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REVISTA EVANGELICA
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Ir-
s pobre espiritualmente sin Escuelas Dominicales. Como
e un escritor: “El Que planta árbol hace bien; el que lo Tiba y lo corta en tablas hace m; el que hace una banca con tablas hace bien; pero el que, liándose en una de esas ban-_s, enseña a los niños, hace más y-^en que todo el resto: los pri-Ineros tres han aumentado el capital común de la humanidad, pero el último ha añadido algo a la humanidad misma”.
No necesito recordaros que nuestro Movimiento es de carácter mundial, que bajo sus banderas se alista un ejército de la juventud de todas las naciones cuyo número llega ya a muy cerca de cincuenta millones de alumnos y maestros, y que estas cifras están aumentando rápidamente. Tampoco necesito recordaros que nuestra obra es internacional, inter-racial e interde-nominacional. La Asociación Mundial de Escuelas Dominicales existe para fomentar, ayudar y guir el trabajo de las Escuelas Dominicales en todos los países.
Hemos venido aquí a aprender, a sentamos a los pies de muchos maestros; pero el simple conoci
miento y la mera técnica no son suficientes; venimos también en busca de inspiración y debemos sentamos a los pies de Cristo y aprender de El, orando porque la bendición del Todopoderoso esté con nosotros en todas las sesiones.
En esta época de crisis en la historia del mundo, nosotros somos más que una simple reunión de obreros de la Escuela Dominical, somos una Liga de Naciones espiritual, laborando por la salvación de las naciones por medio de los niños de todos los países. Hoy en esta Convención suficiente poder espiritual para cambiar la siguiente generación. El mundo está enfermo económica, política, espiritualmente, pero más que todo espiritualmente. De cualquier modo, la manera más rápida de curar todos estos males, es reparar el lado espiritual de la humanidad, volver a despertar la fe del hombre en el poder de la vida espiritual. ¿Qué manera mejor, qué manera más segura que traer a los millones de niños y niñas, jóvenes y doncellas de todas las naciones a los pies del Maestro? Las Escuelas Dominicales son ciertamente la esperanza del futuro.
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GRAN CONVENCION
Esta Gran Convención Mundial de Escuelas Dominicales se verificó en Noruega los días 6 a 12 de Julio del año ppdo. Su Majestad el rey Haakon VII de Noruega fué el patrono de la Convención, y asistió a la reunión de apertura. Este rey sencillo, demócrata y cristiano lo posible para que la Convención fuera todo un éxito, lo que 1 duda fué. Informaron en dicha Convención que en todo el mundo ■y actualmente cerca de 232 millones y medio de protestantes.