¡QJatnad. al Campamento ! Pot Jean Middleton Cuando pensamos en la iglesia del mañana, ¿qué grupo de personas vemos? Los jóvenes, los intermedios, y los primarios, puesto que ellos van a ser los dirigentes en nuestras iglesias del futuro. Ahora, ¿qué estamos haciendo para enseñarles y prepararlos para la obra? Posiblemente pensaréis: “Tenemos escuelas dominicales, Uniones de Preparación, Rayitos, Auxiliares de Niñas y Embajadores del Rey." Si, debemos tener todas estas organizaciones en nuestras iglesias, y si las hay son muy buenos medios de preparación. En la escuela dominical se enseña la Biblia a los alumnos, pero, ¡cuán poco tiempo pasan en una clase en la escuela dominical! Ciertamente los jóvenes deben estar en la escuela dominical; pero ésta no proporciona toda la enseñanza que necesitan los obreros. En la Unión de Preparación aprenden a hablar en público, y a dirigir las reuniones; pero tampoco se les proporciona toda la preparación que necesitan los obreros del mañana. En los Rayitos, las Auxiliares, y los Embajadores, estudian algo de la obra misionera de todo el mundo, lo cual es muy importante en el desarrollo de la vida cristiana. Ahora, pensemos: llegan las vacaciones, y ¿qué pasa con los niños y jóvenes? ¿Están siempre en la escuela dominical, Unión de Preparación, Rayitos, Auxiliares, y Embajadores? No. ¿Dónde están? Unos salen de vacaciones, otros, el domingo se van a la playa a pasear, algunos están trabajando y llegan muy tarde para asistir a las reuniones. Estas son algunas de las excusas que 16 nos dan cuando tratamos de averiguar la causa de la. ausencia de muchos. Todo esto sucede porque en el programa de la iglesia no hay alguna actividad social para la temporada de vacaciones. ¿Hemos pensado en la conveniencia de tener en las vacaciones un campamento para los niños, para los jóvenes, y aun para los adultos? Seria bueno tener un campamento bautista donde pudieran ir los miembros de nuestras iglesias con sus familias durante las vacaciones, un lugar donde los gastos no sean tan elevados y las personas puedan disfrutar de un compañerismo cristiano. ¿Cómo podemos tener un campamento y dónde? Primero, hay que conocer la necesidad de tenerlo. Segundo, conseguir personas que ten- < ** ul _ y» ■ ¡ ■fe* ™ ~ r-4. * -I ■: Títeres^*»- ;■ gan el deseo de trabajar en él. Tercero, nombrar un comité para planear el programa y buscar el lugar. Hemos hablado ya de la necesidad de tener un campamento bautista, no solamente para proporcionar un lugar de recreo, sino también para el beneficio espiritual de los que asistan. Ahora, lo que resta, es empezar a trabajar. El comité tiene que buscar lugar para el campamento. Al escoger dicho lugar hay que procurar que haya en él agua potable, espacio para carpas o galpón para dormir, un rio o playa para nadar, espacio para deportes; en fin, lugar para estar al aire libre, y donde haya medios de transporte. Una vez conseguido el lugar, el comité tiene que planear el programa, el cual debe incluir EL PROMOTOR DE algo para la vida espiritual, la vida social, y la vida fislca. Deben tenerse estudios bíblicos y misioneros; recreación dirigida y alimentos nutritivos. El paso siguiente es buscar con bastante anticipación los maestros, pues ellos necesitarán tiempo para preparar los estudios que van a presentar. Es de suma importancia hacer la propaganda con tiempo, de manera que las iglesias sepan con bastante anticipación la fecha del campamento y cuál es el programa que se desarrollará. En Chile tenemos campamentos en cada distrito. En el Distrito Central (Santiago) tenemos una propiedad, pero en el sur, y en el norte no, pero de todos modos se tienen campamentos. En el Distrito Central, en enero y febrero de 1955, tuvimos cuatro campamentos: familiar (toda la familia); jóvenes (17-30); intermedios (13-16); y primarios (9-12). Todavía no tenemos edificios, pero vamos allá y dormimos en carpas, comemos debajo de los pinos y tenemos las clases en el sol para calentarnos. (El lugar está cerca de la playa y hace frió siempre.) Los campamentos duran una semana o diez dias cada uno. Siempre procuramos que antes del desayuno haya un servicio devotional, y después hay estudios bíblicos misioneros. En la tarde, quedamos en libertad para jugar, ir a la playa o descansar. Después de la cena tenemos un fogata con una hora de juegos y terminamos con un culto de adoración al Señor. En este culto, muchas personas hacen su manifestación de fe, otras consagran sus vidas al Señor y, otras dedican sus vidas a servicio especial. Después de estos dias de compañerismo cristiano en que hemos vivido juntos, estudiado juntos y orado juntos, todos volvemos a nuestras iglesias listos para servir mejor en la obra del Señor. EDUCACION CRISTIANA LOS MATERIALES DE LA ADORACION. . . (Viene de la página 13) 2. Notemos el orden que llena estas cualidades. En este estudio no haremos un orden fijo de culto porque el orden de cada culto varía según el tiempo del culto, la situación de la iglesia, el tamaño de la iglesia y las necesidades de los adoradores. Podemos anotar algunas sugestiones en cuanto al orden. 1) Los anuncios deben venir en la primera parte del culto. Los anuncios no deben quitar demasiado tiempo a la adoración. Es mejor decirlos todos de una vez. Después de esto el culto puede seguir con su propósito de adoración a Dios. 2) Antes del sermón es bueno que la congregación cante un himno o un himno especial por el coro o por una persona. Si algún pastor visitante va a predicar es mejor presentarlo antes del himno y no directamente antes del sermón. Debemos preparar a los oyentes para el sermón y esto podemos conseguirlo en el tiempo antes del sermón. 3) La ofrenda es parte de la adoración evangélica. Debe ser un periodo de adoración. No debemos dar excusas al levantar la ofrenda. 4) Una vez que el culto esté en progreso, el pastor debe hacer todo lo posible por mantener un espíritu de reverencia. ----------O--------- UNA RECOMENDACION Deseamos compartir con nuestros lectores una carta que acabamos de recibir de un hermano de México. Tocante a su estudio del libro "Las Siete Leyes de La Enseñanza" él dice: "Quiero decir en pocas palabras, que nunca habia leído ni estudiado algo semejante. Creo que este manual será de gran aprecio para aquellos que desean aumentar sus conocimientos pedagógicos. Sus conceptos están explicados en una forma tan sencilla que cualquiera puede comprenderlo. Además el fondo es interesantísimo y no obstante ser una obra sencilla es extensa y profunda.” Todo pastor, laico, maestro de escuela dominical u otro obrero cristiano que no ha tenido oportunidad para estudiar en un seminarlo debe aprovechar estos estudios por correspondencia. Acabamos de revisar el curso y hemos añadido muchos libros nuevos, de gran provecho para los maestros. Pastores, superintendentes de la escuela dominical, ofrezcan ustedes a sus maestros la oportunidad de estudiar un buen libro sobre una fase de la enseñanza, en una clase dirigida por usted u otra persona bien preparada. Pida hoy mismo de la Casa Bautista de Publicaciones información sobre nuestro curso que ofrecemos sin ninguna obligación para que los obreros cristianos puedan prepararse mejor para servir a nuestro Señor Jesucristo a fin de extender su reino en la tierra. 17