TIEMPO DE B. C., Y SONORA — PAGINA 15
TMIOill DEL DIPUTADO RTO1IF0RME DEL AVILA LMMHO
en cuenta el soberbio fracaso de la campaña alfabetizante puesta en marcha por Manuel Avila Camacho, precisamente en la fecha en <jue dio a conocer su Cuarto Mensaje Anual al pueblo mexicano.
Respecto a Ja situación económica porque atravesaba la nación en aquel entonces: el licenciado Ahumada habla de una reestructuración en el aspecto nacional, a fin de evitar la centralización de la vida económica en una región de la cual todas las demás se convierten en tributarias.
Otros problemas que todavía siguen vigentes fueron tratados también por el legislador sonorense al contestar el Cuarto Informe rendido por el general Avila Camacho. Por considerarlo de interés político e histórico, “TIEMPO” transcribe los puntos más objetivos de ese documento. Helos aquí:
Herminio Ahumada Jr.
bre semejante que apoye posteriormente 'las uniformidades de la vida real" e hizo hincapié en que "el esfuerzo económico que eUo representa queda patentizado con las cifras importantes que se han gastado en la educación nacional y que sin embargo no han sido suficientes para resolver definitivamente los problemas".
Señaló también el diputado Ahumada que por eso "se ha recurrido a la cooperación de particulares para .realizar obras educativas en común. Pero desde luego se ha hecho necesaria la formulación de un plan de tal naturaleza que a la vez fortalezca la situación administrativa de la enseñanza, haga posible el desarrollo pleno de las posibilidades sociales de la educación" y que es "capítulo esencial en el ramo educativo la campaña nacional contra el analfabetismo que responde a los postulados fundamentales del programa irevoluciona-rio. Todo el país escuchó conmovido el mensaje en que se le expusieron los motivos de la ley de emergencia dictada por el gobierno nacional", porque "enseñar o leer y bkjego dar a leer al pueblo los mejores libros de la humanidad son los más adecuados medios permanentes que tiene un país como él nuestro para mantener en alto su cultura .
En relación con un problema surgido en aquel entonces en Universidad Nacional Autónoma de México, dijo el licenciado Ahumada que "contra lo que los suspicaces pudieron creer, esa intervención (la del presidente Avila Camacho), fue modelo de prudencia .y buena fe. Se recurrió o los grandes moti
vos que fortalecen las instituciones: Su tradición y sus ideales permanentes. Congregado un grupo de exrectores de la institución,* coincidieron hombres de las más contrarias ideologías y de las procedencias más opuestas, unidos solamente por el amor a la cultura y por el respeto a la madre que ha formado tantos nobles generaciones".
En seguida el representante popular sonorense hizo una amplia exposición acerca dél estado de guerra en que se encontraba la república y sobre todo de la participación de México en la lucha contra el "eje" integrado por países fascistas tales como Alemania, Italia y Japón, augurando la pronta victoria de las naciones unidas, misma que se sucedió el 25 de abril del año siguiente. Es decir, en 1945.
Herminio Ahumada calificó en esa ocasión a la guerra como "el asesinato en maso organizado a sangre fría, con el aprovechamiento de todos los adelantos de la técnica, de la civilización". Hizo alusión a la confianza del país en lo que respecta a solucionar los problemas propios de una posguerra, problemas que ni siquiera fueron tomados en cuenta ni antes ni después de la primero guerra mundial de 1914.
EN LA POLITICA NO
SE SUCEDEN MILAGROS
Ya en aquellos tiempos había lo que ahora en política se les conoce como 'emisarios del" pasado", y prueba de ello es que e* diputado Ahumada se dirigió al "Hombre de la Papada": en los términos siguientes: "Los impacientes, los descontentos, los utopistas, tienen la creencia, erróneo desde 'luego, de aue el Poder es varita de virtud; que basta al Ejecutivo mover en ademán de traumaturgo aquella varita, para que como en los cuentos de hadas, todo se transforme. Para que en 24 horas, los complicados problemas que tiene ante si, se resuelvan como por encanto. Para que los hombres que lo rodean (al Presidente), que contribuyeron al triunfo de la Revolución renuncien a su carrera política, a sus ambiciones, a sus pasiones, y en un rasgo de generosidad se eliminen espontáneamente para que vengan a gobernar ellos, los que se consideran hombres "mejores", más "aptos", más "preparados", más "cultos".
"En política no hay milagros. Los hoy en el orden divino y aún dentro de ese orden, aunque los ángeles en la Escala de Jacob no tienen alas, no por eso vuelan, sino que suben y bajan ordenadamente de escalón en escalón.... Nos recuerda Francisco de Sales".
(Al principio de la contestación y en este párrafo, Ahumada hizo alusión a Dios y al orden divino,, respectivamente, tal vez para destacar su adhesión al Presidente Avila Camacho, quien abiertamente declaró: "soy creyente").
Posteriormente el licen ciado Ahumada enfatizó "que los intransigentes, en la censura, no esperen milagros. Si fueran justos, continuó, se conformarían con lo que es lógico, humano lograr".
Refiriéndose a esos mismos intransigentes, les aclaró que "la Revolución, a pesar de todo y de todos, ha llegado a las clases obreras y campesinas; las ha conmovido, las ha hecho sentirse a sí mismos y sería torpe, inhumano, antipatriótico pretender echar por tierra sus conquistas. No podría hacerlo ningún gobierno sin exponerse a la ira justificada de los que sufren. No se juega con los desheredados abriéndoles los ojos, para pretender después cegárselos con además brusco y tiránico'.
Terminó el licenciado Herminio Ahumada de contestar el infórmeg«3 del General Manuel Avila Camacho^fe elogiando la labor presidencial grada durante los cuatro años co-^s*' rrespondientes y en tal forma con^g su contestación logró conmover a Icg^g opinión pública nacional y a 'a in-ternacional con sus 'certeros puntoj¿Ti de vista relacionados' con la Ségun^^, da Guerra Mundial en la que Mq^* xico tomó parte casi simbólicamente^ te. Es decir, nuestro país* sacrif su economía en gran parte y durare*^ te mucho tiempo, así como a unc^5-8 cuantos hombres pertenecientes al Escuadrón 201 (aéreo) que combatió contra los japoneses en el Pacífico.