UN PROGRAMA DE EDUCACION CRISTIANA PARA LOS NIÑOS DESDE EL NACIMIENTO HASTA LOS 5 AÑOS En los artículos que han precedido hemos estudiado lo que es un programa de educación religiosa, por qué lo necesitamos y la responsabilidad que tenemos de efectuar tal programa. Ahora nos toca aplicar lo que hemos estudiado a los varios grupos que están bajo la responsabilidad de la iglesia. Comencemos con los más chicos sin indicar que son los más importantes, porque no hay edad sin importancia en la iglesia. Primeramente examinemos a estos chiquitos para entender mejor qué tipo de programa debe proveer para ellos la iglesia. Los dividiremos en dos grupos: de nacimiento a tres años, y de cuatro y cinco años. En los primeros tres años se efectúan en el niño muchos cambios y nunca encontraremos dos chicos iguales. Las emociones se desarrollan desde las más sencillas hasta una gran variedad. Durante estos años el niño va pasando de la actividad de sus ojos y de sus manos al uso de todos los medios para satisfacer su curiosidad. Su mundo va extendiéndose desde la cuna hasta incluir por lo menos parte del barrio: desde un grupo de intereses muy reducido hasta incluir también muchas cosas: de un estado de incapacidad completa hasta un alto grado de manejo de si mismo. Este proceso de extenderse sigue durante los siguientes dos años sin una división que se pueda ver fácilmente. Para el párvulo sus intereses se expresan en las palabras "yo", "mi" y "mío", él se imagina que todo el mundo le pertenece. Su curiosidad no tiene limites, su conversación consiste mayormente de preguntas. El niño de esta edad tiene poco concepto del tiempo y del espacio. Con estas características y a causa de ellas, durante los primeros cinco años el niño tiene ciertos problemas y necesidades que deben tenerse en cuenta al planear un programa de educación religiosa. Por ejemplo, existe el problema del miedo. Algunas clases de miedo son parte natural del proceso de crecimiento; como el miedo es 12 GUILLERMO GRAVES contagioso, el niño recibe ciertas clases de miedo de sus padres y de sus prójimos. Existe también el problema de la "pataleta", la cual puede ser causada por falta de amor o atención: y otros problemas como los celos, el enojo (la manera natural de enfrentar una situación difícil), y la timidez. Junto con estos problemas hay varias necesidades que debemos conocer: la necesidad de descubrir a Dios en su mundo, de saber que fuera de su casa hay personas que son amigas, y que Jesús es su mejor amigo. Existen las necesidades de sentirse seguros, de tener un sentimiento de paz y bienestar en la casa de Dios, de unir el edificio de la iglesia con la idea de Dios, y de tener amor para otras personas que son distintas a ellos. No podemos terminar la lista de necesidades sin añadir la de ser comprendido y la de tener un hogar cristiano. ¿Qué programa debe y puede poner en práctica la iglesia para estos niños? Sugerimos uno que están practicando varias iglesias con mucho éxito. Comencemos con el programa del domingo en la mañana. La escuela dominical debe variar su programa para satisfacer EL PROMOTOR DE j las necesidades del individuo: debe comenzar con los más pequeños, el Departamento de Cuna, proveyendo un cuarto con suficientes cunas. Las características de esta parte del programa deben ser: limpieza, amor, orden y quietud. Pero pronto la cuna no sirve porque el niño empieza a caminar y necesita actividad: entonces los maestros les proveen un programa que incluye cuentos, conversación, láminas, juegos, música y coritos. Este programa se extiende en el Departamento de Párvulos en el cual se incluye mayor uso de la Biblia, cuadros bíblicos, coritos y relatos de sus experiencias. La característica ce todo este programa es la falta de formalidad y el énfasis en la asistencia de la familia a la escuela dominical. Algunas iglesias están procurando algo nuevo en estos departamentos: extender el periodo de la escuela dominical. Los niños entienden poco en el culto de los mayores, y molestan a sus padres y a los demás. Extendiendo la hora en sus departamentos hay más tiempo para enseñarles, y los padres pueden participar en el culto. En cuanto al programa de los domingos por la noche, la Unión Bautista de Preparación tiene algo para los niños. Sabiendo que responden mejor al tipo de enseñanza informal de la escuela dominical. la Unión de Preparación tiene un programa del mismo tipo para preparar al niño para que participe activamente en el programa de las edades avanzadas. Igual que la escuela dominical, la Unión de Preparación procura satisfacer las necesidades del niño dirigiéndolo hacia la meta, la cual es: Experiencia y Servicio Cristianos. También la Unión de Preparación extiende las reuniones de estas edades incluyendo la hora de la predicación de la noche. La iglesia tiene actividades muy importantes durante la semana para los niños de estas edades. La escuela dominical tiene un programa los domingos en la mañana para los que