúe más pronto su indefectible ruina. La canalla Bajo ningún Gobierno, como bajo la Dictadura de Porfirio Díaz, se había viito tanta inmoralidad, tanta corrupción y tanta desvergüenza |en los individuos que desempeñan funciones públicas. Y es natural. Una tiranía no puede tener á su servicio sino individuos del mAs bajo nivel intelectual y moral; séres abyectos y depravados para los cuales es desconocida hasta la más rudimentaria decencia. Los hombres honrados, las almas rectas, no podrían nunca servir á la tiranía que se alimenta de maldades y se sostiene sobre infamias. Los hombres de conciencia y de honor, bajo# las tiranías, son las víctimas de los bellacos encumbrados. En MichoacAn, los individuos que sirven al Gobernador Aristeo Mercado están llegando al colmo de la impudicia. La prensa independiente, entre la que figura el enérgico semanario «Fierabrás» ha fus. tigado y exhibido, tanto al Gobernador Mercado, como á la falange de serviles que lo adulan, que lo sostienen y que con él comparten los beneficios del Poder. Antes de que la reelección de Mercado se consumara, todos sus lacayos se improvisaron periodistas y pretendieron defenderlo de los justos y tremendos cargos que la prensa honrada le hacía. Como era natural, los serviles fueron zarandeados por los periódicos independientes, y con las estúpidas defensas que hicieron de Don Aristeo, sólo consiguieron ponerlo en ridículo y atraerse ellos el merecido desprecio de las gentes sensatas. Despechados por su derrota emplearon la brutalidad para librarse de sut enemigos: denunciaron periódicos, apalearon cobardemente á los oposicionistas, encarcelaron A unos, desterraron á otros; pero á pesar de todo, no lograron someter A los hombres independientes. Más despechados aún. roídos por la convicción de su impotencia* y en el colmo de su rabia ponzoñosa, los infelices mercadistas, se han dedicado A ultrajar A sus nobles enemigos;, pero ni siquiera con el ultraje que lanza cara á cara la bellaquería cuando no estA exenta de virilidad, sino con el ultraje que oculta su procedencia, con la calumnia anónima que esgrimen como arma los rufianes emasculados. El Diputado Salvador Cortés Ru bio, su hermano Manuel y otro bribón llamado Manuel Rubio, que es cuñado del Diputado Miguel Mesa, se han dedicado á escribir y publicar asquerosos pasquines anónimos en que se insulta á los oposicionistas. Tenemos A la vista uno de esos pasquines que tiene como encabezado lo siguiente: «Baile Macabro.» (Entre Gallegos) Imitasión del «Dúo de los Patos» con acompañamiento de flauta y letra de P. P. Melga Reja Es clara la alución que se hace én esas lineas A los Sres. tjosé Gallegos Argüello y José Melgarejo, honrados ciudadanos que han combatido la inmoral Administración de Aristeo Mercado. Pero no es esto todo. La canalla merca-dista no se concreta á injuriar A los hombres, sino que lleva su mendacidad hasta difamar A una dama, como lo hace el pasquín aludido, en el que se pretende mancillar la reputación de la honorable esposa del Sr. Gallegos Argüello. El Diputado Cortés Rubio y sus compañeros anuncian la publicación de otros pasquines en que se difa- del Dr. P. E. Rodríguez L» para enfermedades de las Señoras., cura mejor que ningún otro remedio el Infarto, la Hipertrofia, Ulceraciones. Flujo blanco, Cáncer, los trastornos de la Menopausia ó edad crítica y en general todas las afecciones de la cintura. ¡Na hay que dejarse racanDcer ni aperar! Tómese antes «LA SALVADORA,» con la seguridad de encontrar la salud.—En Droguerías y Boticas, á un peso el pomo. —Los pedidos al por mayor, diríjanse al Consultorio del Dr. P. E. Rodríguez L., aa de Santa Catarina número 9. —Dirección por Correo, Apartado 1187.—México—.El Dr. Rodríguez no atenderá pedidos menores de una docena. DoposItpsr Hn Guadalajara, Droguería Continental de Silva Berrueco y Co—En Puebla. Droguería de Mercaderes, de A. Roig Sues.