* La Somdua ok Fi’extk. -«geHieeSWHWw».-»®*»»» r,,.íKt1.-m>irimlilx™r.iiT.-. ■ 1.11111.1.1111.11 m.-...i.i-n riir ■ --ir: 1-. r m uii...t..±j — las cu^stionv :is partes exacto, tanto de esa resohicton como de embargo, | la conducta observada por los diputa- Sonó la campanilla, se dio cuenta del v que d.e las estacas proceso, se abrió el debate y Santos Coy s nuevas tandráix dos dio lectura a un magnífico alegato, que hay vestigios g e o-1 es una pieza acabada de elocuencia v bra luieva. También ataca I). Santiago Laviu el Ínteres público en la presente ti asi como en la quo su halla- pendiente rebihva al nuevo rio Lavin ó sea ata Ixusn. muer mi presa ha privado a la pobla-agua que tiene de San Fevnan- -UO Pili que ue lueuoseí tercer perito quo ma- dos. r el e^L.ulo Jo destritecion en que i U presa, .■-'ten las m una buena pieza forense. La Secretaria dio lectura a un escrito demanda,; enviado por el Lie. Martinez Ancira, (que estaba enfermo) que no es defensa, tajo do ni justificación, ni pieza literaria, ni fo-El Sr. Lavin al impedirme i reuse. "i , eion -.le ViiLi I voucediea de 1 do, segei escritura do 4. de Agesto de uia 10 primero 1 m« nace el A Por todo lo e. á la respetable 2 5 i la sentencia, del inferior se sirva declarar no ha habido lugar ¿í ? de la obra denunciada, y condenar tí D. Santiago Laviu como litigante temerario y de mala fo a la indemnización de los daños y perjuicios que me ha causado y al pí^go de las costas procesales y personales, conforme ?í los artículos 12-11, 211 y 212 del Código de procedimientos. Protesto lo necesario. Durango, Febrero 7 de 1832.—Juan ST. FIotcs.—Bú-brica. El Sr. Martinei; Ancira, tiene un estilo extraño, extravagante y que á veces raya en el ridículo como la nota que obra en el proceso en que se acusa de haber salvado á Santos Coy que él llama su hijo adoptivo. En seguida el Lie. Horcasitas en un. a reclamación oficiad que yuntamiento. xpuesto, suplico y pido] tono acre y con lenguaje muy severo hi-.Sala, que revocando zo su defensa; de un capitulo .de ácusa----c... ■¡■we- cion salió victorioso, del Otro intentó la suspension sorprender á los diputados que son legos cion salió victorioso, del Otro iutéiitq en- la materia, con ecepción de Peña, Azuela y Rodríguez J. Juan, con sofismas que desecharía un principiante dé lógica y de derecho; intentó decimos, sorprenderlos y aparecer inocente, más no lo consiguió por que Santos Coy en una improvisación, mejor que su discurso, demostró hasta la evidencia y con la claridad de la luz meridiana, "la infracción cometida por Horcasitas; insistió este en su sofisma como la única ta- EL ULTIMO REINADO. El Domingo del mes anterior, tubo lugti”'ei jurado de calificación; de los delitos ae que se acusaron á los Magistrados Lies. Esteban Horcasitas y Jesus M Martínez Ancira por el Sr. Lie. José M ? San tos Coy. El público conoce ya la resolución del Congreso: Horcasitas absuelto por mayoría, Martínez Ancira condenado por mayoría igualmente; pero no conoce algunos detalles, y vamos á exponerlos para que se forme íin juicio imparcial y bla de salvación de que se agarra el náufrago que lucha desesperado; le retó Santos Coy á que le señalará la ley ó artículo expreso que justificara su procer dimiento, no la citó y concluyó el debate. . Comenzóla discucion entre los diputados, las vacilaciones, los trabajes de salvación. El diputado Peña, hizo ver, lo necesario que se hacia poner un hasta aquí y dar un ejemplo de justicia, so pena de hacerse complices de los infractores de las leyes. Sus palabras sin embargo, no pudieron nada en el ánimo de Maynes, compadre ó amigo intimo de alguno de los acusados, de Pantaleon