pueden asistir al templo; pero tiene otro para los niños de tres años para abajo que todavía no pueden asistir. Es el Departamento del Hogar, el cual tiene como propósito: "Un Hogar Cristiano para Cada Niño". Para lograr tal propósito este Departamento matricula al niño lo más pronto posible después de su nacimiento, visita regularmente el hogar animando a la familia a tener conversaciones cristianas, oración, culto familiar de adoración, y a que asista al templo lo más pronto posible. Miles de padres que ahora son cristianos como resultado del trabajo de este departamento son el testimonio de su valor. Otra actividad durante la semana provista para los párvulos y dirigida por la Sociedad Femenil son los Rayitos de Sol. Como podemos suponer, sus actividades son misioneras, usan las historias misioneras, cuentos de otros paises y la presentación del mensaje misionero de la Biblia en su forma más sencilla. Sabemos que muchos de los misioneros que están sirviendo al Señor por todo el mundo, sintieron el llamamiento por primera vez en los Rayitos de Sol. ¿Podemos negar la importancia de la obra entre la niñez? Dios nos ha entregado las vidas de estos niños, y por medio de ellos nos abre las nuertas de los hogares, fiándonos la oportunidad de ganar a las personas que viven en ellos. Tal vez han pensado que esto es demasiado trabajo, pero no es asi. Vale la pena, y la obra demanda nuestros mejores esfuerzos. El cimiento de la iglesia de mañana son los niños de hoy. F "ION CRISTIANA "Ocúpate en Leer” Por T. O. de Zazueta Hablar de libros es para mi tema de gran interés, y no hay cosa mejor de que pudiéramos ocuparnos en esta velada porque los libros en las agrupaciones, en las iglesias, en los hogares, son índice de cultura, así como las pequeñas o grandes bibliotecas son signo de adelanto en la vida de los pueblos. Para el cristiano es un mandamiento divino el leer e instruirse en los libros. Es mandamiento que vive en mí. Por tal razón, llamo a los buenos libros mis maestros y mejores amigos. En cierta ocasión en que visité una grande biblioteca, me quedé asombrada al ver tantos libros cuidadosamente clasificados. Algunos eran antiguos, otros modernos: me pareció estar en presencia de todos los siglos. Después de dos horas de hojearlos y leer algunas partes de los que más me llamaron la atención, me senté a meditar, y vino a mi memoria aquel supuesto diálogo entre libros, los cuales se disputaban el mayor mérito según el beneficio impartido con su enseñanza. Habló el primero y dijo: “Yo soy el rayo que vibro sobre la humana conciencia; Soy la luz, soy la ciencia, soy el libro. ¡Oh. ciencia! ¡Fuente de perenne vida! ¡Oh, columna encendida Que nuestro paso incierto Por la lóbrega noche del desierto, Conduces a la tierra prometida!” Tomó su turno otro libro y habló sobre asuntos sociales. Parecía estar inspirado en lo que nosotros llamamos "La Regla de Oro". Para terminar, dijo: "Yo quisiera subir la altura más alta, Hollar con mis pies su testa Y de pie sobre su cúspide Ser allí no un adorno en su cabeza Sino cual Cristo en el Monte de la Transfiguración, Cual Moisés en el Sinai de las tormentas, Y en las grandes tempestades, Cuando el cielo sus picachos zigzaguea, Recoger el estilete de algún rayo, Y grabar sobre sus piedras, El decálogo sin par de la armonio Que es la lógica en acción de las esferas." Asi continuaron hablando otros libros de no menos importancia, como los grandes mentores que por veinte generaciones habían prestado sus servicios en las aulas, y al concluir recomendaron también otros libros dirigiéndose a los niños de esta manera: "Es puerta de luz un libro abierto. Entra por ella, niHo, y de seguro, Que para ti serán en el futuro Dios más visible y su poder más cierto. El ignorante vive en el desierto Donde es el agua poca, el aire impuro. Un grano le detiene al pie inseguro, Camina tropezando y vive muerto. En ese de tu edad abril florido Recibe el corazón las impresiones Como la cera el toque de las ma- nos. Estudia, y no serás, cuando crecido, El juguete vulgar de las pasiones Ni el esclavo servil de los tiranos." Un libro que trató de economía en todos aspectos, al llegar al uso y distribución del tiempo, dijo: "No mates el tiempo porque después el tiempo te matará a ti. No digas: •No tengo tiempo’. Todos disponemos de tiempo; lo que se requiere es un horario para hacer una sabia distribución del mismo." Por último, una voz que salió de un obscuro rincón, donde estaba la sección de libros religiosos, calló a todos, diciendo: "Sin mi, nada podéis hacer ... Buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia ...", el libro de donde salló tal voz es la Biblia. Me volví a mi casa convencida más que nunca del deber que tenemos de leer libros para estar en contacto con las corrientes del pensamiento humano y el progreso de la ciencia; y convencida también de que sobre los libros está la Biblia, la cual con su luz y su doctrina salvadora nos garantiza bienes eternos. 13