— En Orizaba, la de la Reforma No. 36. J. Contel.—En Veracruz. Droguería Veracruzana, de Muller Sues. — En Mérida, Droguería Peninsular de J. D. Díaz y Díaz. mará A respetables personalidades de la oposición. . La gente honrada de Morelia, que no ignora quienes son los pasqui-nistas, está indignada contra esos miserables que para desahogar sus bajos rencores, no se detienen ni ante la respetabilidad de una dama ni ante la consideración que merece el sexo femenino. La conducta de los mercadistas es incomparable por lo inmunda; es ejemplar como indecente; es insu* perable como fangosa. Él Gobier* no de Aristeo Mercado, harto des* prestigiado ya, acabará de enlodarse con estas nuevas y repugnantes ha* zañas de los que en él figuran, y llegará A ser visto con asco, como la podredumbre, como la lepra! ------- El arte y la tiranía. La Historia registra los nombres de algunos tiranos que se distinguieron por su protección al arte. Esos tiranos habían construido sus tronos sobre sangre y A diario refrescaban los cimientos con nueva sangre. Eran perversos, eran crueles, empaderaban mujeres, decapitaban ciudadanos, arrasaban ciuda-dades. Obraban como fieras, pero A veces sentían como artistas. Un buen soneto dedicado al tirano, enriquecía al autor; un buen cuadro obsequiado al déspota, podía abrir las puertas de la aristocracia al artista; una composición musical dedicada al sátrapa, podía agobiar de honores al compositor. En nuestra Patria donde impera una tiranía torva, agria, gris, que trasciende A cuartel, el arte vegeta roñoso y mustio, sin estimulo, sin protección, visto con recelo 6 perseguido brutalmente como sucedió con las obras «Por un Beso» y «El Verdadero Suárez.» Sin embargo, el Gobierno, á veces, para atraerse el aplauso de los imbéciles, finge protección al arte pensionando A jóvenes cretinos, hijos de sus favoritos, para que marchen al Extranjero á continuar sus estudios. No pensiona el Gobierno á los jóvenes que más aptitudes demuestran y que más esperanzas ofrecen, sino á aquellos que, sin vocación para el arte, no tienen otro mérito que el de ser hijos de diputados, de jueces, ó de cualesquier otros funcionarios 6 favoritos de los gobernantes. Céntados son^entre los pensionados, loftjóvenes que poseen facultades artísticas. En cambio, cuando algún artista se arriesga A pedir la protección oficial, recibe únicamente encojimien-tos de hombros, desprecios y humillaciones. Conocido es en toda la República y en el Extranjero, el genio musical del autor de las composiciones tituladas «Arpa de Oro» y «En Alta Mar.» El autor de dichas composi- clones las dedicó al Presidente y su esposa, y esa dedicatoria le valió la promesa del Gral. Díaz de ayudarlo, para lo cual lo invitó A hablar con él en el Palacio Nacional. El artista, tal vez porque ignoraba que el Gral. Díaz no cumple lo que promete, tomó A lo serio la invitación que por escrito le hizo el Dictador y asistió no una, sino infinidad de veces, á la cita, sin obtener audiencia, á pesar de haber sido invitado de un modo espontaneo y al parecer sincero. Varios meses estuvo concurriendo el artista al Palacio Nacional sin lograr ser recibido, hasta que,«decepcionado, renunció á la protección que sin solicitar le fué ofrecida. Para que haya arte es preciso que haya libertad. A veces el arte puede florecer bajo la tiranía; pero los tiranos protectores del arte son escasos, porque regularmente los tiranos son personas rudas, con hábitos y gustos de cuartel, afectos A las emociones brutales que son las únicas que pueden distraerles. Las emociones que produce el arte requieren algo de sensibilidad y algo de cerebro y eso hace falta á la mayoría de los tiranos. Timentel se quita la careta. comlenza A