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Arturo Víií3.rrC3.1 RíinoS cervecería MOCTEZUMA, s. a.
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^olo practicando el b*en podrém^s llegar a wet felices. Los caunuics^ los placeres y la mcHcie.ofrecen fruiciones transitorias, más aparentes que reales. Somos felices cuando trsbajánios p^r la satisfacción de elevadas aspiraciones, cnendo tenemos la conciencia de que nuestros actos merecen i# a probación de los hombres consideradón como bue. dos y hone-itoiq y cuando hrniOH podido «loiiiitiar Ion genrunieíitos ^ubuhemos, qut' dormiten en la especie humana y de b-a que no sabría decir si sou rundí-cion^fc iuhrreüifs r ella tnihina u hi^o aisVÍ iijiotí de l.m especies atíce»troles..
La virtud y la sab-dmía dtb n ser nuestros ideales; l< v rtud no» conqnj^ taré el respeto, la estiauieión de los hombres cuya sociedad nos es indispen-Hable-; lus que no practican la virtud se ven rada VrZ aislados y vi tn con ía .iilisrtura de m propia conducta. 10
gon felices oi en la sociedad ni en la sole dad; sm ¡a virtud, toda person»]! i»d resulta pequefh.
La fiabiduría noe evitará caer en el error 7 perder una parte de nuestra vida por senda* extraviada}1; antes de partir, incorporémog las vcrdade* u nuestra inteligencia; aprovechamos U experiencia de los que han tenido desgracia de naufragar, y aquella rt* los luchadores consagrados por el rrinu fo de sus principios y la grandes» de «u í.bra,
Dcjémnt la husha de nuestro pasaje en un dogma, una recríela u un recuerdo feliz: constrtiyámo’. üo rs mas fuer, te el que man destruye; no cavém -8 < aq la demolkie nuestra propia fo Ion bdano8 son las tque crecen, dejriníú ufreer a loe •.icmáá.
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KM REGAJOS
TENEMOS UN
GRAN SURTIDO i VISÍTENOS?
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