Nuestros Intelectuales El Dr. Don Francisco Vázquez Gómez. —La figura del doctor Vázquez Gómez? —Si, señor. —Pero si es revolucionaria. —Y qué importa! No por eso es menos distinguida, »ii menos brillante. El doctor Vázquez Gómez hornea a México, y con eso nos basta. Esta sección está inspirada en una idea patriótica que tiene, por objeto manifestar el grado de cultura a que ha llegado nuestro pais, y para conseguirlo, no nos hemos de detener ante los muros de un egoísmo personal o de partido. Ya lo dijimos al principio. Por aquí desfilarán todas las más prominentes personalidades mexicanas, revolucionarias o no revolucionarias, siempre que con su vida y sus obras levanten el nombre de la patria. Que el doctor Vázquez Gómez, es revolucionario? Bien está. Pero también es un eminente médico y un notable pedagogo. —El doctor Vázquez Gómez? —Si, señor. Lo que usted oye. Y por cierto, que su carrera .es de las más salientes que hemos conocido. El doctor Vázquez Gómez nació, allá por el año de 60, en un rancho de mala muerte. En un rancho llamado del Carmen, a inmediaciones de Tula, Tamaulipas. Nació en la pobreza más desesperante. Y para cursar sus estudios, tuvo que hacer esfuerzos inauditos, porque ayudaba a su padre en las labores, del campo, para mantener a la familia. Después, fue a Tula. Y de ahí, a principios de 1881. pasó al Atqneo “Fuente,” del Saltillo, en donde dio comienzo a sus estudios secundarios, clirsando el primer año en cinco meses escasos. Hizo el viaje a la Capital de Coahuila, con dos pesos y medio en la bolsa, y gracias a que don Serapio de la Garza, casado con una hermana de Manuel Acuña le costeó el pasaje, pudo llegar a Saltillo y ahí encontrar un empleo de escribiente en el.despacho de don Eulogio de Anda, el más viejo notario de la localidad. Dos años estuvo trabajando, y durante ellos, cursó tres de Preparatoria. A fines de noviembre del 81, salió rumbo a México a continuar sus estudios, y otra persona,—don Manuel Castro, de Cua-