Él Consejo ¿le Euangelismo Por R. A. Hernández Un Consejo de Evangellsmo puede ser la clave para obtener éxito en el trabajo evangelistico en su congregación. El plan ha sido adoptado por muchas iglesias y misiones en distintas partes, y ha probado ser uno de los más eficientes para la propagación del evangelio. Es nuestro sincero deseo mente los detalles de conveniente, lo ponga que usted estudie conclenzuda-este programa, y si lo considera en práctica cuanto antes. I. PERSONAL: 1. El Pastor como Moderador. 2. El Superintendente de la Escuela Dominical. 3. El Director de la Unión de Preparación. 4. La Presidenta de la Unión Femenil. 5. El Presidente de la Unión Varonil. 6. Secretario del Consejo. 7. El Director de Educación Religiosa (cuando se tiene). 8. Cualquier otra persona de la iglesia que se crea conveniente. II. REUNIONES: 1. El Consejo deberá reunirse por lo menos dos veces al año. (1) En octubre para delinear el plan para el siguiente año. (2) En marzo o abril para seguir los planes para el resto del año. 2. Antes de cada campaña de evangellsmo, con bastante anticipación para hacer los planes necesarios. 3. Cuantas veces se crea conveniente tener reuniones especiales para la buena marcha del programa de evangellsmo. III. PROGRAMA: 1. Por lo menos dos campañas evangelistlcas por año. (li Fijando fechas con bastante tiempo. (2> Consiguiendo obreros con bastante anticipación. (3> Preparando todos los detalles para una buena campaña. 2. Un programa de visitación por organizaciones en la iglesia, en rotación para cubrir todo el año. (Siendo los dirigentes de los departamentos los miembros del Consejo, se evitarán conflictos y duplicaciones.) 3. Promover cursos de estudio sobre evangellsmo. (1) Para cada edad por separado, cuando sea más conveniente para cada una. (2) Para todas las edades simultáneamente, con una reunión general antes de terminar cada noche. (Generalmente estos cursos duran cinco dias.) 4. Métodos para encontrar personas que simpaticen con el evangelio. (1) Un censo en la comunidad. (2) Un censo de la escuela dominical. (En éste se encontrarán personas que se cree son miembros de la iglesia pero que no han hecho su profesión pública de fe.) (3) (41 8 Dirigir un programa para localizar simpatizadores que se hayan cambiado a la comunidad. Utilizar el sistema de tarjetas para que las firmen los visitantes que asisten a los servl- clos de la iglesia. (5) Guardar con exactitud listas de miembros en perspectiva, eliminando los que ya no deben estar en la lista, y adhiriendo nuevos. 5. Dirigir un programa de alistamiento de ganadores de almas para Cristo. (1) Que cada miembro que se aliste procure ganar determinado número de personas durante el año. (2) Designar un dia especial, como "Año Nuevo" o "Resurrección" o algún otro día, y llamarle "Día de Victoria" de los ganadores de almas. (3) Se deberán preparar tarjetas como las tarjetas de promesa para el presupuesto de la iglesia. Estas deberán tener lugar para escribir los nombres de algunas cinco personas por las cuales orarán durante el año. 6. Si no hay comisión para la distribución de literatura, el Consejo deberá promover dicha actividad sistemáticamente. (1) Conseguir folletos evangelisticos. (2) Ver que cada miembro de la iglesia distribuya no menos de tres Nuevos Testamentos. Esto resultará muy provechoso. 7. Trabajar con otras iglesias y m'siones bautistas en programas unidos. (1) Cruzadas simultáneas, todas teniendo reunio- nes a la misma vez. (2i Cruzadas unidas, todas teniendo una sola reunión en una carpa o en algún edificio o lugar público. 8. Debe formular un programa para conservar a las personas ganadas. (1) Clases especiales para todos los nuevos creyentes y cuantos lo necesiten. (Se sugiere el libro Tu Vida y Tu Iglesia, por Santiago L. Sullivan). (2) Organizar grupos “Guarda de Mi Hermano". Los miembros de estos grupos se encargan de los nuevos creyentes y les sirven como guias en la nueva vida que han aceptado. Esto se hace por periodos de tres meses o más. (3) Conseguir que cada nuevo creyente se bautice lo más pronto posible para que pueda desarrollarse en la vida cristiana abundante. (4) Proporcionar a cada nuevo miembro literatura informativa concerniente a las actividades de la iglesia: organizaciones, presupuesto, pacto, articulos de fe, etc. (5) Conseguir que cada nuevo miembro obtenga una copia de "La Biblia", y darles consejos básicos para su uso. EL PROMOTOR DE £H El cuatrimotor que sale de Nueva York y vuela hasta Lima, Perú, lo abordé en la ciudad de Cali, Colombia. Volamos por encima de los Andes hasta Quito, y por sobre los nevados picachos, hasta Guayaquil. De allí seguimos por toda la línea de la costa