...........1L . . , .. EL MOMENTO QUE PASA I Por Francisco CRUZ-AEDO I "HOBBIES" — EL IDIOMA ESPAÑOL "Mándame a la mayor brevedad posible la música especial para chelo, ya sabes que con la música olvido mis luchas y faenas, y descanso completamente; mi cuerpo y mente adquieren nuevas fuerzas y puedo cumplir eficazmente con mi arduo trabajo cotidiano". Así decía un párrafo de una carta recibida. Ayer exclamaba un joven estudiante en un momento de charla familiar: "Profesor, parece mentira como descanso buscando y rebuscando las palabras para mis poesías "chuecas". Después de cumplir con mis deberes, me entrego de lleno al hermoso pasatiempo de encontrar figuras poéticas, y de rimar y medir versos. Mis pininos en el difícil arte de la versificación me ayudan para gozar más de la vida". Tenemos también aquí un jovencito muy estudioso. Desde hace tiempo se dedica a construir aeroplanos en los ratos de ocio, de ese ocio que menciona Rodó en su inmortal Ariel. Uno de los salones de la escuela lo ha convertido en un taller mecánico y experimental donde se pueden contemplar muchos tipos de aeroplanos. Los momentos desocupados los dedica a la construcción de aeroplanos que son la admiración de los maestros. Estos ejemplos me inspiran para traer a colación un asunto muy bonito pero muy extraño para una gran mayoría. Pocos son los que tienen un pasatiempo, un "hobby" que les facilite el medio para olvidar los problemas diarios, y les ayude a recuperar en parte ese desgaste físico que se siente en el desempeño de nuestro trabajo. Se puede descansar trabajando. El ministro, el maestro, etc., y con especialidad aquellos que viven en las ciudades populosas donde se vive una vida febril y agitada necesitan urgentemente usar sus horas desocupadas de una manera sabia y prudente. Un "hobby", interesante y fascinador es como válvula de escape por donde desaparecen nuestras preocupaciones diarias, una bendición para el hombre ocupado y una necesidad imperiosa en nuestra vida moderna. Pasatiempo y trabajo son muy diferentes. Nuestra recreación es aquello que nos ■ gusta hacer sin tener el deseo o la esperanza de ganar algo en efectivo. No tiene finalidades utilitarias ni esperamos recompensa alguna. Es aquello que hacemos cuantas veces podemos y aunque no tenemos que hacerlo lo hacemos porque encontramos un dulce .deleite y experimentamos un gozo infinito al ejecutarlo. Mi trabajo es aquello que tengo que desempeñar con ganas o sin ellas. Es aquello que hago sabiendo que es el medio para hacer frente a las necesidades de la vida. El trabajo produce cansancio, fastidio y un desgaste físico y mental. Los psicólogos nos dicen que el cansancio es solamente el resultado del acumulamiento de toxinas en el organismo humano. Para corregir este mal nada mejor que poseer un pasatiempo. El hombre que tiabaja con su cuerpo y mente ocho o más horas diariamente y luego se pasa el resto del día preocupándose por el mañana sufrirá las consecuencias. ¿Qué pasatiempo tendremos? Hay tantos que sería imposible mencionarlos aquí pero cada persona puede seleccionarlo según sus gustos, su trabajo y su temperamento. Conozco a un hombre que se dedica a coleccionar cactus y ha hecho del patio de su casa un lugar de admiración; otro encuaderna sus libros con gusto y tiene una biblioteca muy original; otro tiene una estación de radio en su hogar y su mayor alegría es platicar a través del aparato transmisor; otro más se compró un pedacito de tierra y se ha dedicado a cultivar diferentes plantas, y en estos días su terrenito es un vergel tapizado de flores aromáticas. Y así podíamos continuar con un sin número de ejemplos. Adquiramos un "hobby", un pasatiempo. Dediquemos nuestros momentos desocupados e® una recreación sana y hermosa, y veremos que proie-jemos nuestra salud y vivimos una vida de gozo, paz y belleza. Todos debemos de estar de plácemes porque ra surgido un movimiento nuevo que de seguro servirá para destruir los viejos prejuicios entre americanos y mexicanos, y ayudará a cristalizar el anhelo sincero de que México y los Estados Unidos se comprendan y se amen mutuamente. cSe trata nada menos que enseñar el Español en las escuelas públicas desde los grados primarios hasta el último año en la preparatoria a mexicanos y americanos. Para éstos el aprendizaje de la lengua española desde su niñez les servirá para adquirir la pronunciación correcta de las palabras y los capacitará para hablar y dominar este idioma que tanta falta les ahce en Texas y gjros Estados; y a aquéllos para aprender mejor el Inglés según las aseveraciones de muchos pedagogos que sostienen que un conocimiento sólido y bueno del idioma nativo les capacita para aprender jnás rápidamente la lengua inglesa. Por dondequiera han salido paladines de esta teoría y El Paso ha principiado ya en diferentes escuelas las- clases experimentales de Español en los grados primarios. El día en que el mexicano comprenda que el saber inglés es una arma poderosa para luchar con éxito en estos días de competencia, y el americano realce que saber español no denigra ni es "símbolo de ignorancia y miseria", las dos naciones se comprenderán como nunca y entonces si veremos resplandecer la verdadera política del "buen vecino". Las Mesas Redondas Panamericanas, algunos maestros universitarios de Nuevo México; la doctora en filosofía Marjorie Johnston, en Nueva York, etc., todos piden que los estudiantes de Texas y Nuevo México sepan hablar correctamente las dos idiomas. Que ha tiempo ha llegado este clamor y deseo hoy que, como dice Pedro Gringoire, "abandonamos nuestra lengua con mayor despreocupación, apenas masticamos tres o cuatro palabras en otra, y la postergamos resueltamente con el menor pretexto". Ojalá que estas clases experimentales tengan todo el éxito debido y que de allí surja en todos el deseo ardiente de dominar bien las lenguas de Cervantes y de Shakespeare. Página 3 F0« PRINTOUT FROW MICROFILM