TOPICOS DEL DIA. Desde que D. Vennstiano Carranza, desarorllando sus instintos bélicos, demostrados cuando la Dictadura haciéndose reservista, se dio el titulo de “General”, todo en Mexico lo ha imitado: desde la felicidad hasta el tifo que son los únicos Generales en la República: la felicidad, se^ún los manumisos de D. Venustiano: el tifo, según las noticias de los periódicos. -De los tres Generales no sabemos cuál es el que verdaderamente domina; pero a juzgar por las noticias, D. Venustiano es el General Constitucionalista que ha acabado con la Constitución, la felicidad es la general que se pone de luto ct ando pasan sus compañeros armados y de gala cuando piensa en que no vuelvan, y el tifo es general que dejan tras de sí los otros Generales. Con estos tres generales, bien pueden los Catrancistas desafiar a todos los ejércitos del Kaiser. X X X El 29 de septiembre dia del Arcángel San Miguel, vencedor del Diablo, celebró sir septuagésimo otoño el Sr. Carranza. “Le tocó en suerte", como dice Fabela hablando de la Patria, hallarse en S. Luis Potosi.- Fueron inivtadas las familias decentes y no acudió ninguna Se trató de exitar al pue blo a la alegría, quitándole' el hambre con discursos sobre la libertad, y el pueblo silbó a sus libertades Se dió un baile en la Lonja y acudieron las respetables cohortes libertarias____y nadie más. D. Venustiano dijo, en vista de aquel entusiasta recibimiento, que si se hallaba en San Luis era por necesidades de la guerra no porque merecieran su presencia. Inmediatamente se sintió la onda bienhechora de la propaganda constitucionalista en una epidemia de tifo. XXX Pero, en cambio ha tenido un gran éxito. De un periódico genuinamente democrático, tomamos las siguientes palabras del Primer Jefe: "Estas ideas, que ahora he expresado y que hace poco fueron indicadas por mí, han tenido eco , fn un distinguido ciudadano que pensó ya también en la unión de las naciones latino-americanas y . en los priniepios que acabo de enunciar, de paz. de justicia, de libertad para todos los pueblos de América.” ñsto, traducido al romance, quiere decir que el Presidente Wilson es discípulo de Carranza, que la idea del panamericanismo nació de la vejez venerable del Primer Jefe y fué acogida por la amorosa naturaleza de Mr. Wilson; a la vez muestra cómo Don Venustiano, llama a Wilson “ciudadano" y acaba de enunciar un programa para toda la América Si después de haber sido porfirista y Reyista resulta demasiado cómico Don Venustiano declarándose demagogo, más cómico aún se nos presenta acogiendo a la América entera bajo su manto. Porque, según las noticias ante-dichas, bajo la de ropa del Costitucionalismo no es propiamente la libertad la que se cobija sino el redimido vehículo del tifo. XXX A la Conferencia Pan-Americana de Washington, en pro de la paz y de la unión Continental, ha delegado el Constitucionalismo a los Señores Luis Castillo Ledón y Manuel Ga-mio. La institución pacifista norte-americana más caracterizada, célebre en el mundo entero: la de Carnegie, nombra delegados a los Señores Licenciados Emilio Rabasa y Joaquín D. Casasús. Para qué hacer comentarios? >■ XXX El Senado Americano ha interpelado al Presidente Wilson para que informe sobre los motivos del reconocimiento otorgado a Carranza. La verdad es que desde que se die ron facultades extraordinarias a Mr. Wilson para desembarcar tropas en Veracruz, en 1914, nadie ha sabido qué ha pasado. Se dijo que el desembarque de tropas era para obligar un saludo a la bandera americana, encubriendo así, con un motivo que alhagara al pueblo americano, otros fines. Posteriormente se congratuló el Presidente Wilson de haber determinado la caída del General Huerta, y de haber dado su apoyo material a las’ facciones del famoso ochenta por ciento, que van a resultar, a Mléxico del mil por ciento, y desde entonces nadie ni nada ha podido explicar las doctrinas, contradicciones y declaraciones de Mr. Wilsn. La interpelación del Senado Americano es universal: ¿Qué es lo que se propone el Profesor de Princeton con todo esto? Aunque ya sabemos a qué aterttrnos, independientemente de sus declaraciones. XXX Un ciudadano de los Estados Unidos, que acaba de llegar de México, publica en “The Sun," de Nueva York, un articulo en el que dice que todos los americanos residentes en nuestra Patria desean vivamente que Roosevelt sea Presidente a fin de que desde luego envíe 50 000 soldados para imponer la paz en Mléxico. Afortunadamente la cosa no pasa de ser un buen o mal deseo. Si para apagar la revolución de Pizano y de la Rosa hubo necesidad de movilizar, todo el Ejército yanqui, ¿a qué milagro se recurriría para someter al caudillaje en México? Puede ser que Arredondo lo sepa. • XXX ¿Y la moneda?—¡Bajando! ¿Y el pobre pueblo?—¡Muriendo! ¿Y Don Venus?—¡Banqueteando! ¿Y la Patria?—¡Sollozando! ¿Y Estados Unidos?—¡Riendo! XXX Alvaro Obregó.n se halla enfermo en Querétaro, por lo que hizo acudiera a curarlo un médico de Tucson, Arizona. Que Obregón esté enfermo o que llame a un médico, nada tiene de extraodinario. Pero ¡llamar a un médico de Tucson cuando hay en México médicos a quienes estiman los médicos más notables del mundo! Todo irá de los Estados Unidos para estos hombres: las armas, el dinero, el reconocimiento y las consignas. Han sustituido el jarano por el texáno, el foot ball a los toros y no han enviado a Washington el Palacio Nacional, porque es más cómodo para Washington mandar a Fletcher con Carranza. XXX Ün decreto reciente de Pablo González suprime los sueldos de los Jefes y Oficiales ex-federales, que habían quedado “en Depósito" én México; pero si no reciben paga si obedecen órdenes, por lo que quedan arraigados en la Ciudad, a disposición de su Señoría Pablo González. Después de haberse sometido a todos los caprichos del enemigo, no es extraño que' éste se muestre cada vez más insolente. No hay actualmente sino dos clases en México: la que pega y la que sufre los golpes. Como siempre,1 están con la prmera los histriones del Señor; pero cuando la cíase que sufre, no se cansa de ser batida, entonces ño queda más remedio que recibir con más frecuencia, por ver si así se cansan los que pegan. .