del Pacifico, casi en linea recta, hasta Lima. La costa desolada y desértica, los Andes desnudos de vegetación, y el Pacifico batiendo furiosamente sobre aquellas playas y costas solitarias, eran un espectáculo difícil de olvidar. Pero más difícil fue la llegada a la Ciudad de los Reyes, la cuatrlcentenaria ciudad de Lima, oculta por un espeso manto de nieblas, por lo cual el avión va buscando su derrotero en vuelo a ciegas. Es una sensación angustiosa penetrar sobre aquel techo de nubes, sin ver una sola casa ni nada, y perforando la blanca cobertura llega la nave hasta el aeropuerto, que sólo puede verse cuando las ruedas corren sobre la pista. Allí estaba yo en la fría, húmeda y antigua capital de los virreyes españoles, dispuesto a comenzar una campaña evangelística de 22 días consecutivos, en la Iglesia Bautista de Mi-raflores, pastoreada por el hermano Luis M. Agüero, compatriota mío y compañero de labores de varios años. LA CITA. En el mes de septiembre de 1955 recibí en la Habana la invitación para tener una campaña evan-gelistlca en Perú, hecha por el pastor Agüero con el respaldo de la Junta Bautista de Misiones Foráneas. Por aquella fecha el plan era abarcar las distintas iglesias bautistas del Perú; pero veremos después cómo más tarde esos planes tuvieron que ser modificados. Después de pensar y orgir bastante, de-, .di aceptar la Invitación y contesté en sentido afirmativo. En el transcurso de los meses intercambiamos cartas para organizar los planes de trabajo de la campaña. "EL MES MORADO". Cuando la Iglesia Bautista de Mlraflores acordó que el mes de octubre fuera el escogido, tomó una decisión valiente, pues ese mes se conoce como el “mes mo- EDUCACION CRISTIANA LIMA, PERU Por Luis M. González Pefla rado" de Lima, dedicado al "señor de los milagros", una antigua Imagen de Cristo pintada en un muro por humilde pintor obrero, imagen que andando el tiempo adquirió una leyenda milagrosa que se ha ido extendiendo hasta constituir hoy el más fanático culto del país. Durante el mes se tienen diversos actos y toda la ciudad se viste de morado, color del señor de los milagros. A mediados del mes comienzan las procesiones, que duran quince dias, asistiendo millares y millares de personas que van detrás de la imagen en busca de milagros. Un gran negocio florece con estas multitudes, por la venta de objetos religiosos, comidas, bebidas, etc. Y fue ese mes critico y difícil el escogido para la campaña. En su carta el pastor Agüero decía: “combatiremos a Satanás frente a frente y en su propia fortaleza. Delante del Señor de los milagros predicaremos al Señor crucificado." UNA IGLESIA VALIENTE. Al correr los meses el amplio plan de evan-gelismo tuvo que modificarse por circunstancias locales y problemas Imprevistos, quedando sola la Iglesia de Mlraflores para afrontar la campaña, sin más respaldo que sus propias fuerzas. Fue entonces cuando decidió seguir adelante, planeando la campaña de 22 días consecutivos en su propio templo, en el mes morado, con las nieblas y vientos fríos de esa época del año en Lima. Para sufragar los gastos de la campaña la iglesia acordó levantar un fondo de diez mil sol.s (más de quinientos dólares), cantidad muy respetable para una Iglesia de menos de ochenta miembros; fijaron un mes para levantar la ofrenda, y el último domingo antes de la campaña llegó el último sol para completar la meta. Después no se volvió a levantar ninguna ofrenda ni antes ni durante la campaña. La Misión hizo un donativo a la Iglesia destinado al evangelista, al finalizar la campaña, por mano del Dr. R. Sledge. PUBLICIDAD A MEDIAS. La comisión de publicidad había proyectado una propaganda intensa y espectacular; pero el Incidente ocurrido en mi campaña en B '.rranquilla (Colombia) hizo frenar los planes. Las autoridades del servicíelo de inteligencia colombiana habían paralizado la campaña en Barranqullla y yo ful llevado ante el jefe; allí me mostraron un ejemplar de la propaganda. No pude seguir predicando y tuve que marcharme. Y no queriendo que se repitiera el caso en Lima, supliqué a la iglesia que no hiciera ningún alarde de propaganda, por lo menos hasta la fecha de comenzar, o unos días antes, siempre en una forma poco llamativa. A pesar de estas recomendaciones, siempre la iglesia imprimió anuncios en muy buen papel, de varios tamaños, unos con retrato y otros con la lista de los sermones. La distribución comenzó cinco días antes por comisiones bien organizadas yendo a cada manzana, cuadra y calle, en orden de distritos y barrios, especialmente en la zona aledaña al templo, " casa por casa. SE LEVANTA EL TABERNACULO. El pastor me consultó acerca del local que utilizaríamos para la campa- 9