r'..M EL METODISMO EN LAS FILIPINAS AL ABRIGO DEL ALTISIMO La Iglesia Metodista ha limitado sus actividades a la isla de Luzon que es la más grande del archipiélago y que en la presante guerra fue la primera de las islas atacadas por los japoneses. La isla de Luzón tiene un area de 41,000 millas cuadradas y una población de 7,000,000 La mitad de los habitantes de las Filipinas viven en esta isla. La Iglesia Metodista se encuentra bien establecida en Manila la capital de las Filipinas y en cientos de poblados y villas de un extremo a otro de la isla. La membresía de la Iglesia Metodista es de más de 100,000. Esto representa un progreso muy notable cuando se toma en consideración que fue hasta después de la Guerra con España que se predicó el primer sermón evangélico en Manila mientras que la iglesia Católica tiene cuatrocientos años de establecida. Ha sido tal el crecimiento del me-todismo en Luzón que actualmente hay dos conferencias anuales debidamente organizadas: La Conferencia Anual de las Filipinas que comprende la ciudad de Manila, partes de las provincias de Rizal y Taya-bas y las provincias de Bulacan, Pampaga, Taralac, Bataan, Zam-bales, y Nueva Ecija y la Conferencia Anual del Norte que abarca las provincias de Cagayen (en el valle agrículo más rico), Isabela, Nueva Viscaya, Pangasiam e llocos del Sur. Por lo general los Filipinos propiamente ocupan los valles y las ciudades de Luzón y es entre estas gentes que la Iglesia Metodista está desarrollando su ministerio. Los negritos aborígenes ocupan la costa occidental y los Igorotes y otras tribus salvajes ocupan las montañas en el centro de la isla. Estas últimas tribus nunca fueron subyugadas por los españoles ni convertidas por los misioneros Católicos que laboraron entre ellos. Una de las mayores dificultades que los misioneros han encontrado en la isla de Luzón ha sido el idioma. Los filipinos de la isla hablan cinco diferentes idiomas. En la traducción de la Biblia, la preparación de himnos, de literatura cristiana y de misioneros se tiene que tomar en consideración estos idiomas. En los cambios de misioneros y predicadores que es necesario en el sistema metodista los obreros tienen que ser mantenidos dentro de sus grupos Página 8 lingüísticos. Los primeros misioneros metodistas en la isla de Luzón tuvieron que hacer un alfabeto para los diferentes idiomas y luego traducir la Biblia a estos idiomas asi como crear una literatura cristiana en cada uno de ellos. Los idiomas principales en la isla de Luzón son: Ilocano, Tagalog, Pangasian, Pamgangan e Ibanag. En la ciudad de Manila, uno de los centros más cosmopolitas del mundo, la Iglesia Metodista celebra servicios en todas estas lenguas y además se celebran servicios en inglés, español y chino . . . En realidad, esto representa únicamente una parte de las necesidades lingüísticas de Manila pues se estima que cuando menos quince dialectos nativos y treinta y cinco lenguas importadas se pueden oir en la Ciudad. En las provincias, de un extremo a otro de la isla de Luzón, hay un gran número de congregaciones metodistas pequeñas y grandes pero todas ellas sirviendo a grupos que llenan completamente los templos y están sirviendo escuelas dominicales aún más numerosas. En casi todos los centros de importancia el metodismo tiene una o más iglesias y en las regiones rurales hay capillas agrupadas en circuitos. Muchas de ias iglesias de los centros importantes son de piedra o de cemento mientras que las iglesias de las villas son como los hogares del pueblo de bambú con techos de zacate-pero en general, son mejor construidas que los hogares del pueblo. Han sido construidas por el amor y la generocidad de los miembros y las gentes las llenan para adoración y alabanza. Muchas de estas pequeñas iglesias se ven sin terminar pero la gente que está acostumbrada a ver catedrales Católicas ser terminadas en décadas esperan terminarlas cuando las condiciones financieras lo permitan. Si pudiéramos hablar con los pastores, diaconisas, misioneros y miembros de las iglesias en Luzón los encontraríamos entusiastas por la acogida tan cordial que el pueblo ha dado a la iglesia evangélica y en particular a la iglesia metodista por este simpático pueblo filipino. Los metodistas de Luzón están tratando a la medida de sus fuerzas aún en medio de la guerra, de inten pretar los ideales e ideas cristianas a la vida nacional. El que habita el abrigo del altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente." Este salmo 91 es uno de los muchos salmos apropiados para los tiempos en los cuales estamos viviendo. El Cristiano no debe abrigar ningún temor en su corazón porque sabe que HABITA AL ABRIGO DEL ALTISIMO. Si nosotros como Cristianos en estos tiempos de prueba nos sentimos turbados, temerosos y faltos, de fe-—¿qué tenemos más que los paganos? ¿Que cosa buena les podemos ofrecer? Es cierto que el mundo se encuentra en tribulación, las tinieblas cubren la tierra y las fuerzas del paganismo sin cesar contra Cristo y su Iglesia. Pero esta no es una razón válida para murmurar, temer, temblar y caer a la tentación cediendo a las fuerzas Satánicas. Para el Cristiano y su Iglesia estos son tiempos de reto, de acción positiva y OFENSIVA. Dios le dijo e Ezequiel, "Hijo del hombre está sobre tus pies, yo, te envio a gentes rebeldes, de duro rostro y empedernido corazón (que se revelaron contra mi.)" Y para corroborar (todo) esto el Espíritu de Dios le dijo a Ezequiel, "Hijo del que "debajo de sus alas estaremos seguros, y que a sus gngeles mandará que nos guarden de todos nuestros caminos." El Cristiano sabe por experiencia personal que las promesas del Señor son ciertas y que permanecerán para siempre aunque la tierra^ y el cielo pasen. El Pueblo del Señor siempre ha salido VICTORIOSO a pesar de las vicisitudes de la vida—-le ha cantado alabanzas al Omnipotente en la arena de los circos, en las fogatas, en las cuevas, en los calabozos y en toda clase de torturas; muchas veces los perseguidores les han dicho, Reniega! Reniega y serás salvo!", pero ellos llevaron la cruz inevitable que el Evangelio Divino llegara a nosotros, y no los desepciona-remos con -la ayuda de Dios. Hermanos, AL ABRIGO DEL ALTISIMO necesitamos la oración. El tiempo ha venido o esta por venir, en el cual nuestro metal será probado y será descubierto el material que hemos usado en la construcción de nuestra vida espiritual. (Pasa a la página 12) B má¡ C hon tañí dole leyi te. L cillc hon viei toril cuy sole su la 1 * A sob la । eos pas nidi A ciei el leze con hor con ba su nar con por fere tier un der de l hec fue en cul de ser cor bla cié' sen dia lo día I fee am caí fL 2004