tener conciencia de su soberanía, protesta de mil maneras contra el despotismo. El 23 del pasado, en una velada que celebró la Escuela Normal para Profesores, en Oaxaca, te pudo comprobar nueetro aserto. Esa velada fué presidida por el Gobernador suplente, Lie. Joaquín Sandoval y el Secretario de Gobierno, Lio José Inés DAvi-la, bastante conocido en las sacristías. Varios oradores envilecieron: la oratoria adulando A los tiranos y ensalzando, como si'fuera una virtud, la traidora política de conciliación. José Inés DAvila, Joaquín Sando val, el Director de la Escuela Norma que se distingue por su servilismo, y otros personajes de la administración de Pimentel, gozaban con la adulación de los oradores. Pero un joven Profesor, el Sr. César A. Ruis, recitó una Oda viril, inspirada, digna, que biso el efecto de un fuete sobre las Innobles espaldas de los serviles. El Sr. Ruiz atacó al clero, fustigó A los tiranos y confundió á los ilotas. Sentimos no poder obsequiar A nuestros lectores, por falta de espacio, con la brillante poesía del Sr. Ruiz, A quien felicitamos por su patriotismo y raro valor civil. Otra muestra de civismo la dió el pueblo oaxaquefio la noche del 1? del corriente. Los serviles organizaron una sereaata en el Jardín «Constitución» para celebrar la reanudación de la tiranía. Invitaron al pueblo, hicieron esfuerzo» sobrehumanos para que hubiera concurrenclaen el paseo y só< lo asistieron los infelices gendarmes y los truhanes que sirven de policía secreta. El pueblo se abstuvo de mostrar regocijo en ese día de duelo para la República. Felicitamos Cordi al mente al pueblo oaxtquefio por su civismo, Emilio Pimentel ha decidido quitar se la careta No todo» loa hombre» pueden llevar el fingimiento al extremo que lo acostumbra el Dictador. Emilio Pimentel fingió liberalismo mientra» el pueblo oaxaquefio no hacía uso de sus derechos; pero apenas dió el pueblo algunas muestras de actividad democrática, desapareció el liberalismo del gobernante «científico.» Pimentel y su» panlaguados han inundado de polizontes la ciudad de Oaxaca, y ya hemos visto cómo esos polizontes ultrajan y vejah A los ciudadanos. Ahora vamos A consignar otro hecho que revela la Inquina que el Gobierno de Oaxaca le tiene A REGENERACION. Un niño de diez A doce años de edad iba leyendo por la calle un ejemplar de nuestro periódico El niño fué visto por uno de los rufianes reclutados por Pimentel para servir de policías secretos, y al momento fué aprehendido el jovenoito. A empellones se le condujo A la presencia de un Comisarlo estúpido, quien amenazó al niño con varios días de calaboso si no denun ciaba á nuestros corresponsales. El niño no se amedrentó y supo contestar con dignidad al eunuco, que avergonzado y confuso, tuvo que tragar su ignominia al ver que un nifio sabía BUSQUESE El proximo numero de “Re La Poderosa Sanadora. Cuy < reputación es bien conocida en todo este país, acaba de establecerse permanentemente en San Antonio, Texas. Sana todas las enfermedades, sin aplicar drogas, también cura A cualquiera distancia por medio del maravilloso poder del Espíritu con el cual fué nacida. Ella es la mejor adivinadora en el Sur, siendo la séptima hija de la séptima hija. Nunca hierra en cambiar la suerte Doctora ALVESSA MATTHEWS. Qalle S. Laredo 708.—Antiguo teléfono 808—1 R. ser más digno que él, puesto que el niño no quiso ejercer el vil oficio de delator. Tiene razón Pimentel, después de todo. En Oaxaca ha renacido el civismo potente, robusto, y A su empuje, el Gobernador tiene que renunciar A su tar-tuferia. Ya no puede engañar, porque la actividad popular lo pone en el dilema de ser liberal y amigo del pueblo ó de seguir el ejemplo de opresión dado por el Autócrata Pimentel se ha decidido por lo último; pero el pueblo, que está cansado de sufrir, y que